Capitulo 28

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Nick extendió la mano y me apartó unos rizos de la frente.

― El pelo te brilla bajo el sol. No pensé que el pelo castaño pudiera ser tan reluciente.

Me sonroje.

― Hmmm reluciente. Nadie nunca uso esa palabra para describir mi pelo.

― Es una buena cualidad para el pelo ― dijo él ―. En especial si brilla bajo el sol y tiene esas cositas que parecen tirabuzones.

Por un instante más nos miramos el pelo, los ojos, la piel. Luego me sentí vagamente consciente de los familiares sonidos otoñales que provenían del jardín. Anne que saltaba sobre una gran pila de hojas, mamá diciéndole que dejara de hacerlo porque las hojas rastrilladas había que ponerlas en bolsas.

― Será mejor que te pongas a trabajar ― le dije a Nick con suavidad ―. Mis padres pueden comenzar a preguntarse qué está pasando.

Nick levanto una ceja.

― ¿De veras quieres que me ponga a trabajar?

Me encogí de hombros.

― Bueno, no, no quiero exactamente que tú...

― Piensas demasiado en lo que debería hacer la gente ______ ― dijo él con dulzura.

― No es verdad ― me defendí.

El me sonrió.

― ¿Ah, no? ¿Entonces por qué es tan importante que lustre el auto y embolse algunas hojas? Ni siquiera tus padres parecen demasiado severos al respecto.

― Escucha ― dije, poniéndome rígida ―, sólo porque pienso que, si estás en la casa de alguien para trabajar como castigo por meter semillas de marihuana en el macetero de una profesora sería de veras bueno que hicieras algo de trabajo, no quiere decir que yo sea una aburrida, mojigata y pesada hija de director, con nada mejor que hacer que...

― ______, ______ ― Nick me apretó las manos entre las suyas. ― ¿Quién dijo que eras aburrida o mojigata o cualquier otra cosa?

―Tú‖, quise contestarle, al recordar de golpe todo lo que había oído decirle a Marty Richards aquel día en el baño. Está bien, tal vez no haya dicho exactamente que yo era aburrida o mojigata, pero podía muy bien haberlo hecho.

― Bueno... tú... hace unas dos semanas... yo oí...

Pero no pude terminar de hablar Nick me había rodeado la cara con sus manos. Sus penetrantes ojos verdes estaban fijos en los míos.

― No eres aburrida en absoluto, ______ ― susurró con voz ronca.

Volví a abrir la boca, pero no logré encontrar mi voz.

Él sacudió la cabeza y sonrió.

― Sabes, me gustaría haberme atrevido a pedírtelo.

― ¿A pedirme qué?

― Que me acompañaras al baile.

Sentí que el corazón se me agrandaba.

― ¿Pensaste en invitarme a ir contigo al Baile de Otoño?

El asintió.

― Pero creí que no aceptarías. Parecías odiarme tanto.

― ¡Odiarte! ― dije, riéndome.

Me miró con expresión irónica.

― Es difícil de creer ¿eh? ¿De dónde pude haber sacado esa idea?

Me sonrojé. Me sentí un millón de veces mejor que unos minutos antes. ¿Por qué había sido tan susceptible? Nick sólo me hacía bromas. Y aquella conversación escuchada en el baño... bueno, probablemente la había interpretado mal.

Le dí un puntapié juguetón por debajo de la mesa.

― Bueno, ¿y qué es Swiss Kriss? ¿Tú segunda elección?

Nick se encogió de hombros.

― Oh, fue ella quien me invitó. No iba a decirle que no. Además, ¿había otra manera mejor de darte celos?

― ¿Quieres decirme que aceptaste llevar al baile a la chica más linda del colegio sólo para darme celos? ― pregunté.

― Acepté llevar a la chica a quien algunos consideran la más linda para darte celos ― contestó ―. ¿Funcionó?

― ¡Oh no! ― Le dije, mientras hacía un gesto de rechazo con la mano ―. Casi no pensé en eso hasta ahora.

Media hora más tarde, Nick y yo seguíamos hablando con toda naturalidad cuando oí que Anne subía por la escalera. Había decidido no decir nada más acerca del trabajo en el jardín. Tal vez él tuviera razón, tal vez, en efecto, me tomaba las cosas demasiado a pecho algunas veces. Después de todo, ¿qué me importaba si lustraba o no el auto? Todo lo que deseaba era mirar fijo los ojos de Nick.

En eso estaba precisamente cuando llegó Katie. Al vernos sentados en la mesa, pareció sorprenderse un poco.

― Hola ― dijo con cautela.

― Hola, Katie ― respondió Nick.

Yo sonreí. A esa altura, prácticamente explotaba de ganas de contarle a Katie lo que pasaba con Nick.

― Acerca una silla.

Katie se sentó.

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⏰ Last updated: Jul 18, 2015 ⏰

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Adorable Rebelde ; Nick Jonas Y Tu . (Adaptada) Where stories live. Discover now