Imbécil

159 29 1
                                    

Italia                          9:00am

- ¿C-cómo que quién s-soy? - Pronuncié sin poder creerlo, creí que ya lo tenía devuelta.

Miré a Tae con confusión, aunque él miraba a Jeon con enojo y algo de sorpresa.

Mis lágrimas empezaron a caer por mis cachetes como cascadas mientras me iba acercando a la puerta de espaldas.

- ¿¡Cómo puedes decirle eso!?, ¿eres idiota o qué? - Alegó Tae

Jeon rió para luego mirarme de nuevo a mi.

- Mi amor, es una broma - Dijo con una tierna sonrisa en su rostro.

Mi tristeza se evaporó para convertirse en enojo.

Me acerqué a pasos rápidos a él y deposité una cachetada en su rostro.

- ¿!Acaso eres imbécil!?, a ver si así te dejas de hacer el gracioso, no sabes todo lo que te extrañé, lo que te he llorado y me sales con ésta - No sé en que momento estaba de nuevo en llanto.

Jeon me miró con amor para luego incorporarse en la camilla y tomarme de mi nuca para juntar nuestros labios.

Esto era lo que necesitaba, necesitaba sentirlo conmigo, que me besara así como me está besando, con ternura, amor y siempre con deseo.

- Esto es lo que más extrañé - Habló el peli negro - Juro no dejarte solo nunca.

- Más te vale - Respondí con mi respiración algo agitada.

- Lamento interrumpir pero ya llegó el desayuno - Anunció Jin entrando por la puerta con una bandeja llena de comida.

La dejó en la mesita, saludó a Jeon con unas palabras más y salió de la habitación.

Me dispuse a darle su desayuno en la intimidad de esta habitación, solo estabamos él y yo volviendo a la vida después de haber muerto por quince días.

- Amor, llama a Nam por favor - Pidió después de terminar su desayuno.

Tomé su telefono y marqué el número del mencionado.

- Nam, Jungkook quiere verte, puedes venir por favor - Hice saber.

En unos minutos el peli gris estaba en la habitación.

- ¿Qué pasó? - Indagó

- Nada - Respondió Jeon - Solo quiero pedirte un favor.

- Claro, ¿Qué es? - Preguntó

- Jimin, mi amor, podrías salir de la habitación un momento - Habló.

Confundido por su petición, salí de la habitación encontrandome con Tae.

- Mimi, justo venía por ti, ¿Quieres acompañarme al centro comercial?.

- Ah.... Claro, deja me cambio y salimos.

Me dirigí a la habitación de Jeon y yo, tomé prendas cómodas y me encontré con TaeTae en la salida de la mansión.

- Toda la vida - Dijo con evidente desespero el pelirojo.

- Perdón ~ - Le sonreí para depositar un beso en su cachete.

Llegamos al centro comercial, el cual Tae me hizo caminar de arriba a abajo y de abajo a arriba.

Entró a tiendas como Gucci, celine y otras más, mi mejor amigo tiene un excelente gusto de la moda.

- No se para qué compras todo esto si hasta con una bolsa de basura te verías bien - Bufé con gracia.

Sus cachetes se sonrojaron y luego rió dando un leve golpe en mi pecho.

Después de ir a la última tienda donde compró todo su skincare, nos dirigimos a la mansión, ya entrada la noche.

Es increíble como el tiempo se pasa volando cuando estamos haciendo algo que nos gusta o acompañando a alguien importante para nosotros.

Cada uno se fué a su habitación tras llevar todas las bolsas de Taehyung a la habitación de Hoseok y él.

Me duche, me puse mi pijama, mis cremas faciales y corporales, para luego salir hacía el comedor donde ya estaban todos.

Incluyendo a Jeon.

- Hola mi amor - Saludó con un beso en mis belfos apenas me senté a su lado - ¿Cómo estuvo todo?.

- Agotador, este niño me hizo caminar todo el centro comercial y cargar con mil bolsas - Hice un puchero que Jungkook besó.

Jeon llamó a Jennie, una de las que ayuda con la limpieza para pedirle que alistara una sesión de spa para mi.

- No es para tanto - Reí

- No me importa, ya lo están arreglando, así que apenas terminemos vamos a ir allí a tomar un merecido masaje - Ordenó

Mordí mi labio mirándolo con deseo, me encanta cuando me habla con autoridad sobre mi.

- Okey - Dije bajito y un tono casi seductor.

- Que no se les olvide que estamos en la mesa todos - Bufó Yoongi con gracia tras ver como nos quedamos mirando con nuestros ojos casi que botando fuego.

Reímos para acto seguido empezar a comer todo lo que había en nuestro plato.

Después de charlas triviales en la mesa, entre risas y de más cosas nos dirigimos a la cabaña que había en el jardín, donde ya se encontraba preparado nuestro spa.

Nos dirigimos al baño para ponernos las batas, bajé mi boxer y de inmediato sentí una fuerte nalgada.

- Ahg - Solté en sorpresa.

Jeon me acorraló en la pared mientras me besaba y amasaba mis nalgas con fuerza.

Un beso desbordado en deseo, y es que ya hacía rato no teníamos sexo.

- Si no fuera por este maldito vendaje te cogería ahora mismo - Bufó con molestia.

- Además nos están esperando afuera - Recordé

Rodó los ojos y nos dejamos hacer todo lo que Jennie había preparado para nosotros.

Mascarillas de chocolate, masajes, sauna, aceites, y entre todo ello caí dormido.

Desperté viendo como Jeon me llevaba cargado subiendo las escaleras hacia nuestra habitación.

Le dí un beso en su cuello y caí en los brazos de morfeo nuevamente.

Clandestine love Where stories live. Discover now