ROSE ;; Keria x Gumayusi

❧ III. 2

Minseok llegó sin aliento al centro de investigación, con el corazón aún latiendo con la emoción de su descubrimiento. Sin embargo, al abrir la puerta del despacho de Sanghyeok, se dio cuenta de que este estaba vacío. El profesor no estaba en su lugar habitual. El chico miró alrededor, buscando alguna señal del paradero del profesor. El silencio del centro de investigación se mezclaba con la tenue luz de las lámparas, creando una atmósfera serena pero desconcertante. Al salir del despacho, Minseok se topó casualmente con Minhyung, quien caminaba por los pasillos con mirada ausente cargando varias carpetas y documentos.

—¡Minhyung! ¿sabes donde está el profesor Lee Sanghyeok? Necesito discutir algo importante con él —preguntó, intentando disimular el nerviosismo en su voz.

Minhyung levantó la mirada, sorprendido al ver al otro en el centro de investigación en esa hora de la noche.

—¿Minseok? ¿Qué estás haciendo aquí tan tarde? Sanghyeok salió hace un rato, se fue a su casa temprano.

La noticia cayó como un jarro de agua fría sobre Minseok. La urgencia de compartir sus descubrimientos con el profesor Lee le impulsaba a buscarlo de inmediato, pero la realidad le recordaba que no sabía dónde vivía el profesor. Frustración y determinación se reflejaron en sus ojos mientras buscaba en su mente una solución.

—Minhyung, necesito hablar con el profesor. Es importante. Sé que eres cercano a él, ¿puedes llevarme a su casa? —Pronunció las palabras con urgencia, esperando que la conexión entre Minhyung y el profesor pudiera ser su puerta de entrada a la información que necesitaba.

Minhyung, con un suspiro de evidente de molestia, arqueó una ceja al escuchar la solicitud del menor. Si bien su relación con Sanghyeok era cercana debido a su rol como ayudante, no compartía el entusiasmo ni mucho menos el cariño que Minseok tenía hacia el hombre. 

—¿Por qué demonios necesitas ir a la casa de Sanghyeok en plena noche? ¿No puedes esperar hasta mañana?

Minseok se mordió el labio inferior, sintiendo la premura de explicar su situación sin revelar demasiado. Con ojos suplicantes, intentó transmitir la seriedad de la situación al otro.

—No puedo esperar, Minhyung. Es sobre... algo que me encomendó, y necesito discutirlo con él lo antes posible.

El mayor frunció el ceño, desconfiado ante la misteriosa urgencia de Minseok. No obstante, al ver la expresión preocupada del chico y notar el brillo en sus ojos, una parte de él cedió. Pese a que su relación con Sanghyeok no era la mejor, el afecto que sentía por Minseok le impulsó a ayudar.

—Está bien, pero no te prometo que Sanghyeok esté de buen humor por ser molestado a estas horas —dijo dejando los documentos que llevaba sobre una mesa cercana.

Minseok asintió agradecido, comprendiendo que el otro estaba haciendo una excepción al acceder a ayudarlo. Ambos salieron del centro de investigación y se dirigieron a pie hacia la casa de Sanghyeok. La noche estaba tranquila, y la fresca brisa acariciaba sus rostros mientras caminaban por las calles casi desiertas. El menor aprovechó el trayecto para agradecer al mayor por su ayuda, intentando aliviar la tensión entre ellos.

—Minhyung, en serio, aprecio mucho que me ayudes con esto. Sé que es inusual, pero es algo que debo hablar con el profesor Lee. Te debo una...

—Me aseguraré de cobrártela en algún momento, no te preocupes. —Lo interrumpió con una sonrisa irónica.

La casa de Sanghyeok se erigía majestuosa al final de la calle. Era una estructura que parecía fuera de lugar en medio las casas modernas circundantes, diseñada y decorada como una antigua mansión inglesa. Las enredaderas ascendían por las paredes de ladrillo, otorgándole un aire de misterio y encanto. Mientras se acercaban, Minseok notó que las luces en el interior de la casa estaban encendidas, indicando que su propietario aún no se había retirado a descansar.