Desde que te has ido, no he conseguido dormir ni un solo día en condiciones.
Ni uno.
Pero es que tengo un miedo terrible, tengo miedo de que aparezcas en mis sueños, y despertar.
Sería como volver a perderte, y no estoy dispuesto a ello, aunque sea en sueños.
Mi vida se ha convertido en una especie de maraña llena de dolor, resentimientos, amor y sobre todo desesperanza.
Una desesperanza que invade cada segundo de mi vida.
Joder ¿Qué puedo hacer Frankie?
Estoy furioso conmigo mismo por reaccionar de esta manera tan autodestructiva ante todo, pero yo soy así, pesimista. No tengo esa capacidad que poseías tu de ver el lado bueno de las cosas.
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95 días sin Frank.
Random95 cartas sobre una fría lápida, escritas por un loco enamorado, dedicadas a un cuerpo sin vida.