Citas a Medianoche

SOMBRAS

Kiara y yo quedamos estupefactas ante lo que teníamos frente a nosotros, era una escena desgarradora, en la distancia escuchamos algunos gritos y gente haciendo alboroto, ambas salimos corriendo en esea dirección, aunque por mi mente tan solo pasaba una cosa...

《¿Donde estaba Sam?》

Llegamos al sitio y encontramos al personal de la casa, algunos luchaban contra el fuego lanzando agua con mangueras y otros con baldes de agua, otros ayudaban a unos que habían resultado heridos o afectados por el humo, mientras que otros estaban tirados en el pasto del jardín cubiertos con sabanas blancas...

《¡Oh no!... Algunos murieron》... pensé.

Busqué por todas partes pero no había señales ni de Sam, ni de su padre, por un momento pensé que seguían aun dentro de aquel infierno.

De pronto y de entre medio del bosque que rodeaba la casa, apareció aquel muchacho que estaba con Kiara la primera vez que la vi, Sebástian, creo que se llamaba, venia cargando apoyado en su hombro a uno de los trabajadores de la casa, traía una herida en su mejilla derecha, pero al parecer y de un modo que no podía explicar, esta se estaba sanando poco a poco.

—Veo que fuiste por la chica.— Dice mirando a Kiara.

—Eh si... era lo único que se me ocurrió.— Así al menos sabemos donde está.

—Pues buena idea, no eres tan tonta como pensaba.— respondió Sebástian de forma pedante.

— Veo que tu no tuviste tanta suerte... que idiota.

Kiara y Sebástian se lanzaban comentarios bastante insultantes, en ese momento me dí cuenta de que no se llevaban bien, eso fué extraño, ya que los había visto juntos la primera vez, pero al parecer, no se caían para nada bien.

—¿Donde está Sam?.— interrumpí la conversación que tenían.—¿Que pasó aquí?.

—Tuvimos problemas, eso fué lo que pasó. — Respondió Sebástian mientras se tocaba la herida ya casi cerrada de su mejilla.

Aquello me dejó con la boca abierta...¿Quién o Qué... era ese Sebástian?... ¿por que parecía que sus heridas se habían sanado por si solas y por que a nadie más parecía sorprenderle excepto a mi?.

—¿Problemas?... ¿Cómo que problemas?.— Pregunté bastante confundida.

—Pues que el señorito aquí, no pudo con unas simples Sombras, se las tira de ser un gran guerrero, pero se deja vencer por simples Criaturas.— se bufó Kiara.

—Ya va... ¿De que hablas?...¿Criaturas?... ok, ok... alguno de ustedes dos que me expliqué...

¡¡¿Que demonios está pasando aquí?!!.

—Que algunas Sombras han....

Kiara habia comenzado a explicar cuando de repente, se vió interrumpida por los gritos de algunos de los empleados de la casa, los cuales vieron salir al Señor Redick de entre los árboles, junto con otros empleados, el señor Redick venía cubierto de algo viscoso que tenía un color entre negro y morado, uno de los empleados venía sangrando de un brazo, estaba herido, así que todos salieron a su encuentro. Luego de dejar al herido a cargo de otros empleados, se dirigió hacia nosotros, ni siquiera volteó a ver su casa.

—Vaya Sebástian, veo que has llegado antes.— el señor Redick miró a Sebástian.— Y tú kiara, veo que también hiciste tu parte... ir por Diana, fué bastante acertado.

—Señor Redick... ¿Que pasó... donde está Sam?.— intervine.

—No lo sé pequeña, cuando todo comenzó le pedí que huyera, al principio no quería, pero él sabía lo que tenía que hacer.