Estoy empezando a dudar seriamente de eso. Explicar mierdas no es mi fuerte, pero por él lo intentaré. Ya lo tengo a medio empezar porque tengo una idea y voy a ponerla en práctica. Creo que Beomgyu la apreciará.

—¿Sabes que me llamó antes de venir a cenar esa noche? —pregunta papá, haciéndome volar la puta cabeza.

—¿Qué?

Papá se ríe al recordar.

—Así es como supe que no buscaba tu dinero. Llamó para hacer una pregunta sencilla.

—¿Qué pregunta? —me inclino hacia adelante, devorando sus palabras en lugar de esta costosa cena.

—Si yo te amaba. Dijo que no quería participar en que lo usara como arma contra ti, y que si esas eran mis intenciones, él te dejaría solo para protegerte. Me dijo catorce veces que no quería verme lastimándote, y que si eso iba a pasar en la cena, no vendría. Cuando le dije que te amaba y que no tenía intención de lastimarte, me hizo explicar por qué. —Papá se ríe y mi corazón se derrite como si Beomgyu fuera mi príncipe azul.

—¿Qué... qué dijiste?

—Dije que durante toda tu vida había intentado protegerte y que lo había hecho terriblemente mal. Luego le dije que estaba tratando de hacerlo mejor. Pareció aceptarlo.—Papá se encoge de hombros—. Luego me dijo que no quería una cena tradicional, quería snacks sin gluten. Luego me colgó. —La sonrisa en el rostro de papá es de orgullo.

Beomgyu siempre me sorprende. Y me miente a pesar de decirme que nunca mintió. Esto es una mentira por omisión; nunca me dijo que habló con mi papá. Yo me preguntaba cómo sabía papá que no comía gluten.

—Ah, y me hizo enviar un coche para que lo recogiera —añade papá, riendo—. El conductor dijo que habló solo y maldijo en voz baja todo el tiempo.

—Oh, Dios mío —gemí, amándolo aún más—. Él es... jodidamente...

—También está enamorado de ti, Yeonjun.

Tal vez consiga que esa mierdecilla defina el amor y ponerle presión a él también. Beomgyu le había dicho específicamente a mi papá lo que quería cenar, y luego tuvo la audacia de quejarse de haber comido una cena que no quería cuando apareció. Es el hipócrita más sexy que he conocido, pero es aún más sexy porque trató de protegerme.

Todos aceptamos otra copa y luego papá hace una pregunta más.

—¿Solo tengo que saber si es algo público o no? ¿Estás fuera del armario? ¿Lo mantienes en secreto? ¿Te sientes cómodo con que el mundo lo sepa?

Habrá algo de shock, pero realmente me importa una mierda.

—No lo mantendré en secreto, pero no sé cómo él se sienta. Hablaré con él.

—Bien, porque ya hubo rumores sobre sexo ruidoso en su dormitorio anoche. — Soobin se ríe—. Sabían que venía de su habitación y que gritaba el nombre de Yeonjun.

Toda la razón.

—Pero no saben si eres tú o no. La mitad del campus lo niega porque no eres gay, pero la otra mitad lo afirma porque te han visto entrar y salir de ese dormitorio. —Soobin me mira—. Habla con él, porque tarde o temprano saldrá a la luz, y debéis estar preparados para eso.

No es que estemos siendo discretos. Quiero decir, no tenemos demostraciones públicas de afecto ni nada por el estilo. No nos tomamos de la mano en público ni tenemos fotos juntos en las redes sociales, pero nunca oculto mi tiempo con él. Él viene a mi dormitorio, yo voy al suyo, hemos estado juntos mucho tiempo en el coche, juntos en público. No creo que a Beomgyu le importe, siempre y cuando haya superado todo ese asunto de que no es digno. Si no lo ha superado, tendré que demostrarle lo jodidamente digno que sí es.

Walking red flag | YeongyuWhere stories live. Discover now