Capítulo 54: "Remordimientos"

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Continúa narrando Daryl

– No te preocupes, aún sigue viva – me dijo Hershel. Le di la mochila, Maggie rápidamente buscó el medicamento y preparó una jeringa, se la dio a Hershel y te inyectó en el brazo. Observé que tu rostro no reflejaba nada, ni una expresión ni por el pinchazo de la aguja. Hershel se levantó y salimos de la celda, – Ahora tenemos que esperar – dijo al grupo, – ¿Esperar qué? – le contesté – Se supone que con la inyección se mejoraría – le dije furioso, – Debemos esperar que la inyección no haya sido demasiado tarde – respondió. Me hice a un lado y abandoné el pabellón.

Salí a la sala principal, vi tus cosas ahí, tus machetes, un arma y tu cuchillo. Cogí tu cuchillo y caminé hacia otro pabellón, no sabía a dónde me dirigía simplemente quería estar solo. Me detuve y me senté en el piso y pensé en todo lo que había pasado hasta ahora.

Tenía tu cuchillo en mis manos, comencé a verlo, estaba limpio, pero recordé que cuando llegaste y Glenn puso tus armas sobre la mesa estaban llenas de sangre. Pensé en cómo te habías defendido hasta el último aliento, como habías tratado de recuperar la mochila, como habías luchado.

Comencé a recordar algunas escenas; vino a mi mente cuando me dispararon, cuando caí al suelo por el dolor del impacto y pude ver en tu rostro miedo y preocupación, luego cuando regresamos en mi motocicleta y sostenías con tu mano mi herida, – No te preocupes ya vamos a llegar – recordé tus palabras, no te respondí pero quería hacerlo, quería decirte que estaba bien y que me recuperaría pero hasta ahora no sé porque no te lo dije.

Hershel me había comentado mientras me cosía la herida que estabas muy asustada porque pensaste que era algo más grave y tenía razón, un disparo no es cosa de juego, aunque la bala no daño ningún órgano. Recordé cuando me trajiste la comida a mi celda, a pesar de mi carácter seguías preocupada por mí, – "Daryl, quería decirte dos cosas, la primera era agradecerte por haberme salvado y el haber arriesgado tu vida y la segunda era decirte que lo sentía mucho por haberlos puesto en peligro" –...

Pensé en la última conversación que tuvimos antes de que te fueras a la ciudad y pasara todo esto, recordé lo que te dije – "Por tu culpa esos hombres te secuestraron, por tu culpa me dispararon y por tu culpa se perdió Andrea... ¿Quieres que continúe?" –, miré al techo – Eres un completo idiota Daryl Dixon – me dije en voz alta y tenía razón, yo lo era, era un idiota al haberte dicho eso... – "¿Qué? ¿No te ibas? Vete – ... – ¡Ya lárgate! ¡No quiero volver a verte! "... – mis propias palabras resonaban en mi cabeza, respiré y miré tu cuchillo, era más de medianoche y no sabía nada de ti. Me había alejado del grupo y simplemente me había sentado aquí, esperando algo, una noticia sobre ti...

Estaba tan acostumbrado a las malas noticias, desde mi infancia hasta ahora, que el pesimismo que sentía era enorme, imaginaba que alguien se acercaría en cualquier momento y me diría que no lo lograste, que estabas muerta y que... que luego te convertirías en uno de ellos, en un caminante.

–... "Déjame ponértelo claro, no quiero tus disculpas ni mucho menos que te preocupes por mí... ¡Yo jamás me preocuparía por ti, jamás!"... – Jamás debí decirte eso porque ahora lo que sentía era eso, preocupación, esa extraña sensación que no sentía hace tiempo... La desaparición de mi hermano me afectó mucho y ahora me sentía culpable y preocupado por ti. Al escuchar a Hershel decir que morirías, simplemente no lo pensé, salí, me subí a mi moto y partí a la ciudad. No podía dejar que mueras, no lo podía permitir y si, ahora lo reconocía, estaba preocupado por ti y necesitaba saber cómo estabas.

..."Adiós Daryl"... – me dijiste al terminar de conversar y note la lágrima que cayó de tu mejilla, no estaba ciego, la había visto y sabía que mis palabras te habían dolido.

La presencia de alguien me sacó de mis pensamientos, era Beth, me levanté, quería preguntarle como estabas, si seguías viva pero era como si las palabras no salieran de mi boca, Beth habló – La fiebre disminuyó y su pulso se normalizó. Mi papá dice que se pondrá bien – me dijo – Carol está preparando el desayuno, será mejor que vengas – me dijo y se retiró.

– ¿Desayuno? – me dije entre pensamientos, así que salí a la sala principal, pude ver los primero rayos de luz asomarse y caí en cuenta que había estado toda la noche sentado en ese pabellón pensando en ti. Tenía tu cuchillo en mi mano, así que lo puse junto con tus cosas, Rick se acercó a mí, – Daryl, ¿te encuentras bien? – me preguntó, le contesté que sí, que estaba algo cansado e iría a dormir un rato.

Salí de la sala principal, pero antes de irme a mi celda pase por dónde estabas, me asomé, aunque Beth me había dicho que la fiebre había disminuido y tu pulso estaba normal, te veía igual que ayer, pálida y sin ninguna expresión en tu rostro.

- Hershel: Estará bien, se recuperará (acercándose a mi)

- Daryl: Está muy pálida...

- Hershel: Es por la sangre que perdió, por eso no despierta, su cuerpo tiene que recuperarse lentamente. Es alguien fuerte, se recuperará rápido...

– Sí, lo es. _____ es muy fuerte – dije. Dejé a Hershel y me fui a mi celda, me tiré en la cama y me quedé profundamente dormido.

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¿Qué pasará? :O

Mil gracias por sus comentarios. Me encanta que les encante la historia. :D :D :D

Mañana nuevamente subo capi, nos vemos. c:


The Walking Dead Serie - Novela Daryl Dixon (Norman Reedus) y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora