7 ▪︎ V E R D A D

3.2K 297 44
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

 {•••}

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

{•••}

Tan pronto como la cabellera pelirroja tocó la almohada, la alarma que anunciaba la hora de levantarse sonó de manera estridente, extendiendo su ruido por toda la casa. Una mano tanteó el colchón hasta llegar a la mesilla, donde lanzó el aparato lo más lejos posible para acabar de una vez por todas con ese ruido.

- Mierda... - lloriqueó la chica mientras hundía su rostro contra la cama, poniendo una manta por encima de su cabeza. No había pegado ojo en toda la noche por culpa de la presencia de un par de arpías a las afueras de Forks. La persecución que Geralt y ella habían tenido que llevar a cabo para acabar con ellas se había extendido hasta la salida del sol.

Dejó escapar un quejido mientras la puerta de la habitación se abría para dar paso a un ojeroso Geralt que se dejó caer a su lado con pesadez. Todo su cuerpo estaba lleno de pequeños arañazos. Casiopea deslizó la yema de sus dedos por uno de ellos mientras veía como poco a poco se iban cerrando. La curación rápida era una de las muchas ventajas que tenían.

- ¿De verdad tienes que ir? No has dormido nada – murmuró, alzando la cabeza para apoyarla sobre la barriga de su amiga, que no se movió.

Eran las doce de la mañana del sábado. Había prometido a Alice que iría a comer a su casa para terminar con Jasper el trabajo de historia, y ella no incumplía sus promesas. La falta de sueño hacía que todo su cuerpo pareciera estar flotando en una nube, pero no había nada que una buena ducha no pudiera solucionar. Olfateó ligeramente para comprobar que, tal y como había supuesto, tenía el olor a muerte impregnado en la piel.

- Tengo que ir Gery, y estoy bien – respondió – No es la primera vez que estoy más de 24 horas sin dormir.

- Pero si la primera que estás a solas en una casa llena de vampiros. Deberías tener los sentidos alerta.

- No me van a hacer daño.

- Eso es lo que tú te crees.

- Levántate, Gery, no tengo ganas de discutir – empujó la cabeza del hombre, pero este no dio su brazo a torcer. Rodó los ojos antes de ser ella quien se apartara para ponerse en pie. Escuchó a su amigo protestar, pero no se giró para mirarlo.

C A S I O P E A [Jasper Hale]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora