So Mine [Yandere! Uchiha Shisui]

XXXV. Cine ⚠️ [smut]

—¡Pero son tan suaves...! —se quejó Shisui infantilmente apoyando su frente contra la espalda de Elise.

—¡Shisui...! —se quejó Elise removiéndose y dándose la vuelta hasta que estuvieron frente a frente— ¿Ves? No era tan difícil quitarme las manos del pecho —sonrió triunfalmente.

—Pero eres tan suave, me cuesta mantener las manos alejadas —se quejó como niño mimado y apoyó su rostro en los suaves senos de Elise mientras sus manos serpenteaban de la delgada cintura hasta ese gran trasero que había estado deseando tocar desde la noche anterior.

—¡Shisui! —se quejó Elise con el rostro como tomate.

—Tus pechos me han aceptado entre los suyos, ahora es mi nuevo hogar y almohada —habló Shisui intentando imitar una voz mística y movió su cabeza de un lado a otro sin vergüenza alguna.

—¡Shisui! —gritó avergonzada.

—Mmm... —tarareando ligeramente, Shisui pellizcó una nalga de Elise provocando otro chillido.

—¡Desvergonzado! —chilló Elise intentando safarse del agarre del azabache, pero luego se rindió sin querer volver toda la mañana una pelea extenuante de resistencia que sabía que jamás iba a ganar.

Shisui era un maldito ninja y no cualquiera, era un jodido Uchiha, por ende, un bastardo terco hasta los cojones que jamás se daría por vencido, así que, para preservar energías, ella simplemente sedería esta vez... y se aprovecharía para jugar con esos suaves risos que tiene le hombre como una venganza infantil. Era extraño verlo sin su habitual Haite-ate, pero solo lo volvía más adorable ¡Era como una gran pelusa!

Mientras Elise jugaba con el cabello de Shisui como venganza, el Uchiha estaba pasando el mejor momento de su vida. Incluso si su polla estaba dolorosamente dura y lo único que quería era montar a esta bella mujer a su lado y llenarla hasta el borde de sus hijos, aun no era tiempo de su objetivo y solo podía resignarse frustradamente a disfrutar de esta manera senos y culo a la vez.

Tan suaves...

Pero como todo lo bueno en la vida tenía que terminar, ambos se levantaron para darse una rápida ducha y finalmente bajar para ir a desayunar. Claro, Elise pudo haber llamado a los sirvientes para que les trajesen el desayuno a la cama, pero no quería que nadie la viese en esa vergonzosa posición con Shisui y ella misma disfrutaba bastante el desayunar en familia.

—Joven señorita, joven Shisui, vengo a informarles que los señores de la casa tuvieron que marcharse en la mañana por una emergencia en el trabajo y los jóvenes maestros se encuentran ocupados con sus trabajos. El señor Natsuo hoy se encuentra ocupado con un pequeño problema causado por uno de sus empleados, el joven Kiriya fue llamado de misión de emergencia temprano en la madrugada y el joven Asher tuvo que madrugar para grabar la escena de amanecer de su próxima película —informó el mayordomo tranquilamente y miró con un poco de lastima a Elise que se cruzó de brazos e hizo un puchero.

—¡No puede ser! —Elise quería hacer un berrinche, pero Shisui la abrazó por detrás y la elevó del suelo.

—¡Aun me tienes a mí, mi querida Eli-chan! —canturreó Shisui y empezó a dar vueltas a Elise.

—¡Shisui! —reclamó Elise mientras el azabache reía felizmente hasta dejar mareada a la chica, la cual se apoyó en sus cuatro extremidades intentando mantener dentro su cena del día anterior.

Shisui tonteó felizmente con Elise hasta que llegó el desayuno y la hizo sentarse en sus piernas mientras la molestaba constantemente haciéndola reír constantemente.

Los sirvientes cerraron los ojos ante las abiertas muestras de cariño de ambos apasionados jóvenes, tampoco es como si pudieran decir algo en sus posiciones como meros sirvientes, pero no podían evitar pensar en lo escandalosas que serían las cosas si se filtrara de alguna manera como se comportaban su joven señorita y su pareja cuando aun ni siquiera estaban casados...