X.- Alfa Gamma

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Stiles estaba agotado, había usado toda su fuerza para deshacerse del control de esa mujer, su cuerpo le dolía y podía sentir como su herida se había abierto. Oh, Melissa lo iba regañar mucho por hacer algo tan tonto.

— ¿En qué tanto piensas, Mieczyslaw? — le preguntó Mateo con diversión. Le alegraba ver a su amigo bien, pero aún tenía la pequeña curiosidad acerca de sus ojos y sabía que Derek también había notado como los ojos del Hale habían cambiado.

— Tienes prohibido irte de nuevo. ¿Sabes lo asustado que estaba? Pensé que no volvería a verte y luego eras esa cosa y no supe que hacer. — le reclamó Eli molestó, pero pequeñas lágrimas corrían por sus mejillas.

Stiles suspiró y abrazó a su hijo con fuerza.

— Lamento que esto pasara, prometo que voy a cuidarme mejor. Por favor perdóname, cachorro.

Eli restregó su cabeza sobre el pecho de su padre. Estaba tan asustado de perderlo, no podía hacerlo, simplemente el hecho de imaginarse un mundo sin él lo destrozaba ni siquiera sabría como seguir adelante.

*

Peter abrazó a su hermano en cuanto salieron de la Iglesia. Stiles gruñó levemente al sentir dolor en su herida.

— Tienes prohibido levantarte de cama hasta que esa herida sane y no me importa lo que digas te vas a quedar en la mansión. — le dijo Peter de manera seria mientras le daba un leve golpe en la cabeza.

— Esta bien. Creo que nuestro querido Mitch ya ha recibido suficientes regaños por una noche. Tenemos que regresar a al mansión y que la adorable Melissa cure su herida. — se acercó hasta el castaño — ¿Esa perra te hizo algo más? ¿Te hizo daño?

— Nah. Un poco de acónito en las muñecas y eso abrió un poco mi piel, pero fuera de eso. Creo que ella no tenía idea de que ya no tengo la capacidad para sanar.

— Eso es bueno. Significa que no se sabe acerca de tu condición, tenemos que mantenerlo así. — tomó las muñecas del otro — No están tan heridas, un poco de pomada y cubrir la herida y listo. Ahora vamos a casa. — le dijo Annabeth no sin antes acaricia el cabello de Eli con cariño.

Todos podían notar un cambio en Stiles, pero nadie lo decía. El castaño de por sí tenía un aura de poder ahora parecía haber incrementado, era como si sintieran la necesidad de dejar sus cuellos al descubierto e inclinarse. También había crecido la necesidad de protegerlo y verlo bien. No lo entendía, pero no era momento para sacar eso a la luz.

*

Peter bajó al primer piso donde estaban Mateo y Derek, los demás se habían ido a descansar.

— Bien. Mica esta dormido y Eli no se separa de él. Sus heridas no son graves, pero Melissa me dijo que ahora no debe levantarse de la cama.

— Creo que debemos de hablar de algo. — dijo Derek mientras el mexicano asentía.

— ¿Notaste algo diferente en Mitch? ¿Una sensación de poder?

— Si. Algo cambio en él, ¿verdad? — se sentó en uno de los sofás de la sala de estar.

— Cuando logró liberarse del control del Berserker sus ojos brillaron, pero no eran azules.

— Eras rojos. Ahora es un alfa.

— ¿Alfa? Solo existe una clase de lobo que puede convertirse en un alfa sin la necesidad de tomar la chispa de otro o que se la hereden. — miró a los menores — Un Alfa verdadero. Pero no tiene sentido. Miren, sé que mi hermano es una persona increíble y con un corazón enorme y puro, pero él ya ha asesinado y para ser esa clase de Alfa no puede haber hecho.

— Ahora es un Alfa de eso no hay duda. — dijo Derek de manera seria.

— Pero no es como nosotros, él tiene mucho poder. Él siempre ha tenido esa aura de poder, eso fue lo que hizo que se ganara mi respeto, pero ahora es diferente... No sé cómo explicarlo.

— Es como si nuestros lobos nos exigieran correr por su aprobación, cuidarlo.

— Mmm... Creo que vamos a tener que hablar con Alan. Le pediré que venga mañana temprano. — dijo Peter mientras caminaba hacia la cocina con su celular en el mano.

— ¿Por qué no puede haber paz en este pueblo? — se preguntó Mateo. No le había creído al castaño acerca de que TODO podía pasar en Beacon Hills.

— Créeme me lo he preguntado toda mi vida.

*

Stiles despertó con una ligera sonrisa adornado su rostro. Su cachorro estaba recostado a su lado y no soltaba su brazo.

— Lamento haberte preocupado, cachorro. — susurró Stiles acariciando el cabello del menor, el cual se removió levemente, sonrió y se apegó más a su padre.

— Es un buen niño. — comentó Chris. El cazador estaba sentado sobre la silla del escritorio.

— Lo es. ¿Qué pasó con Kate?

— La llevé con el consejo de cazadores y ahí obtuvo su sentencia.

— ¿La asesinaste?

— Si. Era mi trabajo.

Stiles suspiró y negó con la cabeza.

— No era tu trabajo, su código es un asco, pero Kate merecía morir. Lamento que hayas tenido que hacerlo tu. — le dijo Stiles.

Chris notó que algo había cambiado. Quien sabe que había pasado con Kate, pero el castaño parecía un poco más tranquilo y amable con él.

— ¿Cómo te sientes? — cambió el tema.

— Mejor. Es un dolor leve, además ya estoy acostumbrado.

El cazador se acercó al lobo y quitó un poco la gasa para ver como seguía la herida.

— Se ve bien. — ambos escucharon pasos dirigiéndose a la habitación — Me voy, no quiero que arranquen mi garganta. — saltó por la ventana.

Stiles no pudo evitar reír levemente, eso le recordó a cuando eran adolescentes y el humano salía corriendo a pesar de que la mayoría de su familia sabía que el cazador iba a la mansión. Christopher era un buen hombre que había cometido muchos errores, desgraciadamente eso le había costado su confianza.

— ¿Papi? — preguntó Eli abriendo poco a poco sus ojos.

— Duerme, cachorro. Alana viene a verme.

El adolescente asintió y se volvió a acurrucar al lado de su padre.

— Hola, Mica. ¿Cómo te sientes? — le preguntó Alan mientras se sentaba al lado del castaño.

— Mucho mejor. Es bueno dormir en una cama y no en una piedra. — se movió levemente — Ya no tengo edad para estás cosas.

Alan rio mientras negaba con la cabeza.

— Sabes que algo cambio dentro de ti, ¿verdad? — el castaño asintió — Por favor, enséñame tus ojos.

Stiles tomó aire, cerró sus ojos y al abrirlos brillaban en un color carmesí oscuro.

— Eres un Alfa Gamma, tal y como lo era tu abuelo. 

El Tercer HaleWhere stories live. Discover now