Que Asco El Amor

09| Inicios Finales•

𝐄𝐦𝐦𝐲ツ

Última primer mañana cepillándome los dientes para ir a la preparatoria, último primer día. Y aquí estoy yo, preparándome para mi primer día en la preparatoria Golden Wave.

Lindo nombre ¿no?

Después de enjuagarme la boca y retocar mi cabello con el secador, agrego un toque de perfume para sentirme completamente lista. Mi uniforme, impecablemente planchado, y mis pertenencias organizadas en mi mochila, todo está preparado.

Mamá y yo compramos todo hace un par de semanas junto a la tía Miriam y Natt, fue divertidísimo.

Al salir de mi habitación, con mi uniforme puesto y las zapatillas en la mano, veo la habitación vacía de mi hermano, este es mi último primer día, en un instituto nuevo, sin él...

Una sensación de nostalgia y tristeza se mezclan dentro de mí. Suspiro profundamente y bajo las escaleras hacia la cocina, donde el reconfortante aroma del café recién hecho me da la bienvenida. Mamá está ocupada preparando el desayuno, y me dirijo hacia la isla para tomar asiento.

—Mamá... ¿Crees que me irá bien? —pregunto, sintiendo cómo la ansiedad se retuerce en mi estómago.

Ella me sonríe con ternura.

—Por supuesto, cariño. ¿Estás nerviosa por tu primer día?

Asiento, mis dedos jugueteando nerviosamente con el borde de mi mochila.

—Un poco. Pero estoy emocionada, también... O sea, es un lugar que no conozco, con gente nueva, en la que estaré sola, sin nadie para apoyarme...

Ella termina de preparar el desayuno y se sienta frente a mí, sus ojos reflejando comprensión.

—Recuerda, siempre puedes llamarme si necesitas algo. Y sé que harás muchos amigos, tranquila.

Su abrazo es un refugio cálido, y el beso en mi cabeza, un bálsamo. Luego se levanta, buscando sus cosas con prisa. Empezará con un trabajo algo más serio, diseñar una casa para una familia increíblemente adinerada. No es poca cosa, y debe ser puntual.

Sigo tomando mi café, los pequeños sorbos me ayudan a centrarme, cuando un mensaje de papá vibra en mi teléfono. Casi siempre me escribe, y de cierta forma, me gusta que lo haga, siento que así yo no perderé contacto con él, jamás.

En la pantalla, el mensaje de mi padre ilumina mi rostro con una sonrisa en cuestión de segundos.

07:03

Papi⭐:

Buen día princesa, ¿cómo estás?
Solo quería desearte un lindo día
y recordarte que no te estreses,
Todo saldrá bien.
Te quiero mucho.

Contesto rápidamente el reconfortante mensaje y guardo el teléfono en mi mochila. Me concentro en el calor del café entre mis manos, dejando que el aroma y el calor me reconforten mientras pienso en el día que tengo por delante.

Mamá, lista para su día de trabajo, se despide con un abrazo y un beso en la mejilla. Pero obviamente no sin antes tomarse una foto conmigo con una de esas cámaras que imprimen, según ella: «¡La última con uniforme de prepa!»

Bastante... «peculiar» su forma de expresarse.

—No te preocupes tanto y disfruta cada momento, cariño. Saluda a Miriam y Natt de mi parte. Te veo esta tarde.

Con una sonrisa, asiento y observo cómo mamá sale de casa. En ese momento, la alarma de mi teléfono me recuerda que me levanté más temprano de lo habitual. Además, un mensaje de Nathan parpadea en la pantalla de mi móvil.