Capítulo trece

495 31 0
                                    

Y así fueron pasando los días hasta que fue sábado, eso significaba que pasaría todo el día con mi madre.

—¡Vamos, Selena!

—Ya voy.

Entonces, allí estaba yo con mi madre caminando de un lado a otro por el centro comercial. A mi madre le había encantado un vestido de una tienda, pero dijo que pasaríamos en un rato más para comprarlo ya que se encontraba indecisa. La cosa era que ahora no recordaba dónde estaba y estábamos dando mil vueltas. Una vez lo encontramos, prácticamente se lanza al vestido y lo agarra.

—¡Lo quiero, lo quiero!—repetía una vez entusiasmada.

—Cómpralo, entonces—ruedo los ojos. Había agarrado la costumbre de hacerlo y mi madre lo había empezado a odiar, al igual que Justin.

—Eso haré. Mientras lo compro podrías hacer algo más entretenido en ves de girar los ojos cada vez que digo algo.

—Vale.

Decido esperar fuera de la tienda mientras lo compra. Me dedico a mirar mi teléfono un rato hasta que levanto la mierda y lo veo. Justin está caminando en mi dirección, pero parece no fijarse en mí. Hasta que pronto lo hace.

—¿Selena?

No respondo, hago como que no escucho y me doy la vuelta en dirección a la tienda. Ahí, intento buscar a mi madre pero no la veo y es cuando me escondo entre medio de la ropa. Lo veo entrar y mirar a todos lados, visiblemente confundido.

En ese momento, veo que mi madre está en el mismo pasillo que él y veo la otra entrada a mi izquierda. Salgo de mi escondite cuando no veo a Justin y llamo a mi madre. Espero a que pague, la agarro de la mano y salimos, mientras escucho mi nombre a mis espaldas.

«Hombre, alguien iba a enojarse conmigo» pienso.

                              (....)

—¡Selena Marie! ¿Cómo se te ocurre ocultarme el hecho de que tenías novio?

Suspiro y me encojo de hombros. Después de aquello, me empezó a preguntar el porqué yo quería marcharme lo más rápidamente posible y quién era el chico que que me llamaba y yo ignoraba.

En ese momento fue cuando le expliqué que era Justin y que además, era mi novio.

Si bien me felicito, después me llegó el reto porque dijo que debería confiarle este tipo de cosas.

—Mamá, te comprendo, pero también deberías comprenderme a mí. Era demasiado pronto para mí y quería esperar antes de decírtelo.

—Esta bien, cariño. Pero quiero que lo invites mañana a cenar.

—De acuerdo, le llamaré y le avisaré.

Wonderland |Jelena|  |Primera temporada| Where stories live. Discover now