CAPÍTULO 6.-primer fragmento

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Yo me acerco hacia mi hermano. Él me huele, me gruñe, después me lame y me tira al piso. Yo empiezo a reír muy fuerte. José convertido en lobo se acerca a nosotros, agacha la cabeza y mi hermano asiente o creo que eso hace. Me levanto para acariciar el pelaje de Jeremy, es totalmente blanco y podría jurar que brilla como la luna, me sorprendo al escuchar unos gruñidos, me acerco hacia el arbusto, de donde creo escuche algo, mi hermano empieza a gruñir también.

—¡Rosali aléjate de ahí! —grita el papá de José convirtiéndose.

Al voltear observo como de la oscuridad emergen 5 lobos. Mi corazón late muy rápido, mi cuerpo está paralizado. José junto a su papá se intentan acercar, pero una pared de fuego sale de la nada y nos separan. Los veo desesperados, todo lo contrario de los lobos que están cerca de mí. Uno de ellos se acerca a mí, era de color rubio platinado que se me hacía muy familiar, es igual al color del cabello de....

—¿Oliver? —le pregunto. Él asiente y se acerca más a mí—. ¿Cómo me encontraste?

Le pregunto de nuevo como si pudiera responderme. No sé en qué momento empecé a llorar, pero creo que estoy toda empapada en llanto. Él empieza a lamerme la cara sacándome una sonrisa, después lo abrazo.

Escucho una voz femenina que me dice mate, descolocándome totalmente.

Asustada, me separo de Oliver. Miro a todos lados, pero no hay ninguna mujer, solo están los demás lobos que supongo que son los amigos de Oliver. Un aullido me vuelve a la realidad, veo como mi hermano salta sobre el fuego y se va encima de Oliver. Los dos empiezan a morderse, yo grito desesperada que se separen corro hacia los lobos. Les gritó que los separen, uno de los lobos que son iguales (supongo que son los gemelos) se acerca y se les queda mirando.

Dejan de pelearse y empiezan a convulsionar. Mi hermano empieza a transformarse en humano, queda totalmente inconsciente y desnudo en el piso. Corro hacia él sacándome el abrigo poniéndoselo ya que hace mucho frío.

—¡Mierda, Alan! ¡No vuelvas a asfixiarme jamás! y quita de una vez la pared de fuego —escucho a Oliver.

Levantó la vista y me encuentro a un Oliver igual de desnudo que mi hermano, con el cabello más largo de lo que recuerdo. Vuelvo la mirada a mi hermano, totalmente avergonzada. Mi mama y la señora Leila llegan a mi lado con ropa para Jeremy.

—Tienen muchas cosas que explicarnos —escuchó decir a Oliver.

—Creo que este no es el momento ni el lugar para hablar de esto —dice mi mama.

—Tú nos querías matar y escapamos de ti ¿no es lógico? —dije levantando la mirada viendo directamente a su cara.

—Yo nunca le haría daño a mi mate —dice él—. Nunca te haría daño, Rosali. Yo te amo, eres todo para mí, ¡¿cómo pudiste irte así?! —dice Oliver empezando a gritar.

¿Me dijo hace unos instantes que me ama? ¡¿Me ama?!

Sus amigos también empiezan a trasforme en humanos.

Mira a tu hermano y no mires a otro lado, me digo a mí misma.

—Imbéciles ¿no ven que ella está mirando? —dice Oliver a sus amigos—. ¡Ni te atrevas a verlos! —me advierte Oliver causándome mucha gracia.

—No es nuestra culpa no poder haber traído nuestros uniformes especiales —gruñe uno de ellos.

—Creo que deberíamos ir a la cabaña —escucho decir a José.

Volteé a verlo y él también estaba desnudo, me lo quedo viendo un buen rato para ver cómo reacciona Oliver y puedo escuchar como gruñe.

—Mi hermana está aquí, vístanse depravados de mierda —dice mi hermano recuperando la conciencia.

—¡Jeremy!— le grito emocionada, por un momento pensé que le causaron mucho daño. Esperen, ¿qué le hicieron?— ¿Se puede saber por qué mi hermano se desmayó?

—Yo los asfixie para que se separaran. Tu hermano no está acostumbrado a su transformación por eso le afectó más —dice unos de los gemelos—. No te acuerdas que me gritaste como loca que los separaran ¿Quién te entiende lunita?

¿Los asfixió? pero sin tan solo los miró.

—Vamos a vestirnos todos. Mi hermana es una niña, no está para ver estos espectáculos —dice Jeremy.

—Yo te traje esto, vístete ya —dice mi mama dándole su ropa. Él se vistió lo más rápido que pudo para después sujetarme.

—Vámonos a la casa primero y nada de voltear que todos están desnudos —dice llevándome a la cabaña más delante de todos.

Él intentaba hablarme sin que los demás escucharan.

—¿Has visto que hasta poderes tienen?, estamos jodidos —dice Jeremy frustrado.

—Él dice que soy su mate, que no me va hacer daño —le respondo.

—Mate mis huevos. —Bufa—. Tendremos que escucharlos ya que no tenemos de otra, pero si algo no me huele bien, nos escaparemos como podamos.

ALFA KINGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora