95 días sin Frank.

Día 87.

Escribo mientras la musica del vibrante J.S.Bach inunda mis sentidos.
Dejo que el ritmo de sus melodias entren a mi corriente sanguineo, mientras las cristalinas lagrimas recorren mis mejillas.
La tinta mancha mis manos, y es algo asi como magico.
Porque a pesar de ser poseido por esta maravillosa musica, tu sigues presente aqui, sobre el papel, sobre mi corazón.
Y es algo curioso.
Curioso y bello, sobre todo cierto.
Nada mas que el papel, notas musicales, tu y yo.
Una perfecta aleación.
La mejor combinación.
Mi corazón no sigue el ritmo, mas bien late lento, de la misma manera que late desde que te fuiste.
Sin embargo algo dentro de mi esta acelerado.
¿Las ganas de poseerte quizá?
Imposible, porque en mi cabeza, se prefectamente que no estas.
Definitivamente, estoy demente, colapsado, tarado.