A veces el amor llega de muchas maneras inesperadas, y eso están por vivir Juliana y Valentina junto a sus respectivos familias.
La morena, siendo madre soltera de 2 niños con un imperio inimaginable, con padres ya fallecidos, al igual que la madre...
La morena había estado todo el rato sentada en el parque pensando lo que había sucedido con la castaña, hasta que sintió 2 presencias sentarse a su lado y sin necesidad de verlos pudo sentir que se trataba de sus 2 mejores amigos, quiénes siempre habían estado a su lado en todo momento.
Huerta: Así que aquí estás!!! (Viendole sus ojos algo irritados)
Fabiola: Estás loca! Sabes lo preocupados que estábamos por ti (Dandole un golpe)
Juliana: Lo siento mucho!!! Solo necesitaba estar sola y pensar (Suspirando)
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Huerta: Quieres contarnos que ha pasado?
Juliana: Es Valentina, fui tan tonta que en tan poco tiempo me he enamorado de ella
Fabiola: (Suspirando) Contigo todo sucede rápido, qué?, A caso ya olvidaste la llegada de Eros (Sonriendole)
Huerta: Eres demasiado rápida Váldes (Le sacaban una media sonrisa)
Juliana: No sirvió de mucho, porque ella no siente lo mismo (Viendolos tristes)
Huerta: Estás completamente segura de lo que dices? (Extrañada le asentía). Mira, la verdad he visto señales de lo contrario, ella gusta de ti, quizás le da miedo aceptar o le da temor la idea de entrar en el mundo de los Váldes (Incrédula), y no me refiero a ti y los niños, sino, a lo que pesa ser parte de los Váldes (Asintiendo, al recordar parte de su pasado cuándo sus padres ya no estaban)
Juliana: Y qué debo hacer? (Viéndolos) no quiero que mis hijos también sufran por ella
Fabiola: Primero debemos hablar nosotros con ella y dependiendo de eso, hablas con ella considerando si le cuentas todo o no...
Huerta: Nosotros no tenemos nada que...
Fabiola: Calla!!! Claro que sí, somos sus hermanos de Juliana y NO permitiré que sufra nuevamente (Viendole a sus ojos)
Juliana: Gracias por siempre estar (Veía a los dos) son nuestra única familia...
Los tres se abrazaban amorosamente cómo si fueran realmente familia, porque sí, eso eran, una familia, que la misma vida había formado.
Fabiola: Es hora de irnos a casa, porque las hamburguesas ya deben estar frías (Riéndo)
Huerta: Pues vamos, porque debo pasar por mis acompañantes estrellas (Asintiendo)
Juliana: Vamos entonces!!! Porque muero de hambre (Asintiendo los tres se marchaban)
Fabiola: Te vemos en la casa, vamos! Dame las llaves que no te pienso dejar manejar y me mates (Riéndose los tres). -------------‐------------------------- Mansión de los Váldes.
Fabiola y Juliana iban entrando por la gran puerta de la mansión recibida por los niños Váldes quiénes se le fueron a los abrazos a su madre y Tía Fabiola, misma que habían correspondido felizmente. Todo esto bajo la mirada de los Carvajal en especial Valentina.
