No Debo Enamorarme

Capítulo 91

-“no yo no soportaría el saber que por mi culpa estas preso, Pablo yo te amo”- le digo
-“yo también te amo bebe, no puedo creer que hayas echo esto por mi”-
-“yo haría cualquier cosa por vos Pablo “- le digo mirando fijamente sus ojos para comenzar lentamente a acercarnos su boca y la mía deseaban besarse yo lo deseaba tanto como él a mi, cuando sus labios tocaron los mios, comencé a besarlo delicadamente para luego ir subiendo de a poco nuestra intensidad no pensé porque si lo hubiese echo seguramente me arrepentía pero ahora lo quería conmigo y no me importaba otra cosa.

Pablo
Había estado toda la iglesia y fiesta mirándola, el momento que nos tocó estar los cuatro juntos senti que era como antes, como cuando éramos felices pero de un momento a otro nos volvieron a la realidad y no le quedó otra más que irse con ese estúpido de Simón y su padre, aún así no podía sacarle los ojos de encima estaba distinta si algo le notaba cambiado peor eso no quitaba que seguía estando igual de hermosa que siempre, note que se iba como buscando escapar de donde estaba y me decidí a seguirla sin que me vea, caminaba sin rumbo hasta que de pronto se detuvo y grito desesperadamente, su grito era desgarrador y acompañaban al llanto que ya no pudo contener, no aguante más no me importó nada solo la alcance y la envolví en mis brazos, a mi pequeñita hermosa, necesitaba que este bien, no me importaba nada mas, cuando logro que se calme un poco la lleve a la casita que estaba en el predio del salón para que estemos solos y nadie interfiera en nuestra charla.
Le pregunté que le pasaba y ahí comencé a entender, la habían alejado de mi a cambio de no denunciarme por estar con una menor, no podía creer que este haciendo esto por mi, de la nada y como ya había pasado anteriormente me perdí en esos la labios tan lindos y tentadores, hasta besarla, nuestro beso era suave recordando cada momento juntos hasta que de la nada empezó a subir la intensidad podía sentir el efecto de este beso en mi cuerpo y podía sentirla vibrar conmigo, pase mi mano por su espalda acariciándole hasta tocar el cierre de ese hermoso vestido que llevaba mientras ella me quito el saco, la corbata y empezó a desabotonar mi camisa, sentía su piel a la vez que la iba desnudando, la deseaba, la amaba, deje sus labios y comencé a dejar besos por su cuerpo mientras nos deshacíamos de lo último de la ropa.
-“no, no te das una idea de lo que extraño tu cuerpo tu amor mi bebita”- le susurro
-“yo también mi amor y necesito que estés dentro de mi”- me pide
Me pongo protección y de a poco ingreso en ella mientras la beso, la acaricio y juego con cada parte de su cuerpo, las embestidas lentas y que a de poco iban subiendo su intensidad hasta ser lo suficientemente rápidos para hacernos gemir de placer, ella gemía y decía mi nombre mientras me pedía más y repetía sonidos de aprobación una y otra vez hasta terminar y quedar esta vez yo en su pecho recostado mientras ella me abrazaba, sentía su corazón y su respiración tan agitada como la mía
-“no nos podemos privar de esto bebe de amarnos así, déjame hacerte feliz”- le pido
-“y como seria feliz sabiendo que estas preso Pablo”- me dice ella
-”entonces escapemos bebe, donde nadie nos encuentre”-
-“a donde vamos a ir si soy menor de edad. Además arrastraríamos a mi hermano en todo esto yo no puedo hacer eso Pablo entendeme por favor”-
-“no podes pretender que te deje ir así no más te amo, que queres que haga como que lo nuestro nunca existió, que tome esto como nuestra despedida”-
-“si eso quiero que hagas lo mismo que voy a hacer yo, déjame ir como te voy a dejar yo”- me dice y comienza a levantarse para vestirse nuevamente
Me levanto y la abrazo no quería soltarla, no quería aceptar lo que me pedía, la vuelvo a besar y ella me sigue el beso  –“no puedo, te das una idea de lo que me cuesta verte con Simón, imaginar que te beso que te toco que te hizo el amor como te lo hago yo”- le confieso, los celos me mataban
-“hace lo mismo busca una chica que te quiera, con la que puedas estar y si en algún momento, más adelante se da que estemos juntos vemos”-
-“y que pasa si me enamoro de verdad de esa chica o si vos te enamoras de Simón”- le pregunto
-“te deseo que seas feliz de corazón, es un riesgo que debemos correr, además yo ya estoy sintiendo cosas por él, me estoy enamorando y me estoy permitiendo vivir una relación con él”- me dice para salir Lo más rápido posible de donde estábamos
No lo podía creer eso último fue un balde de agua fría, me termine de vestir y me senté, en el mismo sillón en el que recién había echo el amor con mi pequeña, pase la manos por mi pelo frustrado por aquella confesión, como pudo decírmelo tan suelta como si fuera algo tan insignificante, porque si lo amaba se la veía tan torturada, por que lloraba, por que estaba angustiada y solo la calmaron mis brazos, por que había salido escapando del salón y más que nada por que se la estaba jugando así por mi. Esto me dejaba en claro que ya no podía seguir acá y que lo mejor era irme de viaje alejarme de todo y de todos un par de meses, hasta que me pueda recomponer de todo esto.
Marizza
Salí de estar con Pablo, no podía creer que después de ese maravilloso momento le halla dicho que me pasaban cosas con Simón cuando no era asi, cuando mi cuerpo vibraba a su tacto y cada vez que pensaba en él o en como hacemos el amor un escalofrío me recorría y sentía algo raro en la panza cuando recordaba como lo hacía con él,  pero si no lo hacía No me iba a dejar ir, estaba dispuesto a soportar cualquier cosa por estar conmigo pero esto iba más allá de nosotros mi viejo lo había dicho lo metía preso a él y a mi hermano también, como iba a permitirme verlo tras las rejas y más todavía que mi hermano este preso, que mi cuñada quede sola recién casada, no podía tolerar todo esto. Iba caminando de nuevo hacia el salón  usando me cruzo con Simón, se lo veía molesto