Warriors Cats:El Retorcido Destino de Estrella Diferente

Huida

No se cuantas lunas han pasado desde que conocí a Belle pero... cosas han pasado. Al parecer ahora Parches Manchados esta preñada de mis cachorros. Eso me hace muy feliz, pero los gatos del clan se están contagiando cada vez más y más de esta Tos Verde. Y la verdad, va siendo hora de decirle a Zarpa de Niebla y Zarpa de Águila su verdadero padre. Con todos esos pensamientos, me levante de mi nido. Trate de despertar a Parches Manchados a mi lado, y ella abrió sus hermosos ojos azules. Dí un ronroneo, y ella me respondió con otro. Sus ojos cambiaron a unos un poco tristes en lo que se levantaba. ''Nuestros'' cachorros ya aprendices estuvieron actuando un poco raro últimamente, hablando detrás de la Guarida de los Aprendices, yendo solos al bosque sin avisar a nadie y esto nos preocupa a ambos. Observe a Nube de Árbol volver con la patrulla que había enviado el día anterior. Solamente habían traído dos ratones, mejor que nada supongo.  

Salí y fui a despertar a los guerreros que elegiría para la siguiente patrulla. Una vez hecho, decidí que Manto Azul debería ir con Zarpa de Niebla y un par de guerreros y aprendices más. Fui a despertar a los aprendices mientras Manto Azul elegía otros guerreros. Desperté a Zarpa de Niebla y a Zarpa de Águila ya que Garra Anaranjada iría con Manto Azul. Les dí una sonrisa cálida al despertarlos junto con una lamida en la cabeza a cada uno. Sea o no sea su padre, ellos son mis cachorros. Ese pensamiento me recordó amargamente que debía decirle a Parches Manchados sobre decirles a los aprendices sobre su verdadero padre. No se si fue porque quizás puse una mala cara ante el pensamiento o un motivo fuera de mi poder, pero los aprendices se miraron el uno al otro con una expresión preocupada. Ambos se levantaron y salieron de la guarida sin dirigirme una palabra. Mire algo triste como los aprendices se alejaban de mi paso a paso. Salí detrás de ellos, pero ellos ya habían ido con sus maestros. 

Fui a preparar otra patrulla, esta vez lo guiaba Rayas de Tejón junto a Zarpa de Ocaso. Lo envié junto a Estrella Blanca, para mantener un ojo sobre él. Ella iría junto a Zarpa de Cenizo, su aprendiz de pelaje oscuro. Fui junto a Parches Manchados para hablar sobre si deberíamos decirles a los cachorros sobre su...legado. Di unos pasos buscando a mi pareja, y la encontré cerca de la salida deseándole buena suerte a sus cachorros. Ellos se fueron, seguidos por la patrulla de Rayas de Tejón. Fui hacía mi pareja y la invite a patrullar cerca del nido de los dos patas, allí no habría nadie. Tendríamos mala suerte si estuviera Belle, pero con el frío no creo que salga de su hogar. 

Ambos fuimos pero esta vez ella se estaba quedando atrás. Quizás yo era muy obvio con mis intenciones. Una vez habíamos llegado al río, me senté y con un movimiento de cola la invite a sentarse también. Ella lo hizo, y dio un suspiro luego de sentarse. Supe entonces, que debía comenzar yo la conversación. 

Sabes de lo que voy a hablar...¿verdad? -maullé mirando al cielo, sin ver realmente nada interesante-.

Creo que lo se -suspiro mirando al suelo, para luego mirar hacía mi-. Es sobre nuestros cachorros, que tu no eres su verdadero padre ¿verdad?

Si. Se que pensábamos decirles cuando sean aprendices por la edad pero... el que hayan sido hechos aprendices antes de tiempo ¿afectara el decirles?. 

Ya han pasado bastantes lunas Ojos Diferentes. Lo mejor es decirles ahora, ya que tienen alrededor de la edad que tendría unos aprendices normales. Sin embargo Canción de Pájaro esta ocupado hoy, así que hoy no podrá ser. Que te parece...¿mañana?.

Yo sentí y ella se fue sin darme la palabra, con ojos tristes y angustiados. Yo podía sentir ese dolor también, pues yo amé...amo esos cachorros como si fueran míos y amaré a los que vienen de la misma forma. Noté que Parches Manchados se había ido, y me decidí seguirla. Pero antes, volteé y me fui a la casa de Belle a buscar alguna planta. Una vez llegue dentro de el huerto del lugar busqué alguna planta. Pero una vez llegue, no parecía haber ninguna. Olfateé entre la tierra, para encontrar hojas y flores marchitas. Volteé para irme pero escuche una voz detrás de mi.