Después de tus Alas: Mi Hilo Rojo (Levi y Tú)

Capítulo 16: Un Domingo de limpieza.

Lunes. 7:30 a.m.

- Oye...- susurraron cerca de mi oído.- (TN)... Despierta, mujer. Si el profesor te ve, seguro te expulsa.

- Mhm...- me quejé acomodándome en el pequeño espacio de la paleta de mi asiento.

- (TN), vamos...- la voz se escuchaba preocupada.- (TN).

- ¡(TN) Zöe!- gritó el profesor logrando despertarme.- Habrás entendido muy bien el tema como para distraerte en otras cosas, ¿no? Pasa al frente y explícanos.

Me negué a pararme. Del miedo ya me había despertado por completo y me estaba negando a levantarme.

- Lo siento...- susurré con un hilo de voz. Agaché la cabeza ocultando mis ganas de llorar. Odiaba que los maestros me regañaran, me hacía sentir impotente.

- Eso pensé.- dijo el maestro con un aire de superioridad.- Cuando termine la clase vendrás conmigo a la Dirección.

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Lunes. 8:40 a.m.

- Director Smith, castigue a esta niña irrespetuosa.- ordenó el maestro.

- ¿Qué ha pasado?- preguntó el Director. Era rubio, bastante alto y muy inteligente, astuto y persuasivo. Pero lo que atraía a todos eran esas enormes- ¿(TN)?

- Mande.- respondí al llamado.

- Te has dormido en clase, ¿por qué?- el Director recargó su cabeza en ambas manos y me miró esperando una respuesta.

- T-Tuve un fin de semana algo...- empecé, recordando el Domingo de limpieza.- ... agotador.

- Ya lo imagino.- sonrió.- ¿Algo más?

- No... Sólo eso...- susurré.

- Castíguela. Expúlsela.- dramatizó el maestro.

- No puedo hacer eso, Ed.- dijo.- Sólo puedo pedirte, (TN), que quiero hablar con tus padres.

- Sí, bueno, hay un problema con eso...

- ¿Problema?- preguntó haciéndole una seña al maestro para que saliera.- ¿Qué clase de problema?

- Mamá y papá salieron de viaje por trabajo y me estoy quedando con un conocido.- le dije jugando con mis manos.

- Ya veo... ¿Puedo hablar con ese conocido tuyo?- lo pensé un momento, si el señor Levi se entera que me dormí en clase va a ser mi fin... al menos tendré a Petra para defenderme. Acentí con la cabeza, él sonrió.- Bien, entonces nos vemos después de la escuela.

- Supongo que sí.- susurré. Aún no estaba muy segura de lo que podría hacer el señor Levi.

- Ya te puedes ir, (TN).- dijo.

- Oh, sí. Hasta luego, Director Smith.- me despedí.

Eren y Armin estaban fuera de la Dirección esperándome, atentos a la conversación.

- ¿Qué pasó?- preguntó Eren.- ¿Te castigaron?

- No, sólo-

- ¿Te van a expulsar? Dime que no, (TN). ¿Qué haríamos sin ti? Sólo seríamos un par de idiotas vagando por la escuela sin nadie que nos hiciera reír ni que nos dijera cuándo hacemos las cosas mal.- exageró Armin como el dramático que es.

- No, Armin. No me expulsaron.- le dije, él sonrió algo avergonzado.- Sólo quieren hablar con mis tutores.

- Qué bueno. ¿Te imaginas que te hubieran expulsado por algo así? Y eso que fue sólo la primera vez que te dormías en su clase, imagínate lo que me harían a mí.- exclamó el moreno riéndose.

- Pura buena suerte.- dijo el rubio.

- Eren 'Suertudo' Jaeger.- se auto-nombró el moreno.

- Eren 'Dormilón' Jaeger.- dije. Armin rió ante mi chiste y Eren me puso mala cara.

- Sabes que te quiero, Eren.- dije mientras estiraba sus rosados cachetes.- Pero también sabes que tengo razón.- revolví su cabello.

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A la salida, esperé junto a la escuela hasta que el señor Levi llegó, y me acerqué a su ventana para darle las malas noticias.

- Sube ya.- me dijo.

- Disculpe... el Director quiere hablar con usted.- susurré de manera casi inaudible.

- ¿Qué?

- El...- me aclaré la garganta.- El director quiere hablar con usted.

- ¿Qué hiciste?

- Nada malo.- su expresión neutral cambió a una de enfado y fue entonces cuando temí por mi vida.

Lo guié hasta la Dirección y él entró dejándome fuera un laaaaargo rato. Hasta que la puerta se abrió.

- Camina.- ordenó. Yo lo seguí sin decir palabra alguna, supuse que estaba enojado. Mientras él se acomodaba en el auto me detuve a preguntar sobre la conversación pero me interrumpió.- Sube al auto de una puta vez.- y obedecí.

Se veía enojado pero a pesar de las groserías no se escuchaba molesto. Ahora que recuerdo... casi siempre tiene esa cara. Quizá no estaba taaan molesto, aunque no sé con exactitud qué le habrá dicho el Director sobre mí...

- ¡Bienvenidos!- nos saludó Petra al llegar.

- Ve a tu habitación y haz la tarea. Me avisas cuando termines.- dijo el señor Levi antes de meterse en su habitación y cerrar la puerta tras de él.

- ¿Ha pasado algo?- me preguntó Petra.

- Es una larga historia.