Final: Dulce despedida

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Llegó la boda.

Dos alfas y un Omega sin idea de que harían. Los tres que escaparon de esa vida volvían, que estaban pensando?

Riki sal de la boda de tu ex.

Aunque admitir su valentía era un gran punto, nadie se paraba en el lugar que sabe estaria la persona que lo daño tanto.

Un tanto masoquistas eran.

Y por qué Sunoo se veía tan jodidamente bien? Era la cuestión.

El Omega era atractivo, añadiéndole su traje de novio. Parecía un príncipe, su cabeza adornada con una linda diadema de flores, su traje ajustado que destacaba su cintura y la perfecta menera en qué lucía su marca lo había ver tan indescriptible.

Sunoo parecía haber nacido para ese momento.

Y el alfa, Heeseung lucía tan enamorado.

La ceremonia acabo.

Y entonces el momento de las fotos llegó.

"Las familias de los novios."

Jay y Jake maldicieron a Sunoo por haberse casado con Heeseung, ahora tendría que ver toda su vida a aquellos.

Cuando Jay finalmente vio a Jungwon después de ignorarlo toda la noche parecía que se había iluminado el lugar.

Jungwon seguía siendo Jungwon.

Con esa sonrisa, sus ojos de gato y sus malditos hoyuelos que volvían loco a Jay.

Un pequeño "Crack" se hizo presente cuando Jay vio a Jungwon cerca de Tae, pero durante cinco años se había preparado para eso. Y pareció continuar aunque deseaba llegar a casa, deseaba olvidarse de todo.

Ya había aceptado que Jungwon jamás sería para el.

Pero, por que dolía tanto?

Jungwon saludo a Jay como si nada hubiera pasado, solo una sonrisa y lo paso.

Jay deseaba ser tan fuerte como Jungwon.

— Iré a hablar con Sunghoon, si no vuelvo en 30 minutos ve por mi, estaré detrás de la carpa, de acuerdo? — Jay asintió, no iba dejar ir a su hermano con Sunghoon, pero Jake sabía lo que hacía.

Jay confiaba en que Jake era maduro, Jake siempre lo fue después de todo.

Pasaron 5, 10, 15 minutos, 20 minutos, 30 minutos y Jake no llegaba.

Se debatió en si ir o no, Jake le había dicho que lo hiciera. Pero de verdad quería que lo hiciera?

— Ven acompáñame. — El alfa rubio le había dicho antes de tomarlo de la mano y jalarlo hacia un lugar un tanto alejado.

El sistema de Jay entro en alerta cuando vio que Riki iba demasiado decidido hacia Sunoo y Heeseung.

Jay no quería ser parte de eso.

— Felicidades por su boda. — El alfa menor hablo, su sonrisa parecía tan sincera.

Tal vez solo Jay se dio cuenta que la fingía.

Sunoo también le sonrió y Heeseung, Heeseung no tenía ni idea de lo que pasaba. Por que ahora Jay aprecia ser siempre un mal tercio?

— Muchas gracias. — Sunoo hablo. — De ahora en adelante, no se desaparezcan tanto, se les extraña por acá.

— Volveremos más seguido, en vacaciones. — Jay había logrado decir.

— Sunoo. — Riki interrumpió. — Gracias por ser mi mejor amigo, es un placer estar el día de tu boda. Sin duda, serás muy feliz.

Jay vio como Riki tragó en seco.

Cómo Sunoo asintió con cierta nostalgia.

Sunoo si amaba a Heeseung, estar con alguien cinco años te hace amarlo. Aunque se preguntaba que hubiera sido de su vida con Riki.

De cierta manera el Omega se sentía satisfecho de haberlo rechazado, Riki había logrado su mayor potencial gracias a ello, Riki había salido de su zona de confort y ahora era alguien admirable.

Jay camino había dónde Jake le había indicado con una sonrisa cuando Sunoo y Heeseung se despidieron.

Ahora debía ir a salvar a Jake.

— Veo que estás solo.

Jay conocía esa voz.

— Busco a Jake, lo has visto?

— Mmh. — El Omega asíntio. — Lo vi irse con Sunghoon.

El silencio se apoderó del ambiente, aún cuando ambos se sentaron en una banca. Jay podía sentir el aroma de Jungwon y viceversa.

No sé preocuparía de Jake, por el momento.

Cinco años y se seguía sintiendo como cuando estaban en la universidad.

— Siempre supe que Jake y Sunghoon estarían juntos, pasara lo que pasará. — El alfa hablo.

— Supongo que los que están destinados, siempre lo estarán.

Jay miro las estrellas, tan lindas como el chico a su lado. Ya era de noche y solo la luz de dentro de la carpa y la luna los iluminaba, un ambiente romantico en exceso.

— Perdón. — Jungwon hablo. — Fui muy inmaduro en aquellos días, estaba tan malditamente confundido que confundí a todos, en especial a ti...

— Yo..— El alfa intento interrumpir.

— Déjame hablar, Jay. — Jay miro a Jungwon, el omega no lo miro, solo miro hacia la carpa donde estaban todos. — Lamento tanto no haber sido alguien maduro en esos momentos. Cuando te fuiste durante mucho tiempo quise buscarte, saber algo de ti y estar contigo. Después le conté todo a Tae y el lo entendió, no me reprochó ni dijo nada. — Jungwon rió. — Pero entendí que jamás lo amaría como en algún momento lo ame. No podía sacarte de mi mente y eso me frustraba. Me encontré pensando todo el tiempo en ti y luego yo y Tae terminamos. Supongo que era lo mejor. — Jungwon negó, sentía un nudo en su garganta. — Sabes, te espere mucho tiempo e intenté buscarte pero tú parecías cerrado a mi. Incluso intenté mandarte cartas pero nunca las recibiste. Supongo que los que no están destinados jamás lo estarán.

Al decir lo último las mejillas de Jungwon se llenaron de lágrimas, como si hubiera retenido demasiado aquellas palabras.

Jungwon maduro, también creció. Aprendió a sobrevivir y se volvió un Omega fuerte. Jungwon no se quedó con la idea de Sunoo de ser solo un omega que busca un alfa, pero tampoco tomo la idea de Jake de ser un Omega que pudiera solo.

Estaba bien poder solo, pero le gustaba la compañía.

Y Jungwon no había perdido su magia, eso dejaba satisfecho a Jay.

Que les deparaba el futuro?

Tal vez Jay volvería a América y sería un alfa solitario como hasta ahora,  mientras Jungwon seguiría creciendo como persona y todo eso solo sería un recuerdo más que con el tiempo dejarían de recordar.

Tal vez el futuro los uniría.

El futuro era incierto.

Confusion [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora