ღC U A T R Oღ

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-¡No!- Liam alcanzó la cintura del menor cuando este se tropezó por décima vez en la noche. Las manos de Niall corrieron al cuello del castaño abrazándose fuerte -No quiero, no quiero ya no quiero- rogó el rubio.

-Vamos Ni, estabas haciéndolo muy bien- sonrió Liam y con la mano libre alzo su barbilla, los ojos de ambos se encontraron y Liam deposito un beso en sus labios -no cedas solo por una caída-

-Tengo miedo- susurro el rubio haciendo un puchero. Aferro sus uñas a los fuertes brazos del surfista e intento relajarse.

-¿Mejor?- Liam acaricio con suaves movimientos circulares la fina cintura de su acompañante, le gustaba sentir la piel tan tersa y suave del rubio entre sus manos.

-Pero no me sueltes ¿si?- Los grandes ojos de Niall le miraron con suplica y Liam asintió casi babeando por la expresión tan adorable, apretó sin lastimar los débiles brazos de Niall y comenzó a sumergirlo con él en el agua. Liam era experto en el mar y sabía que era imposible que ahí les pasara algo pues sus pies con facilidad tocaban la arena que estaba bajo el mar, aún así le hacía gracia ver a Niall inflar las mejillas y cerrar sus ojos cuando su mentón tocaba apenas el agua pues por ser tan pequeño llegaba un poco mas abajo pero Liam jamás le dejaría.

Tenían viéndose cerca de una semana pues la estancia en Miami de Niall sería de dos semanas completas pero no se habían preocupado mucho por eso. El lugar de reunión era siempre en la misma cueva cerca de las ocho, se había acoplado a la perfección e incluso Liam se animo y ahora en las tardes salían también por helados o a pasear. No sabían ni siquiera en que estatus colocar su relación, no eran amigos o quizá si pero había muchos beneficios... como el de besarse, tocarse, abrazarse... pero eso salía espontaneo ni siquiera habían hablado de eso en si, tan solo de un momento a otro, las manos de Liam estaban apretando el trasero de Niall mientras jadeaban bajo un intenso beso y no les molestaba, al fin de cuentas siempre tenían en mente que aquello no era mas que un amor de verano.

-Abre los ojos Ni- dijo Liam sonriendo -ni siquiera estas flotando- rió.

El rubio abrió poco sus ojos y con demasiada fuerza de voluntad intento disfrutar de la sensación de tener el agua envolviendo su cuerpo porque no todo eran solo besos y toqueteos, también Liam se había dedicado hacerle ver a Niall que el mar no era malo, las clases personales a Niall le estaban sentando de maravilla pues al menos ya podía presumir de tener todas sus piernas dentro del agua sin sentir la necesidad de salir corriendo. Su rostro dibujo una sonrisa linda cuando se empujo sobre sus pies para poder flotar un poco, Liam apretaba con fuerza su cintura tan solo para hacerle ver que su salvavidas personal siempre estaba para cuidarlo.

-Debo felicitarte, antes durabas a lo mucho un minuto... llevamos cerca de diez aquí dentro y sigues sonriendo- Dijo el castaño feliz de ver a Niall sonriente.

-Pues admito que esto fue gracias a ti- le golpeo con simpatía el pecho trabajado -ahora se que el agua no es mala o bueno, no del todo como imagine- dijo con una adorable sonrisa que Liam imito embobado.

Se quedaron otros minutos dentro, el clima estaba muy cálido aún siendo noche ni siquiera se sentía esa fresca brisa que hacía que Niall usara suéteres simplemente estaba muy cálido. Salieron cuando el rubio sintió fue suficiente, Liam se sentía orgulloso pues un avance de casi media hora no era un logro que podía dejar pasar con una persona que le temía tanto al agua. Se sentaron en las mismas rocas de siempre mientras se colocaban las toallas encima secándose, Niall había perdido la vergüenza de mostrar su cuerpo pues la primera vez se había sentido intimidado al ver el cuerpo de Liam con tan solo traje de baño. Su cuerpo era torneado, bronceado, musculoso y tenía vello en varias partes de el mismo, sus piernas eran gruesas y estaban perfectamente trabajadas, era simplemente el cuerpo que tanto se le envidiaba a los artistas masculinos de revistas. En cambio su cuerpo era pequeño, escuálido y blanco, no tenía vello y si de algo podía presumir sería de tener una suave piel pero eso en cierto punto lo hacía sentirse inferior y mediocre así que el primer día para entrar a nadar se dejo su playera larga de manga larga pero al segundo Liam le convenció de quitarse la ropa y tan solo tener el bañador puesto ya que sería aún mas incomodo nadar con suéter y después de intentos e intento el rubio cedió con las mejillas rojas y advirtiéndole que si se reía de él en su vida volvería hablarle pero Liam lo último que pudo hacer fue reírse, al contrario, tuvo que desviar su mirada para poderse controlar y controlar el problema entre sus piernas, joder, como deseaba el cuerpo tan pequeño y manejable de Niall debajo de él pidiendo por más... mierda, juraba que no sabía de donde había sacado tanta fuerza de voluntad para no tomarlo y hacerlo suyo de una vez.

Summer Love |Niam Hayne|Historia Corta|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora