bajo las estrellas de beberly hills

capitulo XXII: Señales en el aire

El sol se había ocultado en el horizonte, dejando a Tracey y Jimmy bajo un manto de estrellas titilantes. La atmósfera estaba cargada de una tensión palpable mientras caminaban juntos por la orilla del lago, sus siluetas se reflejaban en el agua serena.

Jimmy notó cómo el rubor adornaba las mejillas de Tracey cuando él se acercó a ella, y sintió su corazón dar un vuelco al verla. Cada gesto, cada mirada, cada palabra que ella pronunciaba, era como una melodía dulce que lo hipnotizaba. Se preguntó si algún día tendría el valor de confesarle lo que realmente sentía por ella.

Mientras caminaban en silencio, sus manos rozaron tímidamente. Jimmy sintió una corriente eléctrica recorrer su cuerpo y un nudo en su garganta. ¿Qué estaba pasando? Se decía a sí mismo que solo eran amigos, pero su corazón parecía contradecirlo.

En su interior, Jimmy experimentó un torbellino de emociones. Sentía la necesidad de proteger a Tracey, de estar siempre a su lado y de hacerla feliz. Su monólogo interno se volvió una confesión interna, una declaración de amor que resonaba en su mente.

"No puedo evitarlo, estoy completamente enamorado de ella", pensó Jimmy con convicción. "Es más que una amiga, es la persona que ha transformado mi mundo por completo. Cada instante que paso a su lado es un regalo y cada sonrisa que me regala ilumina mi día entero".

Sus pensamientos se enredaron mientras intentaba entender la magnitud de sus sentimientos. Quería protegerla, hacerla sentir segura y amada, pero también sabía que tenía miedo de confesar lo que realmente sentía. Temía perder su amistad si ella no correspondía a sus emociones.

Aunque esa noche parecía mágica, Jimmy decidió mantener sus emociones en silencio. Quería disfrutar de la compañía de Tracey, sin presionarla ni asustarla. Pero a medida que avanzaban, los latidos de su corazón parecían más fuertes y difíciles de ignorar.

Jimmy se prometió a sí mismo que encontraría el momento adecuado para decirle a Tracey lo que significaba para él. Mientras tanto, se contentaría con cada pequeño instante que compartieran, sabiendo que ella ocupaba un lugar muy especial en su corazón.

El corazón de Tracey latía desbocado mientras caminaban juntos en silencio, la cercanía con Jimmy hacía que su confesión pareciera más difícil de pronunciar. Sin embargo, el sentimiento que ardía en su pecho no podía ser contenido por más tiempo.

Finalmente, con voz temblorosa, Tracey rompió el silencio. "Jimmy, hay algo que necesito decirte... desde hace tiempo, siento algo muy especial por ti. Eres mi refugio en este mundo caótico, y cada momento a tu lado es como un sueño que no quiero despertar. Me haces sentir amada y valiosa, a pesar de todo lo que he pasado."

Sus palabras llenaron el aire con una energía que parecía contagiarlo todo. Jimmy la miró con sorpresa, sus ojos brillando con ternura mientras escuchaba atentamente. Tracey continuó con determinación: "No importa cuánto débil o afectado por mi pasado me sienta, cuando estoy contigo, todo parece tomar sentido. Eres el rayo de sol que disipa la oscuridad de mi vida".

Las lágrimas se asomaron en los ojos de Jimmy, sintiéndose abrumado por la sinceridad y el amor que emanaban de Tracey. Por un momento, él también había temido confesar sus sentimientos, pero ahora, con la valentía de Tracey, sabía que era el momento adecuado.

"Tracey, yo... también siento algo por ti", confesó Jimmy con voz entrecortada. "Eres la persona más increíble que he conocido, y cada día a tu lado ha sido una bendición para mí. No puedo imaginar mi vida sin ti".

En un gesto cargado de cariño, Jimmy envolvió a Tracey en un abrazo profundo y protector. Sus cuerpos contrastaban, el de él robusto y fuerte, mientras que el de ella, delicado y frágil. Pero en ese abrazo, encontré la fortaleza y el consuelo que tanto ansiaban.

El momento mágico que los unía parecían detener el tiempo. Todo a su alrededor desapareció, y solo existieron ellos dos, fundidos en un abrazo lleno de amor y esperanza.

Tracey y Jimmy se miraron a los ojos, el corazón de ambos latía acelerado, mientras una corriente eléctrica recorría sus cuerpos. Con dulzura y timidez, Tracey se acercó a Jimmy, y sus labios se encontraron en un beso tierno y lleno de amor.

Después de un instante, se separaron, sonriendo el uno al otro. "Siempre tienes mal aliento, Tracey", dijo Jimmy con una sonrisa traviesa, rompiendo el hechizo del momento. Tracey no pudo evitar reírse, sintiendo una oleada de felicidad recorrer su ser

"Entonces, ¿eso significa que me besarás de todas las formas?", preguntó Tracey, juguetona. Jimmy la miró con cariño y asintió, acercándose de nuevo para besarla, esta vez con más pasión y ternura.

Después de ese dulce beso, Tracey se separó de Jimmy con una sonrisa juguetona en su rostro. "Sabes, podemos mudarnos a México y culpar a los chiles por mi mal aliento", bromeó Tracey, intentando disipar la tensión del momento.

Jimmy se rió y la miró con cariño. "No creo que sea necesario mudarnos a otro país, Tracey. Tu mal aliento no es un problema para mí", dijo con sinceridad. "Eres perfecta tal como eres, y quiero estar contigo sin importar nada más".

Las palabras de Jimmy llenaron el corazón de Tracey de alegría y gratitud. Nadie antes había aceptado su mal aliento y sus imperfecciones con tanta ternura y amor. Se sintió amada y valorada de una manera que nunca había experimentado antes.

"Gracias, Jimmy", murmuró Tracey, sintiendo un nudo en la garganta. "Tú también eres perfecto para mí, y te prometo que siempre estará a tu lado, pase lo que pase".

Jimmy la abrazó con fuerza, sintiendo la calidez de su cuerpo frágil en sus brazos. "Juntos enfrentaremos cualquier obstáculo que se nos presente", dijo con determinación.

"Si alguna vez te preguntan por qué tienes mal aliento, solo diles que es el 'toque mexicano' en tu sonrisa. ¡Es una obra maestra culinaria!" bromeó Tracey, haciendo reír a Jimmy.

Ambos entre alegría bromas y sonrisas descubrieron su amor