Farewell

945 65 32
                                    

El silencio que abunda en la calle dónde vivo me advierte de que es tarde. Demasiado tarde. Al bajar del taxi, me doy cuenta de como las estrellas de Los Ángeles caen sobre mí y decoran el cielo oscuro de la madrugada. Casi no me mantengo en pie por el exceso de alcohol en mi cuerpo, así que voy caminando con cautela hasta llegar a la entrada de mi casa. Inhalo y expiro un par de veces mientras me apoyo en la pared antes de buscar las llaves y cruzar la puerta. Paso mis dedos por el cabello rubio y después los deposito en mi nuca mientras pienso en cómo voy a afrontar lo que me espera.

Con las llaves pasando de una mano a otra, tiemblo y me muerdo el labio inferior. Sólo tengo ganas de llorar. Quizás es el alcohol, pero yo sé que no. Me he estado preguntando durante toda la noche si seguirá enfadado conmigo. Si se habrá marchado. Si me habrá dejado con una nota en la mesa. Si se habrá cansado de esta maldita situación que tarde o temprano acabará con lo que tenemos.

Por favor, no. 

Solamente pido que no sea así, que no se haya ido. Que no se haya marchado de mi casa, de mi vida.

Porque no concibo mi mundo sin Josh.

Sin embargo, lo entendería. Si yo fuera él, me alejaría de mí misma. Y no a metros de distancia, si no a kilómetros. Me he comportado como una estúpida y lo único que he hecho es empeorar las cosas. Como en todo lo que hago. En medio de una discusión, me he largado para tomar un par de copas con amigos. Y quién dice un par, dice cuatro. Le he dejado con la palabra en la boca y le he cerrado la puerta de mi casa en sus narices.

No es la primera discusión que tenemos en este mes. Últimamente lo hacemos mucho y por tonterías innecesarias. Discutimos y luego follamos. Y se nos pasa, porque nos queremos. Pero esta vez, sé que ha sido diferente. Esta vez, la única que lo ha echado todo por la borda he sido yo.

Al entrar, Pippi me recibe con una alegría inmensa. Susurro un saludo mientras la cojo y deposito un beso en su cabeza para luego dejarla en el suelo. Unos sonidos leves provenientes del salón captan mi atención antes de subir las escaleras para ir al dormitorio. Intento mantener el equilibrio mientras camino pero me topo con un cuerpo que entorpece mi paso hacia el sonido que proviene de la televisión.

No toco el suelo porque sus brazos me han rodeado y me cogen de la cintura. Siento una satisfacción enorme cuando veo que no se ha ido. Que sigue aquí a pesar de haberme comportado como una niña de quince años. Que me sigue esperando por las noches antes de irse a dormir. Que sigue preocupándose por mí.

Cuando levanto los brazos para rodear su cuello, él se aparta en un instante. Su lejanía hace que me sienta pequeña a su lado y me quiera esconder para no pasar la vergüenza que inunda mi pecho. Miro al suelo pestañeando y asiento con la cabeza para darle a entender que sé cómo se siente. Vuelvo a observarle y de repente deseo ser una tortuga para poder desaparecer en mi caparazón imaginario.

Sigue enfadado. Lo sé. Lo veo en sus ojos color avellana. Trago saliva antes de hablar pero Josh pasa por mi lado sin ni quisiera preguntarme algo. Su indiferencia me está matando así que digo lo primero que se me pasa por la mente antes de que suba las escaleras y se vaya de dónde yo estoy parada.

"¿Por qué no estás... durmiendo?" hipo girando sobre mi misma para enfrentarle.

Josh se para y me dedica una mirada que atraviesa cada uno de mis órganos. No es una mirada de odio, ni si quiera de tristeza. Es una mirada que está llena de cansancio, como si no pudiera más. Impasible. Neutro. Casi prefiero que muestre algo, aunque sólo sea enfado. No obstante, me mira pero a la vez no lo hace. Y eso me angustia más que cualquier otra cosa.

Está harto de mí y probablemente quiera acabar con lo nuestro. Lo nuestro que ni si quiera es una relación porque no podemos hacerlo público. No todavía. En teoría y según un papel firmado, él tiene a Claudia, que estoy segura de que me da mil vueltas. En todos los aspectos.

Joshifer: "...a very different love."Where stories live. Discover now