September

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"Te acuerdas
¿La noche del 21 de septiembre?
El amor estaba cambiando las mentes de los pretendientes.
Mientras persigues las nubes
Nuestros corazones estaban sonando"
Earth, Wind & Fire

—Bien hecho, Regulus.

Nathan sonrió ampliamente mientras se levantaba con dificultad del suelo. Se había golpeado la parte posterior del cuerpo al chocar contra la pared, y su espalda palpitaba por el impacto, pero ver los avances de un amigo era más gratificante.

Regulus se adelantó para ayudarlo a levantarse y Nathan le despeinó sus perfectos rizos con cariño.

—A este ritmo, serás capaz de matarme —aseguró Nathan con gusto. —Has mejorado.

Regulus solo se dispuso a arreglar su cabello con un chasquido de su lengua.

—Desordenaste mi cabello— murmuró disgustado.

—Y tú me lanzaste contra la pared, amigo. Estamos a mano —bromeó Nathan.

Regulus rodó los ojos y bajó los brazos para mirarlo fijamente.

—¿Estás bien? preguntó fríamente, aunque la insistencia en sus ojos revelaba preocupación.

Nathan hizo un ademán.

—Me golpeó bastante, pero no es gran cosa—respondió alegremente. —Tus hechizos han mejorado, ya no dudas ante tu oponente. Eso es bueno.

—Solo falta mejorar la oclumancia— murmuró Regulus mientras se acercaba a Nathan. —Estás distraído.

Nathan ladeó la cabeza y jugueteó con su varita de un lado al otro. Podía sentir la distracción. Podría culpar a James por ello, ya que antes de encontrarse con Regulus, había estado con él, y después de una larga sesión de bromas y un par de besos, notó cómo algunas chicas y chicos miraban a James con más atención. Esto no le gustó en absoluto, pero no podía juzgarlos, aunque le molestara, ya que James se había convertido en el ideal de todos. Su altura, su cuerpo delgado pero musculoso, su personalidad vivaz y el hecho de ser el capitán del equipo. Nathan quería pedirles que dejaran de mirarlo de esa manera, que solo él podía mirarlo así. Pero tuvo que contenerse y marcharse de allí.

Lanzó un suspiro y recuperó la compostura frente a Regulus.

—Nada del otro mundo —respondió tranquilo. —Las clases están ocupando mi atención.

—¿No será Potter? Dicen por ahí que estás en una relación con él —señaló Regulus con desagrado.

Nathan rodó los ojos y le dio un par de palmaditas antes de caminar hasta la baranda de la torre.

—Siempre he sentido curiosidad por la rapidez con la que se propagan los chismes en la escuela.

—Las paredes hablan—respondió a lo lejos. —Los cuadros y los fantasmas. De eso viven.

Soltó un sonido de comprensión y rió levemente.

—Es de esperarse.

—Entonces, ¿estás saliendo con él?

—No voy a negar lo obvio.

Regulus resopló disgustado. Nathan giró para mirarlo con una ceja alzada.

—¿No te agrada? Pensé que estarías feliz por tu amigo.

—Es un traidor.

—Protege bien a tu hermano.

—Eso es aún peor.

Nathan frunció el ceño pero no continuó con la discusión.

—Reg, olvidé preguntarte al respecto, pero ¿cómo te sientes después de eso?

CHANGES | James PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora