C A S I O P E A [Jasper Hale]

37 ▪︎¿Padres?

- ¿Padres? - Cassie se giró hacia Alice con sorpresa. La vampiro había ido a visitarla bastante acelerada, señalándole que tenía algo muy importante que decirle - No es que dude de tu capacidad para ver trazos del futuro Alice, pero algo me dice que estás viendo el futuro equivocado. Es literalmente imposible que Jasper y yo podamos concebir una vida. Y, siendo sincera, es algo que nunca he deseado realmente. Así que lamento tener que sacarte las ilusiones de un plumazo, pero no vas a ser tía. Nunca. 

- Mis visiones pueden ser erróneas, pero nunca hasta este punto. Sé lo que vi. También sé que las cosas pueden cambiar, pero dudo que lo hagan. 

- Alice...

- Cassie, por favor - ante el tono suplicante la pelirroja cerró la boca y se dejó caer a su lado, al borde de la cama, esperando a que continuara - Es algo imposible, o al menos es lo que creemos. Lo creemos imposible porque nunca, ningún vampiro, ha sido capaz de concebir. Pero eso no significa que no pueda ocurrir. No está demostrado. 

- Hombre, Alice, que ningún vampiro, nunca, haya tenido un hijo, me parece una demostración más que suficiente. 

- Sé lo que vi. 

- No dudo de lo que viste - repitió, empezando a irritarse - Simplemente creo que lo has malinterpretado. 

- De acuerdo - bufó, levantándose de golpe - Jasper reaccionó mejor que tú. 

- ¿Le has hablado a Jasper de la visión? 

- Justo antes de venir a hablar contigo. Él también dijo que estaba equivocada, pero creo que una parte de él mantenía la esperanza. 

- Qué maravilla - murmuró con cierto deje de ironía - Te agradezco la advertencia, Alice, de corazón. Pero creo que por el momento la voy a ignorar. 

- Ya hablaremos en el futuro - se limitó a decir antes de desaparecer sin darle a Cassie la oportunidad de calmar medianamente la tensión que había nacido entre las dos a raíz de ese pequeño intercambio. 

No tuvo mucho tiempo de pensar en eso, pues su rubio novio no tardó en aparecer por donde su hermana adoptiva había desaparecido tan sólo medio minuto antes. 

- Alice ha estado aquí - la pelirroja asintió - Te hizo enfadar. 

- No me enfadé - se levantó para recibirlo con un abrazo y un suave beso en los labios - Simplemente me agobia la idea de hablar del futuro, sobretodo cuando tiene que ver con un tema tan serio como irreal. 

- ¿Realmente crees que es imposible?

- ¿Acaso tu no?

- Nunca se ha dado pero...

- ¿Crees que seremos la excepción? Porque yo lo dudo. Siento que eso es algo que le pasaría a alguien como Isabella. A ese tipo de gente a la que le pasa de todo. No es mi caso.