03 | Baila lento

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𝐿𝐸𝒱𝐼 


Fingir inocencia ante Victoria Ackerman había sido más sencillo de lo que creí.

Desde que salimos del cuartel, Erwin me había explicado porque la necesitábamos. Desde el inicio el plan fue que Victoria fuera la financiadora de la Legión, desde el inicio Erwin planeaba usarla, pero la pobre ilusa creía que ella estaba logrando el trato de su vida.

Realmente Erwin le sacaba años luz.

Debía admitir que la chica en cuestión había sido bendecida con una buena apariencia que atraería a cualquier morboso, es la chica con la que cualquier hombre quisiera cumplir sus fantasías.

Aunque a mis ojos solo era una chica sobreviviendo.

Victoria Ackerman no era muy distinta a mi madre.

Y tal vez fue oírla decir que deseaba salir de eso lo que me hizo querer salvarla de esa bola de grasa que no apartaba sus ojos de sus senos, tal vez fue el instinto de querer salvarla porque a mi madre nadie la salvó.

Tal vez, y solo tal vez, estaba intentando acabar con mi remordimiento de que mi madre muriera por acostarse con tipos para darme de comer.

Aunque Victoria se veía mejor cuidada, probablemente por el entorno en donde se movía. En lo único que podía pensar al verla era, ¿cómo había acabado así?

Bailar con ella era sin duda una forma de que todos me observaran, lo cual se volvía realmente irritante, pero al mismo tiempo daba satisfacción ver a todos esos viejos desear poder tomarla de la cintura, no había nada como enfadar a gente con poder para pasar este estúpido evento.

Victoria se mueve con fluidez, mientras que yo debo reconocer que me siento como un caballo recién nacido.

Mato titanes, ¿donde especificaba que tuviera que saber bailar? Erwin de mierda, no para de engañarme.

-Así que Levi...-dice luego de un rato- ¿De donde vienes? Puedes decir una verdad o una mentira, yo solo debo dar una historia concreta y realista.

-De la ciudad subterránea-decido admitir-. Erwin me reclutó de allí.

-Ya veo, ¿eras de las tropas de guarnición?

-No, era un criminal.

Ella sonríe.

¿Por qué sonríe? Es irritante.

-Así que eras un chico malo, o más bien, lo eres ¿no?

-¿Eso es parte del cuestionario? ¿Qué más? ¿Necesitan saber cuanto me mide?-digo molesto, siento que esta mujer me toma el pelo.

Nuevamente ríe.

-Esa pregunta puede ser más bien de interés personal-bromea-. No estés tan tenso. Hace unos minutos querías tener sexo conmigo, y ahora eres como el tal Flegel. ¿Eres virgen, Levi?

-¿Acaso no puedes enfocarte en tu cuestionario de mierda?

-Vaya, mal carácter, lo anotare.

Tiro de su cintura hacia mi, ella parece no esperarlo y tropieza, viéndose obligada a colocar una mano en mi pecho.

-Me estás sacando de quicio, y no quieres saber de lo que soy capaz cuando me hacen enfadar.

-Sé cosas sobre ti, Levi-dice recomponiendose-. Te gusta dar patadas, ¿no? ¿Acaso me patearas? No me importa, lo rudo también es divertido.

Victory | Levi AckermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora