bajo las estrellas de beberly hills

Capitulo XVII: los tesoros de tracey

La madre de Jimmy y Tracey estaban sentadas en el sofá de la acogedora sala de estar. La madre de Jimmy miró cariñosamente a Tracey y le preguntó con interés genuino:

"Tracey, cariño, me gustaría saber dónde guardas tus pertenencias. ¿Tienes alguna maleta o algo así?"

Tracey pareció reflexionar por un momento y luego respondió con sinceridad: "No, señora. En realidad, no tengo muchas cosas. Solo tengo un peluche de perro que he tenido desde que era una bebé, una libreta que encontré en el basurero de una escuela y un par de aretes que una mujer rica tiró a la basura".

La madre de Jimmy asintió comprensivamente, sintiendo el peso de las experiencias de Tracey. "Esos son tesoros muy especiales para ti, ¿verdad?", preguntó con una sonrisa cálida.

Tracey asintió con timidez, sosteniendo su peluche de perro con cariño. "Sí, son lo único que tengo, pero son importantes para mí", admitió.

La madre de Jimmy progresó una mano hacia Tracey y la sostuvo con suavidad. "No importa tengan cosas tengan, lo que realmente importa es el valor sentimental que tienen para ti. Eso es lo que hace que sean verdaderos tesoros", le aseguró.

Tracey miró a la madre de Jimmy con gratitud en sus ojos. "Gracias por entender", dijo con sinceridad.

La madre de Jimmy sonrió y le dio un cálido abrazo. "Estamos felices de que compartas tus tesoros con nosotros, Tracey. Eres una parte especial de nuestra familia ahora", expresó con cariño.

Al día siguiente La mañana se desplegaba con un brillo cálido en la casa de Jimmy. Tracey se sintió cada vez más cómoda con su nueva familia y disfrutó de momentos cotidianos como el desayuno en la mesa.

Mientras compartieron risas y anécdotas, Tracey notó que Jimmy lucía especialmente guapo esa mañana. Su cabello despeinado, su sonrisa brillante y sus ojos brillantes la abandonaron momentáneamente sin palabras.

Mientras Tracey se perdía en sus pensamientos, la madre de Jimmy la miró con cariño. "¿Estás bien, Tracey?", preguntó con una sonrisa.

Tracey se sobresaltó un poco y respondió rápidamente: "Sí, estoy bien. Solo... estaba pensando en algo".

La madre de Jimmy asintió comprensivamente. "Tómate tu tiempo, cariño. Siempre estamos aquí para escucharte", dijo amablemente.

Tracey miró a Jimmy nuevamente y se dio cuenta de que lo que sentía iba más allá de la amistad. Comenzó a sentir mariposas en el estómago y se sintió confundida por esos nuevos sentimientos.

Mientras el desayuno continuaba, Tracey luchaba por mantener la calma mientras observaba a Jimmy. Se preguntaba si él podría sentir lo mismo que ella, o si simplemente estaba imaginando cosas.

Con el corazón latiendo acelerado, Tracey se prometió a sí misma explorar esos sentimientos y, por primera vez, permitirse soñar con la posibilidad de algo más entre ella y Jimmy.

Esa tarde, mientras el sol se escondía en el horizonte, Jimmy y Tracey se encontraron en el parque donde solían pasar tiempo juntos. La calidez del atardecer se mezclaba con la complicidad de su amistad, pero algo había cambiado.

Tracey notó que Jimmy la miraba de manera diferente, con una ternura que no había visto antes. Sus ojos parecían reflejar una mezcla de preocupación y cariño, lo que hizo que su corazón latiera con más fuerza.

"¿Estás bien, Jimmy?" preguntó Tracey, notando que sus ojos estaban enrojecidos y una lágrima amenazaba con deslizarse por su mejilla.

Jimmy miró a Tracey, dejando que las emociones tomaran el control. "Tracey, te admiro tanto", comenzó a decir con voz suave pero temblorosa. "Has pasado por tanto y sigues luchando, pero... me duele ver que todavía no te has recuperado completamente de tu desnutrición".

Tracey bajó la mirada, sintiendo un nudo en la garganta. Si bien estaba agradecida por el apoyo y cuidado de Jimmy, también se sentía vulnerable al ser vista de esa manera.

"Sé que no es fácil para ti, pero estoy aquí, Tracey. Quiero estar contigo en cada paso del camino, apoyándote, cuidándote y amándote", dijo Jimmy con determinación.

Las lágrimas se desbordaron de los ojos de Tracey, abrumada por los sentimientos que experimentaba. Se sentó junto a Jimmy y tomó su mano.

"Jimmy, yo... también siento algo especial por ti", confesó con voz temblorosa. "Pero me asusta que me veas así, débil y herida".

Jimmy le acarició el rostro suavemente. "No tienes que tener miedo, Tracey. Tienes una fuerza increíble y yo estoy aquí para apoyarte en cada paso del camino. Quiero ser parte de tu vida, de tus sueños y de tu corazón", dijo con sinceridad.

Las lágrimas de Tracey se mezclaron con una sonrisa, sintiendo el calor del amor que emanaba de Jimmy. En ese momento, ambos se dieron cuenta de que sus corazones estaban conectados de una manera especial y que juntos podrían enfrentar cualquier desafío.

Mientras Jimmy y Tracey continuaban abrazados, la suave brisa del atardecer parecía transportar a Jimmy a un momento del pasado. En medio de la tranquilidad del parque, un dulce y nostálgico flashback lo invadió.

El recuerdo lo llevó de regreso a aquel día en que, por primera vez, vio a Tracey dormir en Beverly Gardens Park. Su imagen desnutrida y débil le provocó un dolor en el corazón que no pudo ignorar.

En ese entonces, Jimmy se alejó, ignorando sus sentimientos y permitiendo que su actitud arrogante se impusiera. Sin embargo, esa escena nunca se desvaneció por completo de su memoria. Ahora, al mirar a Tracey en sus brazos, el contraste entre su presente y aquel recuerdo del pasado era abrumador.

Se sintió abrumado por la culpa y la compasión al recordar cómo solía tratar a Tracey. Su corazón se llenó de pesar por haberla herido, y la promesa que se hizo a sí mismo de hacer todo lo posible por reparar el daño se fortaleció aún más.

"Tracey", murmuró Jimmy con voz temblorosa, rompiendo el silencio. "Te prometo que desde ahora estaré siempre contigo, te cuidaré y protegeré, y te amaré tal como eres".

Las lágrimas brillaron en los ojos de Tracey mientras asimilaba las palabras de Jimmy. Ambos compartieron la alegria.