Nick iba en el G-Wagon de Joe, cuando su celular comenzó a sonar.
-¿Hola? -No se molestó en ver la pantalla antes de contestar.
-Nick, soy Johnny.
Rodó los ojos y suspiró, ¿Cómo no iba a reconocer a su manager? -¿Qué pasa?
-¿Estás ocupado?
-No, pero voy en el auto.
-Entonces seré rápido. -Se aclaró la garganta-. Ray Ban te quiere para una nueva campaña publicitaria.
-Ya veo. -En otros tiempos aquello le parecería increíble, pero ya nada era lo mismo.
-¿No te emociona?
-Johnny, yo... Estoy pasando por un momento un tanto delicado.
-¿Nick, cuál es el problema? -Sonaba en realidad preocupado.
-No quisiera hablarlo por teléfono. -Mintió. No quería hablarlo de ninguna manera-. Pero, sobre Ray Ban, ¿Puedo pensarlo?
-Por supuesto, pero no te tardes.
-De acuerdo, nos vemos.
Unos minutos más tarde, aparcó frente a la secundaria North Hollywood, cuando salió de su auto no le sorprendió ser atacado por un par de paparazzi, pero ese día no hubo palabras, y mucho menos sonrisas.
-¿Nick, cómo pasaste tu cumpleaños?
-¿______ está viviendo contigo en definitivo?
-¿Piensan volver casarse?
-¿Tiene problemas tu hija en la escuela?
-¿Qué te trae por aquí?
Dios, jamás paraban. Lo único que quería era ocuparse de los asuntos de su hija como cualquier padre normal, pero hasta aquello era imposible.
Al entrar en el centro educativo, sintió la mirada de los estudiantes sobre él. Se dirigió de inmediato a las oficinas administrativas.
-Disculpe... -Le dijo a la secretaria-. Me gustaría hablar con el director.
Ella sonrió. -¿Señor Jonas?
Nick estuvo tentado a rodar los ojos, pero se contuvo. -Así es.
-Pase por favor. -Le señaló una puerta a la derecha-. El señor Delling le espera.
Él asintió y se encaminó a la oficina del director, la puerta estaba semi-abierta.
-Permiso... -Se asomó despacio.
-Señor Jonas. -El director sonrió-. No creí que vendría, por favor siéntese.
Nick dudó antes de tomar asiento. -Estuve a punto de no hacerlo, pero tenía que excusar a Destinee. No sé cuando va a poder reintegrarse a la escuela.
-¿Qué sucedió? -Lo miró extrañado.
-Mi hija... Está indispuesta. Está en el hospital y no sabemos cuando será dada de alta.
-No sabe como lo lamento.
Nick asintió. -Le agradecería la mayor discreción posible.
-Descuide, solo le pido un certificado firmado por el médico cuando Destinee regrese.
-Por supuesto.
-Se preguntará para que lo he llamado...
Nick asintió.
-El señor Carter, maestro de biología de su hija, me reportó sobre marcas... Cicatrices en sus brazos. Necesitaba ponerlo al tanto, puede que Destinee necesite atención medica, tanto psicológica como física. Que lástima que su madre no está tan bien presente.
-Escuche... -Se aclaró la garganta-. Tanto su madre como yo estamos al tanto de esto, y Destinee está recibiendo ya ayuda.
-Me alegro mucho. -Sonrió a medias-. Lamento mucho quitarle su tiempo, pero era algo que en realidad nos preocupaba. Por cierto, ¿Hay alguna situación familiar con la que podamos ayudar?
-No, no hay ninguna situación familiar.
-Ya veo. Bueno, señor Jonas, eso era todo. ¿Le gustaría repasar las notas de su hija ya que está aquí? ¿O reunirse con algún maestro? Es una jovencita bastante aplicada. Aunque nos sorprende que no se involucre mucho en actividades musicales, viviendo de una familia como la suya.
-A ella no le gusta y eso lo respeto. Si eso era todo... -Se puso de pie-. Tengo muchas cosas que hacer.
-Gracias por haber venido. -El director lo acompañó a la salida.
Al parecer era cambio de clases, porque cuando Nick salió de la oficina, los estudiantes iban y venían.
Escuchaba murmullos detrás de él pero eso era ya algo normal.
-¡Señor Jonas!
-Maldita sea. -Masculló antes de girarse.
Era un chico que corría hacia él. Moreno, de ojos grises. -Señor Jonas... -Le faltaba el aire cuando llegó junto a él-. ¿Le pasó algo a Destinee?
Nick se metió las manos en los bolsillos. -¿Y tú eres...?
-Eric Montgomery. Soy compañero de clases de Destinee. -Se veía nervioso-. ¿Ella está bien?
-Estará bien.
-He tratado de comunicarme a su celular y...
-Destinee no está en condiciones de recibir llamadas.
-¿Le puede decir que tengo todas las tareas? Si quiere puedo llevárselas, o...
-No se si vaya a volver a la escuela. -Dijo Nick-. Lo lamento. -Y se fue.
Eric se quedó allí parado, aquel no sería un buen día.
-Gracias por venir. -_____ abrazó a Marcelle con fuerza-. No podría resistirlo un segundo más.
-Aquí tienes. -Le entregó un bolso-. Traje lo que consideré mas conveniente, ropa cómoda. Pero, pienso que deberías irte a descansar.
-Claro que no, de ninguna manera. -Se aclaró la garganta-. No pienso moverme de aquí.
Nick venía saliendo del elevador, acompañado de Joe.
-¿No te has cambiado de ropa, muñeca? -Joe le pregunto a _____.
Nick lo miró por unos segundos, y _____ rodó los ojos.
-Demasiada tensión... -Marcelle murmuró.
-¿Verdad que si? -Murmuró Joe, y se aclaró la garganta.
-¿Joe, vamos por un café? -Marcelle le dijo.
-Por supuesto. -Desaparecieron por el elevador.
-Me voy a cambiar... -Dijo _____, tomando el bolso que Marcelle le había traído.
Nick la tomó por un brazo. -Espera.
-¿Que quieres? -Le preguntó desanimada.
-¿Cómo entró ese hombre a tu casa? ¿Por qué? ¿Acaso no sabía que estarías trabajando?
_____ se zafó, sin despegar su vista de la de Nick. -Tú mismo escuchaste a Destinee, olvidó cerrar la puerta... Eso estuvo totalmente fuera de mis manos.
-¡Nunca debió haber pasado, maldita sea! ¡Nunca!
Ella suspiró, y se limpió con el reverso de la mano las lágrimas que no había podido contener. -Daría mi vida, Nick.... Mi vida... Por volver el tiempo atrás y no haber permitido aquello. Pero, no se puede.
-¡Ni siquiera puedes responsabilizarte por esto!
-¡No es mi culpa! -Sollozó-. No lo es... No lo es...
-¿¡Entonces de quien es la culpa!? ¿¡De quien!?
-¡Tú la dejaste sola! ¡Así que si comenzamos por buscar culpables, vas a salir bastante embarrado!
