Lugar prohibido

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Las puertas del elevador se abrieron mostrándole a Lucy la lujosa sala de aquel piso perteneciente exclusivamente al D.S de Fuego, lo que Lucy apenas alcanzaba ver desde dentro del ascensor demostraba que esta habitación era como la de una persona millonaria y de segura así eran las demás habitaciones de los D.S.

—Espera —dijo Fuego evitando que ella entrara.

Fuego, entro a la habitación y volteo a la derecha así la esquina donde estaba el mapamundi gigantesco, presiono un botón y esa parte de la pared se dio vuelta, ocultando el mapa para poder mostrar una pintura.

—Puedes pasar.


—Entonces —Gajeel se colocó detrás de la peliverde quien sollozaba de dolor—, me dices que su líder no se encuentra en nuestra base —La mujer asintió desesperada—. ¿Me crees estúpido? —exclamo después de que la mujer soltara un alarido al sentir que el cuchillo perforaba su hombro.

—¡Es cierto, es cierto! —sollozo.

—¿Dónde está? —Se sentó enfrente de la chica con un nuevo cuchillo, el anterior aun seguía clavado en el hombro de la mujer.

—En...En —tartamudeo. Gajeel clavo el cuchillo limpio y filoso en el costado del abdomen—. ¡En el Cruce de Shibuya! —La boca de Gajeel se abrió debido a la sorpresa de esas palabras.

El Cruce de Shibuya son cinco pasos peatonales juntos en el cual todos los carros se detienen de todas las direcciones para que una marea de gente pase. Este cruce es famoso por la cantidad de gente que pasa cada hora.

—¿Qué piensa hacer es ese lugar?

La mujer negó con la cabeza, ella sabía perfectamente que le pasa a todos las personas que hablan de más sobre los planes de los Dragneels, nada bueno le pasaría a esta mujer cuando su líder se entere de todo lo que hablo pero si termina de decirle el plan a este hombre no duraría ni cinco minutos debajo del sol.

Gajeel chasqueo la lengua para luego levantarse y dirigirse a una esquina de la habitación, para segundos después llegar con un pequeño generador de energía. Hierro agarro los dos cables que son utilizados para pasar la energía de una batería de carro a otra y choco estos dos enfrente de los ojos de la mujer ocasionado que las chispas que emergieron se reflejaran en los ojos aterrados de la chica.

—No...Alto...Detente —Mientras los cables se acercaban poco a poco al rostro de la muchacha esta negaba con la cabeza y empezaba a gritar—. ¡Piensa explotar una bomba! —Las manos de Hierro se detuvieron a centímetros del rostro ajeno—. ¡Piensa hacer explotar una bomba humana en medio del cruce!


Había puesto de cabeza el baño buscando el botiquín de primeros auxilios como una loca pero ahora ella se encontraba paralizada enfrente de Fuego con la caja blanca en sus manos. Natsu estaba sentado en la cama esperando que esta estudiante con conocimientos de medicina le sirviera de ayuda para poder sacar la bala que aún se encontraba en su hombro.

—¿Que estas esperando? —pregunto el asesino harto de verla allí sin hacer nada—. Apúrate y pásame la tijera —Lucy tartamudeo un "Si" para después poner el botiquín al lado de Fuego y con apuro pone la tijera en las manos del pelirosa.

El líder de los D.S cortó la camisa con aquella tijera para después retirar con cuidado la tela de las heridas palpitantes de su hombro y abdomen. Tiro el instrumento en la caja y sacudió su muñeca preparándose para el siguiente paso. El pequeño problema que tenía Fuego que cada vez que intentaba acercar su mano a la abertura de la bala le empezaba a doler el brazo antes de poder alcanzar su destino.

—Perfecto —dijo sarcásticamente después de varios intentos—. Tú —Lucy salto en su lugar—, ven aquí —ordeno.

Lucy trago saliva y se acercó dos pasos, Natsu le dio una seña con la mano para que se acercara aún más y ella le hizo caso, se acercó un paso más, esto fue así hasta que Lucy termino entre las piernas de Fuego.

¿Que estoy haciendo? —pensaron los dos.

—Necesito que saques la bala que se encuentra en mi hombro —Lucy se asustó al escuchar eso y se alejó unos cuantos pasos.

—¡No, no, no y no! —grito agitando las manos al lado de su cabeza mientras esta se movía de lado al lado—. ¡Yo solo se desinfectar y vendar unas cuantas heridas, yo no puedo...!

Fuego agarro la muñeca de Lucy y la jalo hacia su cuerpo, ocasionando que quedaran aún más cerca de lo que estaban anteriormente.

—No puedo hacerlo yo, eres la única que puede sacarla y no puedo dejarla allí por que puede ocasionar daños internos —dijo mirándola a los ojos aunque ella no podía saber si la estaba mirando directamente—. No tienes opción, lo vas hacer quieras o no —declaro fríamente.

En contra de su voluntad se colocó el guante de latex y con sus manos temblorosas fue entrando poco a poco en la herida. El rostro de Natsu reflejaba el dolor que estaba sintiendo, mientras que las expresiones de Lucy daban a entre que tenía miedo y asco por la tarea que estaba llevando acabo.

Cuando los dedos de Lucy tocaron la bala fue retirándola poco a poco hasta que al fin pudo sacar la munición. Su mano cubierta por el material blanco estaba cubierta de sangre, dejo caer la bala al suelo sin soportar más ver tanto rojo.

La estudiante de Fairy Tail retrocedió un paso pero Fuego le agarro de la cintura y la atrajo por segunda vez hacia su cuerpo. La rubia no se había dado cuenta de que la respiración del D.S estaba irregular y que estaba bañado en sudor. Natsu pego su frente al pecho de Lucy, él no tenía su rostro entre sus atributos solo su frente rozaba esa parte del cuerpo de la chica.

—No...No te muevas —murmuro con dolor.

Lucy abrió los ojos por la sorpresa al ver como reacciono Fuego y las palabras del D.S ante su intento de huida. Por un momento olvido lo obvio del asunto; le había sacado una bala a una persona y debió dolerle como el mismo infierno.

"Aunque él sea el D.S de Fuego sigue siendo una persona y eso le debió de doler", ese fue el pensamiento que tuvo cuando empezó a acariciar el cabello color salmón de Natsu.


—Cielo.

Hierro paso por las puertas corredizas de cristal completamente destruidas, la piscina contenido varios escombros y los cadáveres de varios miembros del G.H.

—¡Hierro! —Una vena y empezó a palpitar en la frente del nombrado—, ¡Por aquí! —El grito que dio fácilmente pudo llamar la atención de todos los enemigos en el edificio.

Camino hacia la niña de doce años y la regaño por estar gritando en medio de todo este caos. Cuando termino de decir el sermón se dio cuento que a su compañera estaba junto a unos estudiantes de Fairy Tail. Hierro frunció el ceño, había olvidado que ellos se encontraban en el edificio.

—Abramos el panel antes de que alguien llegue —dijo Wendy.

Los de D.S colocaron su mano en el piso y este se abrió para mostrar otro panel de armamento enorme.

D.S ~ [ Reescribiendo Desde Cero ]Where stories live. Discover now