CAPITULO XIII

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-Rhydian ya no estoy tan segura de esto- se sinceró Zara mientras tiraba de la mano del rubio, haciendo que este se volteara a verla

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-Rhydian ya no estoy tan segura de esto- se sinceró Zara mientras tiraba de la mano del rubio, haciendo que este se volteara a verla.

-Estarás bien pero si en algún momento te quieres ir, solo aprieta mi mano 3 veceeces y lo tomaré como nuestra señal- Zara soltó una risita.

-¿Ahora ya tenemos códigos secretos?- Rhydian se alegró al escuchar ese tono burlón que al parecer sólo usaba con él.

Se acercaron a la puerta y Rhydian tocó, a los minutos un hombre con un plato en la mano les abre la puerta.

-Rhydian, soy Daniel- Rhydian le dio una mirada nerviosa. Los ojos del señor se dirigieron a la rubia que sostenía la mano del chico con firmeza.- Apuesto que tú eres Zara.

-Si, señor- murmuró ella bajo pero maudible. En su mente recordó que a los alfas ajenos no se les tenía que mantener la mirada, o al menos eso sucedía con su padre. Zara se estremeció al recordar a su progenitor.

-Pasen, por favor.

Al ingresar a la casa, Zara notó al instante como la madre de Maddy y Maddy misma se tensaban. Daniel Smith trató de aligerar el ambiente con chistes pero después de unos minutos se dio cuenta que lo mejor era que empezaran a cenar.

Rhydian atacaba con ganas la comida, devoraba la carne con ansias y eso le sacó una sonrisa a Zara. Ella mientras comía despacio y disfrutando el sabor.

-Debe ser genial tener una familia con la cual puedas ser tú mismo- comentó el rubio cuando hizo una pausa de su cena. Zara, quien ya había terminado, subió su brazo en la mesa y apoyo su cachete en su mano, observando a Rhydian con una leve sonrisa triste.

No quería imaginar a un Rhydian pequeño, sin entender lo que le ocurría y teniendo tantas preguntas y a nadie a quien acudir.

-Pues, eres bienvenido en cualquier momento- dijo la Sra. Smith, mirando de reojo a Zara con nerviosismo ya que la rubia había notado el énfasis en la invitación singular. La mayor se aclaró la garganta y siguió hablando- Y si tienes alguna duda, solo pregunta-

Rhydian miró a Zara y ella le sonrió con dulzura, animándolo.

-Bueno, por la manada de Zara sé como ellas se transforman durante la luna llena... ¿Ustedes se transforman en la casa?-

Daniel y Emma Smith se miraron ante la mención de la otra manada del pueblo. Maddy los miró con el ceño fruncido y decidió responder por ellos.

-Se transforman en una habitación especial en el sótano- dijo ella mientras seguía comiendo, pateando a ambos de sus padres.

-¿El sótano?- preguntó con curiosidad Rhydian. Maddy asintió y le hizo una seña para que la siguiera. Los padres de ella parecieron salir de su trance y se adelantaron para mostrar el camino. Zara se quedó atrás en la fila, pasando sus manos por sus brazos para darse un poco de tranquilidad.

𝒊𝒏𝒗𝒊𝒔𝒊𝒃𝒍𝒆 𝒔𝒕𝒓𝒊𝒏𝒈, rhydian morrisWhere stories live. Discover now