Que te atrapo, que te atrapo.

Start from the beginning
                                    

-Pero, con todo el respeto, creo yo no estar equivocado al decirle que las bromas de los gemelos Weasley no tienen que incluirme a mi.

-¿Por que acusa a los gemelos? - preguntó de pronto Minerva. Snape la miró como si fuese idiota.

-Conozco sus artimañas, y algo así sólo podría pertenecer a ellos.

-¿Y por que cree que fuimos nosotros? - inquirió Trevor enojado, con una sonrisa inexistente.

-Porque siempre que hay problemas, de una forma u otra este trío acaba teniendo relación. Pero al parecer, ahora es un cuarteto.

-El hecho de que Malfoy nos odie no tiene relación en que nosotros lo hayamos planeado. - agregó Harry.

Snape iba a comentar algo, pero Dumbledore volvió a tomar la palabra.

-¿Podrían jurar que no tienen nada que ver en todo esto?

Los cuatro se quedaron en silencio pero como era sabido, Trevor no pudo mantener la boca cerrada.

-Yo fui el causante de todo. Malfoy me jugó una broma y pensé en devolvérsela, pero no tenía nada en contra del profesor Snape. - acotó enseguida

Los mayores clavaron la vista en él, y para sorpresa de todos, fue Severus quien tomó la palabra.

-Ahora veo porque Hufflepuff. Aún así... - una voz femenina, dulce y entristecida, no lo dejó continuar.

-Yo fui quién le pidió a los gemelos la ayuda. Me ofrecí voluntariamente al pensar que no podría llegar a tiempo a las clases de aquél día.

Ahora si, los profesores y el director miraban la escena con total espanto y asombro. ¿La inocente y estudiosa Granger era capaz de infringir las reglas? Ahora también se sabía la razón de estar en Slytherin.

-Y supongo que decir que también tuve algo que ver no es para nada sorprendente. - Acotó Harry en voz baja. Ron asintió con la cabeza, dando a entender que el también guardaba relación.

-¿Queda alguna duda, director? - pregunto el profesor de pociones con voz glacial. Dumbledore les regaló una sonrisa y un guiño, hecho que hizo enfurecer mas a Snape.

-Son niños, Severus. La rivalidad y las bromas entre ellos son sanas. Eso soy capaz de permitirlo.

-¿También permitirá la falta de respeto hacia mi persona? - insistió decepcionado y enfadado.

Albus suspiró y se acercó a ellos, con sus lentes nuevamente en su cara.

-Eso, lamentablemente, no puedo pasarlo por alto. Y he estado pensando un castigo para ello, una lección. - Severus sonrío: se iba a encargar de darles su merecido, o eso tenia pensado, dado que el director frustró nuevamente sus planes: — ¡Ayudarán a mantener el orden y la limpieza del castillo por un mes!

Minerva, al escuchar tal idiotez, puso los ojos en blanco, se disculpó y se retiró de la habitación: aquello era suficiente para ella.

-¿Co-como dice? - preguntó Hermione, creyendo no haber escuchado bien.

-Así es, se harán cargo de arreglar los cuadros, limpiar tapetes, acomodar estatuas y demás junto con el joven Malfoy, los gemelos Weasley, Goyle y Crabbe.

Los alumnos se miraron estupefactos, incapaz de creerlo.

-¿Es usted consiente de lo que pasara si los reúne y los deja solos? – preguntó Snape como si el otro fuese idiota.

-Es una prueba que tendrán que pasar sin el mínimo error, Severus: o las consecuencias serán peores. Es su decisión. - Y dada por finalizada la lección, se dirigió detrás de su gran escritorio a proseguir con sus tareas. - Cierren la puerta cuando se marchen. - pidió con delicadeza.

Slythendor. [Dramione. Harry Potter]Where stories live. Discover now