Verdades a la luz

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En el vaso de agua delante de él, dejó caer un antiácido que enseguida se disolvió en miles de pequeñas burbujas, se lo llevó a la boca y lo tomó de un sorbo. Se acostó en su colcha y se tapó de pies a cabeza con su sábana, ocultando su vergüenza aunque no hubiese nadie cerca, era como si sentía que los muebles de su cuarto lo juzgaran por haber sido tan estúpido de haber hecho lo que hizo la noche anterior.

Llamaron a la puerta, la voz de su amigo Young Bae sonó al otro lado así que desganado, se levantó y fue a abrirle dejándolo pasar.

-¿A dónde fuiste anoche? ¿Por qué le dijiste a Dae Sung que te quedarías trabajando?

-Mejor hubiese ido con ustedes – dijo cabizbajo.

-¿Ocurrió algo malo?

-Soy una puta, una maldita puta.

Young Bae frunció el ceño sin entender y se sentó en el suelo ayudando a su amigo para que le explicara lo sucedido.

-Cuenta.

-Ayer...Seung Ri me buscó para decirme que fingiera ser su novio, me dijo que lo hiciéramos por una noche en una fiesta y así quitarse de encima a una chica que andaba tras él. Me dijo que después desmentiría todo y hasta hablaría con mi madre pero...-sentía vergüenza de decirle que fue tan inconsciente con la bebida que terminó acostándose con él.

-Tuvieron sexo – completo en decir Young Bae.

-¡No lo digas! – se cubrió el rostro con las manos – Estaba borracho, no sabía lo que hacía.

-Cumpliste el sueño de muchas fanáticas locas jejeje.

-No es gracioso – lo miró con un puchero.

-No tienes porque ponerte así, es normal, tienes necesidades como cualquier otra persona aunque si fue bastante estúpido que no haya sido estando en tus cinco sentidos ¿Pero qué, no te gustó? Pensé que estarías feliz por eso, total él te gusta.

-Lo sé, también me parece extraño, no sé si sea por las condiciones en que lo hicimos o por alguna otra cosa – se quedó pensativo.

-¿Qué otra cosa podría ser? No te gusta más nadie, si no me lo hubieses dicho ¿No?

-Ajam – escuchaba a Young Bae hablar pero estaba inmerso en sus propios pensamientos.

-Ji... ¡Ji Young!

El pelirrojo salió de su trance al escuchar a su amigo llamándolo.

-¿Y después que pasó? ¿Va a aclarar las cosas de que no son novios?

-Pues, no sé ya que algo más pasó. Al parecer antes, durante o después de todo eso, él me preguntó que si quería ser su novio de verdad y yo le dije que sí.

-¿¡Qué!?

-Pero ya le dije que no quería, espero y lo haya entendido bien porque de verdad que no quiero estar enredado con él – suspiró cansado y se arrastró hasta su colcha para acostarse de nuevo – Ahora si me disculpas, quiero descansar, no me siento bien del estómago.

-De acuerdo, cualquier cosa me llamas – dijo y salió del cuarto.

Apenas Young Bae cerró la puerta, Ji Young sintió sus ojos humedecerse seguido por lágrimas que salían en silencio y se corrían por toda su cara. No entendía porque se sentía tan mal, ni que fuera la primera vez que le hubiese hecho, además, fue con el chico que le gusta y como su amigo le dijo debería estar feliz pero no era así, se sentía como si hubiese traicionado a alguien ¿Pero a quién? Él no tenía pareja, no había nadie a quien traicionar. Se incorporó y buscó su celular que por primera vez no tenía mensajes o llamadas perdidas de su madre, seguramente ya no lo consideraba un hijo después de creerse la mentira de Seung Ri. Viajó entre los contactos hasta detenerse en uno y le marcó.

Living with the deadWhere stories live. Discover now