Los cabellos rojizos de la chica relucían bajo la luz del sol en finas mechas doradas, sus mejillas estaban tan rojas como era posible además del radiante brillo en sus ojos. Eliot estaba seguro de no era más que un tonto por no admitir lo enamorado que estaba de Kat antes, era justo la indicada para él.
La chica rozó su hombro con Eliot al momento en que comía un enorme algodón de azúcar.
-Eliot- Tenía los dientes azules.
-¿Si?
-¿No crees que deberíamos volver al campamento o ir a buscar tu traje?
-No, El traje lo compro Tyler y pedí permiso con Hayley para volver a las ocho. Ella siempre pensó que nos casaríamos antes que ella, ¿Puedes creerlo?
Kat se ahogo en risas, ni en sus más locos sueños se hubiera imaginado hablando de algo así con Eliot sin hacer mención de lo desagradable que era.
-De pequeña creía que era bruja, Hayley es extraña, nunca he logrado entender como mantiene a Tyler tan embobado.
-Deberías saberlo- Kat sonrió dándole un ligero codazo en el abdomen.
-Sabes de lo que hablo, mira cuantos años han pasado y parecen dos adolescentes enamorados. ¿Crees que a todas las parejas les espera eso?
Kat no quería decirlo pero estaba hablando de ellos y Eliot lo sabía, ni siquiera era algo oficial y ya habían comenzado las dudas, ¿Debía preocuparse?
Eliot entre abrió su boca para responder cuando su teléfono vibro en el bolsillo de su pantalón. Con una seña saco el aparato poniéndolo en altavoz para que la pelirroja también escuchara.
Era Dan.
-¿Estas en el hospital?- El chico frunció el ceño.
-¿Hospital?
-Tu, Kat, solos, ¿Cuál hospital es? ¿Quieres que pase por ti?
-No, estoy en...
-Lo siento- Interrumpió Dan a través de la línea. – El auto se descompuso y estoy en medio de la carretera, no puedo pasar por ti.
-Pero yo no...
-¿Es muy grave? Si quieres mando a Tyler.
-No estoy en el hospital, todo salió bien
-Espera, no lo puedo creer ¿Quieres que te ayude? Puedo hacerles una cena romántica, no es por nada pero preparo unos vasos agua que siempre me piden más.
Eliot rió al momento que negaba con la cabeza.
-No es necesario, estamos bien.
-Vamos, tú solo dame el sí y yo me encargo del resto- A un lado de Eliot, Kat asintió dándole a entender que aceptara.
El chico levanto el pulgar en dirección a la pelirroja.
-Si- Pasaron unos segundos de completo silencio en lo que nadie hablo- ¿Por qué no dices nada?- Dan aclaro su garganta a través de la línea.
-Lo siento, no pensé que llegaríamos tan lejos, pero no te preocupes, yo me encargare de todo, veras la mejor cena romántica del mundo.
-Eso espero.
-No lo dudes, oye ¿Kat está ahí?
-Si- Eliot pasó el celular a la pelirroja.
-Dan
-¡Chica tomate! Tengo una duda para ti
-Dime
-¿Si no tuvieras pies usarías zapatos?
Kat frunció el ceño viendo a Eliot quien solo se encogió de hombros.
-No
-¿Entonces por qué usas sostén?
La carcajadas de Dan eran completamente audible a través de la línea, le había jugado una broma¡Y Eliot también reía!
-¿Te digo que si se utilizar muy bien? Mis tijeras tonto, no molestes- y sin más la chica colgó.
Eliot aun no paraba de reír. Kat lo miro mal. Esas cosas no cambiaban ni en un millón de años, esperaba que su amor (O lo que sea que significaba lo que acababa de pasar entre ellos) tampoco.
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Hey! Tu, perdedor (Kat & Eliot)
青少年小說"Superar al otro en todo", eso es justamente lo que está en la mente de Eliot y Kat al momento en que son escogidos como asesores en un campamento infantil. Con niños como camaradas para sus bromas y guerrillas, además de unos distraídos y conocidos...
