Donante Personal (EDITANDO)

16: -"Soy yo"

Editado.

No podía quitar la mirada de esa piel morena.

Laura me frotó los brazos mirándome, miró mis ojos quiénes estaban mirando a Mike. Observó hacia donde estaban mis ojos y de inmediato serió su cara.

- Eh, Cher ¿Cómo estás? - trató de llamar mi atención, la miré.

Y traté de simular felicidad, cosa que estaba fingiendo para que el señor presente no se diera cuenta de mi reacción.

- yo bien y... ¿Por que están uste... Tú aquí? - pregunté.

Ella enlazó su brazo con el mío y nos largamos a otra habitación a hablar más privado.

- resulta que el señor Erick, tu amo, es amigo cercano de mi amo - pausó - y resulta que su hermana, eligió a Mike - su cara se distorsionó.

Miré el piso. No puedo creer que el mundo sea tan pequeño. Caminó conmigo hacia unos muebles y nos sentamos.

- al parecer te ha ido muy bien por allá, mírate.

Alzó mis manos junto con mis brazos, que estaban enlazados con los suyos y yo sonreí, me quité con un dedo un flequillo de mi cara.

- ¿Cómo te ha ido con tu nueva vida? - miré hacia un lado y luego miré su rostro.

- en sí no es tan gratificante, el primer día que estuve en su casa, tuvimos sexo, pero fue todo menos placentero. Duré días sin hablarle o discutiendo, él pidiéndome perdón y así. No puedo llevar esta vida Laura... - me interrumpió.

- debes hacerlo, en sí no es tan malo, ellos tienen donantes pero no los lastiman... He llegado a querer a mi amo, es muy bueno conmigo y es todo un Dios en la cama - miró al techo.

- con ese tipo nadie se le niega - hablé.

- ¿Pero y qué hay de Erick? Erick es guapísimo, parece un Dios griego, es alto, musculoso, es demasiado bello ¿Eres estúpida? - me preguntó.

- ¿acaso eso importa? Es todo un maldito animal - murmuré de mala gana.

Me miró encogida.

- siento mucho si se ha pasado contigo. Deseaba que te fuera bien para que al fin seas por lo menos felíz.

- no sé si el problema soy yo, pero siento que nunca de los nuncas seré felíz. Tal vez no estoy hecha para eso.

- no digas eso, Cher, mereces toda la felicidad del mundo.

Apreté mis labios mirando a la nada, sintiéndome mal repentinamente. Quería llorar pero no quería arruinar el maquillaje.

A la mierda.

Me dejé caer encima de sus brazos, quiénes estaban abiertos, listos para reconfortarme.

- no sé si es mi culpa que me esté pasando todo esto.

- no lo creo, solo eres una chica que la ha pasado mal. Todo estará bien, Cher, sé que va a pasar algo bueno contigo. Tengo fe.

La miré y limpié las lágrimas sintiéndome aún peor, pero no quería llorar más.

- dime que no se me corrió el maquillaje.

Está sonrió.

- sorpresivamente no, al parecer es a prueba de agua.

Sonreí y la miré.

- no sé que tienes que siempre termino llorando y expresándome contigo, no es justo.