Los días mas largos de toda mi vida. Después de hablar con Derek me fui a la casa de Allison y su padre, con quienes me quede viviendo. Según ellos no les importaba tener una cazadora mas en casa. Scott ya estaba acogiendo a Isaac, Stiles tenia problemas financieros, y Lydia a quien parecía mas lógico pedirle refugio ya que su casa era enorme fue la ultima de mi lista por varias razones: lo primero que haría ella seria quemar mi ropa, luego mi personalidad y quizás lo único que se salvara seria Markus mi novio.
Ese era otro tema. Markus y yo... sonaba raro decirlo, sobretodo porque ya me había acostumbrado a decir Derek y yo. La relación entre Markus y yo se fue haciendo mas fuerte, o por lo menos para él, porque desde que había recibido la llamada de Derek sentí que mi mundo iba a ser peor que antes, sus ultimas palabras fueron <<Volveré...por ti>> Sé que la mayoría de las chicas hubieran dejado a Markus de inmediato, pero mi madre había muerto y en ningún momento Derek estuvo ahí, él no fue quien me despertaba por las noches de mis pesadillas, ni quien me abrazaba cuando quería llorar, pero Markus estuvo ahí, no importaba que día fuera o que hora, siempre estaba ahí. Eso me llevo a tomar malas decisiones.
-No sé, no sé si estoy preparada, es algo importante... -Dije, batiendo el pincel en el agua para quitar el color rojo.
-Pues con Derek no te lo pensaste mucho. -Contesto Lydia mientras pintaba con un tono naranja.
-Es diferente... Derek, bueno yo...
-Tu aun lo amas... -Continuo Lydia, mientras yo decidí dejar el pincel a un lado y mirarla fijamente.
-Markus lo entiende, vale, y nosotros... bueno yo... necesito tiempo.
-Cristal, Markus y tu sois la mejor pareja que he visto jamas, no te ofendas Allison. -Dijo girándose hacia Allison quien parecía algo nerviosa. -Derek te dejo tirada muchas veces, podríamos decir que desde que os conocisteis, Markus no... Derek no volverá, Markus esta aquí pero no siempre lo estará.
Me quede pensando un poco en las palabras de Lydia. Pero, no me sentía lista para estar con él. Tenia miedo, cosa que jamas tuve con Derek. No era un miedo a, si lo haría bien o si le gustaría mi cuerpo o esas cosas, era miedo a que me tocara, a que me besara y yo tuviera que fingir, miedo a equivocarme. Derek al llamarme despertó una esperanza en mi que creía muerta, pero ya había pasado tiempo desde aquello y él no había vuelto. Suspire profundamente y mire mi pintura. Todo estaba rojo, como los ojos de Golden cuando lo vi por primera vez, o cuando mato a mi madre o cuando yo lo iba a matar. Lo tenia claro, ese rojo vivo de sus ojos seria lo que vería al matarlo.
-No es un pulso muy firme para una tiradora. -Comento Lydia.
-Me lleva pasando las ultimas semanas...desde aquella noche. -Contesto Allison, dejando caer el pincel que salpico todo su cuadro blanco dejándolo con puntos rojos, como si fuera sangre.
Lydia se levanto y se acerco a Allison, quito el papel y muy firmemente le dijo que continuara. Me pareció algo estricta. Allison, Stiles y Scott estaban sufriendo las consecuencias de haberse suicidado y haber vuelto a la vida para poder salvar la vida de sus padres. Hubiera muerto y vuelto a la vida mil veces solo para salvar a mi madre, y me hubiera importado poco las consecuencias de eso. De alguna forma en mi se creo una envidia hacia Allison, Stiles y Scott. Desde el entierro de mi madre, lo único que veía era a Allison y su padre intentando disimular que les causaba lastima, sin embargo Allison a la vez fue un apoyo, ya que ella sabia lo que era perder a una madre al igual que Stiles.
Cuando terminamos las clases nos fuimos a comer, con Stiles, Scott y Isaac. Todos nos sentamos y mientras comíamos íbamos hablando sobre lo que les sucedía a Allison y los otro dos. Stiles parecía muy nervioso y cansado a la vez asustado pero quien no lo estaba? Scott miraba a cada rato su sombra y sus manos y Allison intentaba no cerrar los ojos ni para pestañear.
