Capítulo 21 (Corregido)

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(En multimedia, el despacho de Angelo)

Dedicatoria a los lectores que comentaron en el capítulo anterior:

Mafer-MC (Primer comentario)

★★★★★★★★★★★★★★★★

Pov Valery:

He terminado todo el trabajo pendiente y tras suspirar, decido salir a tomarme un café y puede que un bollo. Ya instalada en la mesa de la terraza de la cafetería, respiró aliviada al sentir la delicada brisa sobre mi rostro.

¡Hacía un día estupendo para estar fuera!

— ¿No crees que hace un bonito día para encontrarte con viejos amigos, Valery? —Preguntó una voz ronca a mi lado derecho.

Giré con cuidado mi cabeza y me topé con un desconocido con una barba tupida y unas pistan de vagabundo, sin embargo su voz era inolvidable para mí.

Eric...

—Eric... —Dije yo antes de estirar mi mano hacia mi bolso, con la clara idea de llamar a la policía o a Marcus.

Pero Eric se dio cuenta de mis intenciones y me sujetó la mano con mucha fuerza y clavó sus ojos furiosos en mí.

—Haz un solo movimiento y te juro que te mato aquí mismo. Ya no tengo nada que perder y la verdad es que me daría mucha satisfacción verte muerta —Dijo Eric sonriendo maliciosamente.

—De acuerdo. ¿Qué quieres? —Le pregunté mirándole asustada.

—Quiero que desaparezcas de mi vida, Valery. Me has jodido hasta tal punto que no puedo salir a ninguna parte sin ir disfrazado... Quiero hacerte sufrir igual que tú me has hecho sufrir a mí, quiero dejarte sin nada —Me susurró Eric sin dejar de sonreírme con malicia.

Mi cuerpo no dejaba de temblar y rezaba en silencio porque alguien se diese cuenta de lo que estaba pasando. Y parece ser que el universo se apiadó de mí porque en ese momento, Ángelo apareció justo detrás de Eric, quien al escuchar la voz del italiano, salió corriendo.

—Has tenido suerte pero la cosa no termina aquí —Dijo Eric desapareciendo por mi izquierda.

Cuando el primo de Marcus se fijó en mi cara y apretó el paso para llegar hasta mí. Me tomó las manos y me preguntó qué había pasado:

—Valery, ¿estás bien? —Me preguntó Ángelo contemplándome preocupado.

—Sí, estoy bien. Pero tenía tanto miedo, Eric estaba hace un momento aquí, ibas vestido como un mendigo y...—Le expliqué nerviosa mientras mi voz sonaba temblorosa.

—Vamos, tenemos que volver a la empresa, Marcus tiene que saber esto —Dijo él tomando mi mano y dejando una cantidad de billetes considerables sobre la mesa para pagar lo que había tomado.

Después entramos en su coche y se metió a toda prisa en el parking de la empresa. Cuando salimos del coche, Ángelo no me soltó la mano hasta que lleguemos al despacho de Marcus, quien por suerte no estaba en ninguna reunión.

— ¡¿Qué?! —Pregunto Marcus alterado después de que yo le contase lo sucedido con Eric en la cafetería.

—Tranquilo, yo llegué antes de que le hiciera nada —Dijo Ángelo pasándose las manos por el pelo.

—Muy bien, desde hoy no vas a salir sin tener como mínimo a dos guardaespaldas contigo. Y tendrás el móvil siempre contigo, cuando llegues a cada sitio deberás avisarnos —Dijo Marcus con las manos en jarras y una mirada cabreada.

Siempre Juntos (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora