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—Una Kunoichi pude decidir con quien casarse y cuando casarse, ¿Por qué yo no puedo? Si, es cierto que arriesgan sus vidas por proteger a Konoha, todas las vidas son valiosas, pero... ¿pero tengo que elegir ser una Kunoichi para querer tomar las decisiones que solo deberían de concernirme a mí? ¿Tengo que luchar día a día a las fauces de la muerte para elegir con quien casarme? Las envidio porque tienen libertad de decidir, pero no envidio que tengan que luchar por sobrevivir día a día. El matrimonio no es algo que deban elegir los demás por ti, porque eres quien va a vivir con esa persona hasta el final, nadie quiere vivir una vida miserable al lado de una persona que no amas.

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Elise tenía muchos puntos de vista de su anterior mundo, como la independencia de las mujeres y mucho más, pero en Naruto las cosas no eran así, la mujer estaba obligada a estar debajo del hombre y solo ser amas de casa, incluso los matrimonios eran concertados por el hombre de la casa, era como todas esas reglas ortodoxas y horribles de épocas antiguas, solo que las Kunoichi estaban exentas de ello debido a que podrían morir rápidamente.

Las Kunoichi y las mujeres civiles tenían distintas edades de mayoría de edad, mientras que a una Kunoichi se le considera mayor de edad cuando se gradúan de la academia ninja, lo que suele ocurrir entre los doce y trece años, hay algunas excepciones como en periodos de guerra que suelen ser exentas de ciertas pruebas y pueden graduarse antes, mientras que las mujeres civiles se les considera mayores de edad a los catorce, pero se pueden empezar a comprometer desde incluso los diez u once años.

En grandes clanes, estas reglas pueden ser ignoradas y en raras ocasiones suelen estar comprometidos desde que siguen en el útero y solo se espera que sean mayores de edad para la ceremonia de unión y los miembros del consejo empiezan a presionar para que empiecen a tener descendencia.

Elise estaba feliz de no haber nacido en un gran clan...

No quisiera estar con los Hyuga, que son ultra conservadores o con los Uchiha, que aunque no son tan conservadores como los Hyuga, no dejan de ser conservadores... de los otros clanes no sabe mucho debido a que no está asociada con el mundo ninja, pero cree que son un poco más flexibles, a excepción del Clan Inazuka que, en el mejor de los casos, se podrían considerar liberales puesto que sus instintos animales suelen dominar bastante la personalidad de cada individuo y se basan más en una relación de manada-alfa.

Internamente, Elise sabía que su popularidad bajaría mucho por culpa de esta entrevista, pero dijo lo que tenía que decirse.

Sería tachada como una niña de sangre fría sin piedad filial y una rebelde sin causa, una mujer problemática y demás, pero no dejaría que siguieran tirándole mierda con respecto a una pareja o que se metieran en su vida amorosa como se les plazca.

Entonces, apenas terminar la entrevista, ella se fue sin mirar atrás y se lanzó a los brazos de Shisui que se encontraba en su set designado.

—Muy bien dicho, tu solo debes casarte con alguien que te trate como la reina que eres, no que te pisotee y te haga daño —asintió Shisui ferozmente mientras la abrazaba protectoramente.

Su representante, entró casi echando espuma de la boca.

—¡Niña! ¡¿Sabes lo que has provocado?! ¡Ahora con esas palabras tu índice de audiencia bajará muchísimo! ¡Y ni hablar con tu índice de aprobación! ¡Eres una desgracia! ¡Solo tenías que lucir bonita y asentir a todo lo que dijeran! ¡¿Crees que tienes mucho...?!

—¿Quién te crees que eres para hablarle así...? —preguntó Shisui aterradoramente sintiendo a Elise temblar.

De miedo o de rabia, Shisui no sabría decirlo.

—Y-o... yo-o... —el representante sintió su corazón en su garganta mientras miraba con miedo el kunai que se clavó hasta la empuñadura al lado de su cabeza, cortándole parte de la mejilla y la oreja.

—¡No estás aquí para tratarme de esa forma! —exclamó Elise mientras se soltaba del agarre de Shisui, pero seguía alterada y aferrada al costado del niño— ¡S-solo eres mi representante y estás aquí para hacer más fácil mi trabajo, pero siempre me metes en estas mierdas de entrevistas que no me gustan! ¡Nunca tomas en cuenta mi palabra y siempre me pasas por alto cuando soy yo quien paga tu salario! —los ojos de Elise se llenaron de lágrimas— ¡Estás despedido!

—¡No puedes simplemente despedirme, no tienes la capacidad de hacer nada a mi contracto! ¡Tus padres lo firmaron y por ello respondo a ellos no a ti! ¡¿Solo porque eres una cantante famosa te crees mejor?! ¡Deja de ser una maldita mocosa y madura de una vez!

—Creo que no me escuchaste, te pregunté, ¿Quién...? —Shisui lentamente empezó a emanar una ligera aura asesina.

Elise de congeló del miedo, sintió como su piel se erizaba y empezaba a sudar balas.

¿... te crees...? —el aura aumentó.

Las pareces parecían hacerse más pequeñas, puntos negros empañaron su visión.

¡¿Qué eres...?! —rugió firmemente Shisui y Elise estuvo a punto de desmayarse en sus brazos si el Uchiha no se hubiera dado cuenta a tiempo y cesó todo su instinto asesino— Lo siento mucho, Eli-chan, me descontrolé un poco —habló afligido Shisui cargando a Elise que se desplomó deshuesada a su costado.

Elise estaba en shock, las lágrimas caían por su rostro y temía respirar.

—Lo siento, lo siento, lo siento... —murmuró con pequeñas lágrimas en sus ojos Shisui y Elise sintió que lentamente se iba calmando.

—S-Shisui... —habló con un hilo diminuto de voz.

—Elise-chan, lo siento mucho, no era mi intensión asustarte de esa manera... —habló ahogadamente Shisui sintiendo su corazón doler por la culpa.

—N-no... no pasa nada... solo... —Elise seguía temblando horrorizada en los brazos de Shisui, pero miró a su representante el cual se había orinado del miedo en la esquina y chilló audiblemente cuando sus miradas se encontraron—. Solo vámonos, ¿Sí?

—Por supuesto, nos iremos de inmediato a su casa —habló suavemente Shisui y utilizó un sunshin para reaparecer afuera del set de Elise.

Elise se aferró a Shisui aterrorizada, el instinto asesino de Shisui claramente había sido muy aterrador para ella, pero no era mucho comparado al terrible sentimiento que le dejaba el recuerdo del kyubi y, aunque accidentalmente el Uchiha despertó recuerdos desagradables de ese día, ella sentía la necesidad de aferrarse a él y buscar protección en él.

Durante el resto del día, Elise se acurrucó contra el costado de Shisui sin decir ni una palabra.

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¿Pueden creer que estaba pensando en 14 caps originalmente para esta historia y ahora tengo escrito hasta el 50 y tengo trama hasta para casi el cap 60?

So Mine [Yandere! Uchiha Shisui]Where stories live. Discover now