ENCHANTED ─ KOOKMIN.

VI

Cómo me explico

Que no todo siempre regresa a su sitio

Tal vez aceptar que ya fue y que no fuimos

Que no seremos jamás.

en huelgA - Nicole Zignago.

 𐀔 🌷 Ꮺ

JiMin sorbió por la nariz mientras estiraba su cuerpo sobre su cama. Un dolor agudo en la cabeza lo hizo gemir y cubrir sus ojos con molestia.

—Venus, basta... —siseó apartando a su gata de su espalda.

Park entreabrió sus ojos y rápidamente sintió que estos estaban hinchados. Suspiró al sentir que la avalancha de recuerdos y sentimientos lo atacaban nuevamente. Odiaba sentirse de esa forma.

Habían pasado cuatro días y, aunque en un comienzo quiso creer que no se hundiría en su miseria, fue eso justamente lo que hizo. Esos días había apagado el teléfono porque no quería hablar con sus padres o con Jeongguk, necesitaba estar solo y pasar su duelo de esa forma. Escuchar a alguien decirle que todo estaría bien y que pronto vería nuevamente las cosas coloridas sólo lo haría sentirse de la mierda; así que sí, sólo se había encerrado en su apartamento junto con su tristeza que, estaba muy seguro, estaría caricaturizada con una maldita nube gris persiguiéndolo a todas partes.

—Eres un perdedor —se dijo así mismo cuando entró al baño y notó su penoso reflejo en el espejo.

Un JiMin ojeroso, con rastro de baba en la comisura de sus labios y ojos como papas podridas lo saludaba de la forma más deplorable que jamás creyó ver. Tomó rápidamente su cepillo y pasta dental para asearse y poder limpiar su cara, al parecer hoy sí se sentía de ánimos para dejar su cama de la autocompasión y al menos verse presentable.

"Eso, debes animarte o seguro tendrás el culo hundido por estar tanto tiempo tirado en la cama".

Bien, ser divertido en momentos deprimentes quizás no era su fuerte y se lo recordó para hacer un listado. Ayer por la noche mientras terminaba su última botella de vino se decidió por matar al JiMin que se lamentaba de un primer amor fallido.

"Siempre hay una primera vez para todo", se recordó tras mojar su rostro para limpiarlo con algo de exfoliante, notando que la hinchazón bajó un poco junto a su apariencia de loser.

Luego de terminar su pequeño self-care, decidió vestirse para salir a correr. Sí, a las once de la mañana, pero no podían culparlo puesto que ayer había bebido hasta muy tarde, cosa que le ayudó a saber que él también podía confiar en el alcohol como su ex.

"No empieces, Park", regañó su subconsciente al recordar a su no-novio.

Luego de colocarse ropa cómoda para poder trotar, JiMin fue hasta la cocina para servirse un vaso con agua y una pastilla efervescente para su pequeña resaca y servirle, de paso, algo de comida y agua a su gata, quien ahora estaba viéndolo desde la encimera.

El rubio se acercó para darle unas cuantas caricias en su cabeza como agradecimiento silencioso por acompañarlo estos cuatro largos días y ser su pequeña y peluda compañera de desvelos. Seguido a eso, se dirigió al salón para buscar su móvil, el cual se encontraba sobre uno de sus estantes para libros, apagado y volteado. Caminó entre las botellas vacías de vino y Soju y restos de comida chatarra para poder tomarlo y encenderlo.