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En la mañana Kai despertaba con un gran dolor de cabeza y volteo a su alrededor y se encontró que estaba en la habitación del Jungkook.

—¿Qué demonios?, ay mi cabeza duele. —Veía por toda la habitación y Jungkook estaba medio cuerpo en el piso y las piernas en la cama —. Despierta. —Le movía una pierna.

—Diría ya no vuelvo a tomar así, pero estaría mintiendo. —Se levantó del suelo —. ¿Qué haces en mi habitación? ¿Qué hago sin camisa?

—Ni yo sé que hago aquí, aquí desperté.

—No me digas que los dos somos de esos que se les olvida lo que hicieron cuando tomamos.

—Creo que sí, bueno a veces recuerdo las cosas entre sueños.

—Eso es malo, pero anda vete de mi habitación, necesito darme un baño.

—Ya oí, ¿quieres algo de desayunar?

—Café super cargado y algo que nos levante.

—Veré que puedo hacer, pero creo que tendré que ir a comprar algo porque ese era mi plan ir hoy de compras, dejare el café preparándose solo te lo sirves.

—Si, sí.

•♡•

—Si qué estás muy mal Kookie.

—Cállate Soyeon me duele la cabeza.

—¿Qué demonios celebraban anoche?

—Inauguramos la noche de chicos.

—¿Cuándo conoceré a tu compañero?

—Creí que Jisoo ya te lo había presentado o algo como es su amigo.

—No, como no afecta en nada en nuestra relación pues no lo ha hecho.

—Fue por unas cosas para la comida al parecer él aguanta mucho más que yo.

—A ti se te sube con un simple dulce envinado.

—Viniste a verme o a regañarme.

—A verte, pero el regaño es un plus. —Soltó una risa.

—Ay mi cabeza.

—En serio, ¿no recuerdas nada? —Le entrego una pastilla y un vaso de agua.

—Nada, lo último fue qué aun seguíamos en el bar tomando y platicando.

—¿Por qué tienes una mordida en el labio?

—¿Mordida?, de seguro fue Saerom ya que estuve con ella antes de salir con mi compañero.

—Dile que ya no te muerda porque parece que te dieron un golpe.

—Yo también creía que era un golpe cuando me vi en el espejo.

—Deja traerte el café.

—Por favor, siento que muero.

Soyeon salió a terminar de preparar el café para su hermano cuando la puerta se abrió.

—¿Hola?

—Hola tu debes ser el compañero de mi hermano, un placer, Jung Soyeon. —Extendió la mano.

—Huening Kai. —La estrecho —. Así que tú eres la famosa Soyeon, Jisoo siempre habla de ti, felicidades por su compromiso.

—Gracias y espero que sean cosas buenas.

—Por toda la miel qué derrama es muy bueno. —Soyeon se sonrojo.

—¡Soyeon, mi café! —Jungkook grito desde la habitación.

—¿Cómo lo has aguantado?

—Solo le doy por su lado.

—¡Soyeon!

—Ya escuché. —Lo sirvió —. Mejor se lo llevo.

—Suerte.

—Un placer conocerte Kai.

—Igualmente.

•♡•

En la noche Kai trataba de dormir, pero a su mente venían imágenes de él besando a alguien en el bar bajo el efecto del alcohol y yéndose con él además lo que él considera lo peor llegando al departamento y aun besándolo sin embargo entré esos recuerdos reconoció el rostro de Jungkook.

—¿Que hice? —Se levantó de repente —, no, no, dime que estoy mezclando recuerdos. —Fue al baño a mojarse la cara.

Se veía en el espejo y pudo notar una leve mordida en su labio inferior.

—Eso no paso Kai, eso no paso. —Se decía para animarse.

—¿Qué no paso? —Apareció a su lado.

—¿Qué haces despierto?

—Me dio sed, pero anda cuenta chisme.

—Creo que bese a alguien en nuestra salida.

—Uy y era linda la chica.

—¿Chica?, amm... solo recuerdo un beso a quien no lo sé.

—Aquí empieza nuestra búsqueda de tu princesa.

—Jungkook creo que hay algo importante que debo decirte.

—La vamos a buscar por todos los bares si es necesario —No estaba escuchando Kai —, hare una lista de bares para ir empezando, vuelve a dormir para que recuerdes más.

—Jungkook...

—Tengo mucho trabajo qué hacer te veo mañana para empezar a planear la búsqueda de tu verdadero futuro amor. —Lo dejo sin dejarlo terminar.

—Pero Jungkook —Suspiro —, a mí me gustan los chicos. —susurro solo para él —. Creo que debo de decírselo lo antes posible y sutil.

Rumeite - KaiKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora