Prólogo

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Antes de comenzar a leer, pido disculpas por posibles faltas de ortografía, uso excesivo de puntos suspensivos, eran errores que tenía mucho al principio, prometo que irán desapareciendo conforme la historia avance.

Sin más, gracias por leer.

Los personajes de Inuyasha son propiedad de Rumiko Takahashi, la historia es mía.

PRÓLOGO

Tu vida la marca quién eres...

Kagome Higurashi es hija única de Enzo y Nahomi Higurashi, su padre es un importante hombre de negocios, aunque su poder económico ha venido menguando... su madre provenía de una familia de clase baja e inculcó en ella, tanto humildad como nobleza... es una chica alegre, tal vez un poco ingenua, aprecia a sus amigos y es muy fiel a sus sentimientos... ella está por cumplir dieciocho años e ingresar en la prestigiosa universidad de Tokyo, Tōkyō Daigaku, TōDai, aunque no es bien visto por su padre, ya que es una universidad pública... por primera vez ella había discutido con él hasta el fastidio y tras superar su examen, lograría estudiar ahí... su mayor razón, Inuyasha Taisho.

La marcan tus deseos...

Creció escuchando a su madre y a Izayoi Taisho decir que ella e Inuyasha harían una pareja perfecta... se conocían desde niños, prácticamente crecieron juntos, pues ambos jefes de familia siempre tuvieron negocios en común... Kagome era dos años menor al peliplata, siempre lo admiró y desde pequeña se arraigó en ella la idea que ellos dos se casarían... cuando siendo ambos adolescentes y él le dijera que también le gustaría casarse con ella, Kagome lo amó. Y ese era su mayor deseo. Ser la esposa de Inuyasha.

La marcan las personas que te rodean...

La mayor parte de su vida escolar Kagome la pasó en internados para señoritas... fue ahí, donde conoció a Sango, su compañera, cómplice y mejor amiga, una chica alegre y espontánea, ella era feliz, a pesar de ser una chica que desconocía quiénes habían sido sus padres, su madre murió dándola a luz en un hospital cualquiera de la gran ciudad, sin nadie que la reclamara fue puesta en adopción... así había sido aceptada por una pareja de clase media alta quienes la cuidaron y amaron sobre todo; años después nació un pequeño de sus ahora padres, Kohaku, su pequeño y querido hermano... también estaba Yura Sakazagami, una chica rebelde y liberal, Yura le daba el empuje y valor para hacer cosas que Kagome por sí sola, dudaría en hacer.

La marcan las circunstancias...

Tras ingresar a TōDai, Kagome se encuentra con que ha vivido en una ilusión... amando a una persona que "al parecer" no la ama, aunque se había esperado una situación desfavorable, era mucho el amor que sentía tenerle que pretendía luchar por su amor... borraría de la cabeza de Inuyasha la idea que tenía de ella de ser solo una inocente niña, alguien a quien se podía amar como amaría a su hermana, si la tuviese... eso había sido algo duro de escuchar, más cuando él se lo aseguraba a su espectacular novia, Kikyo Takeda... su ahora rival.

Y más que nada... tus actos...

-Dejar de ser tu inocente Kagome... ¿pero cómo?

-Yo podría ayudarte con ello...

-¿Tú?...

-Mph... ¿y por qué no?

-¿Po-por qué... lo harías?

Y con una sonrisa torcida ocultó su verdadera razón -diversión... tal vez.

-Y... ¿cómo?

-Harás todo lo que yo te diga...

-Jamás podría hacer eso...

Una vez que sus caminos se cruzaron, él se encargó de entrelazarlos... sí Kagome no hubiese sido tan ingenua no hubiese entrado en ese juego... Bankotsu solo buscaba revancha, Inuyasha y él siempre fueron rivales natos, él siempre disfrutó de fastidiarlo, pero en esta ocasión Inuyasha le había quitado un par de cosas que no tenía pensado perder... y él disfrutaría su venganza en aquella joven pelinegra, la que después descubriría sería la virginal prometida de Inuyasha... ella también sería su más difícil y apasionado reto...

-Ba-Bankotsu... yo... yo... acepto.

-Olvídalo. Ya no me interesa.

-¡Espera!... haré lo que me pides...

-¿En serio?, pues... las cosas han cambiado.

-¿De qué forma?

-Quiero ser el primero.

La decisión fue difícil de tomar, pero ambos jóvenes aceptarían jugar un mismo juego... cada uno por sus propias razones y los dos, por las razones equivocadas...

Pero pasarían por alto que no se puede jugar con fuego sin salir quemados... él terminaría dañándola y ella utilizándolo, y el despertar sexual de la joven generará en ambos un deseo y una atracción que no esperaban... el amor se hará presente... ¿en cuál de los dos?... pero sin olvidar, que entre ambos muchas cosas están de por medio.

Razones Equivocadas (Disponible en Amazon como original)Where stories live. Discover now