Y, es aquí donde comienzan los cambios mas grandes del fic XD
Sasuke ignoró la mirada fría que su padre siempre le dirigía, corriendo entre ellos hacia la adolecente, que trataba de meter algo de aire a sus pulmones.
— ¡Natsuki! —llamó en un grito.
La abrazó, pegándola a su pecho, y haciendo que ambos se colocaran en cuclillas en la alfombra, la fémina apretando su camisa entre sus dedos con desesperación, aun jadeando.
—Tranquila —susurró contra su cabello, apretándola con fuerza—. Todo está bien, papá está aquí, nada malo te va a pasar, todo está bien, respira hondo, trata de meter aire, haz como papá.
Comenzó a respirar hondo, mostrándole a la menor como debería de hacerlo, apenas soportando ver el abrumador terror en sus preciosos orbes azules llenos de lágrimas.
— ¡Natsuki!
Volteó hacia sus padres, solo para encontrarse a Naruto al pie de la escalera, viéndoles con los ojos abiertos como platos, mientras su hija se apretaba contra su garganta, aun tratando de meter algo de aire a sus pulmones.
Naruto ignoró las miradas sorprendidas de los otros cuatros, tirándose de rodillas frente ellos, acariciando con dulzura la espalda de la adolecente.
—Está bien, mio angelo —susurró Naruto, sin dejar de acariciarla—. Trata de respirar, justo como Sasuke está haciendo, todo está bien, estamos contigo, ¿sí?
La niña tembló con fuerza, respirando con más regularidad que antes.
—No hiciste nada mal, todo está bien, lo has hecho increíble mi ángel. Solo trata de meter un poco más de aire, y pronto te sentirás excelente, le diremos a Misa–san que te haga de sus deliciosas galletas de chocolate.
Sasuke no dijo nada sobre aquella promesa, se limitó a aflojar un poco su agarre, solo para que Natsuki pudiera ver los ojos de Naruto; el cuerpo de la menor se relajó en cuanto se encontró con los orbes azules, su respiración ahora en un pequeño jadeo a causa del esfuerzo de antes.
—Lo siento —dijo Natsuki, con un hilo de voz.
Naruto no respondió, se limitó a inclinarse y dejar un beso en frente, sin importarle la ligera sudoración.
—Te amo, mi ángel.
—También te amo, mamá... lo siento tanto...
—Hablaremos de esto más tarde, ¿está bien?
Natsuki se limitó a asentir con la cabeza, aun acostada en su pecho, sus dedos enterrados contra sus costillas, y su respiración jadeante dando contra su garganta. Aunque, estaba más tranquila, y el ataque de pánico había quedado atrás.
— ¿Te sientes mejor? —preguntó Sasuke, contra su cabello.
La niña asintió lentamente, aun aferrándose a él; intercambió una mirada nerviosa con Naruto, quien se limitó a darle un asentimiento, y se colocó de pie, encarando a sus familias, y las miradas preocupadas de sus amigos.
— ¿Está bien? —preguntó Takumi, con nerviosismo—. ¿Quieres que traiga algo?
Ambos negaron con la cabeza.
—Gracias por la ayuda, estaremos bien solos —aclaró Naruto—, Natsuki está bien, solo ha sido demasiado en pocos días...
Los cuatro hombres asintieron, antes de irse en fila por la puerta principal, limitándose a ofrecer ligeras inclinaciones de cabeza a los mayores. Misa se acercó por un lado, dándole un vaso de agua con pajilla al rubio, quien tomó el vaso de inmediato, para pasarlo a Sasuke, quien se encargó de poner la punta de la pajilla entre los rosados labios de la menor, instándola a beber.
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-.Soy Tu Hija.-
Fanfiction#Sinopsis. No hubo más que unos gritos, una pelea que cambio la vida que ambos tenían, a la cual se había apegado; un "Lárgate si eso quieres" y un portazo, bastaron para arruinar la relación perfecta que tenían. Sin saber, que había una linda sorp...
