Capítulo 9 (Corregida)

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Evelyn y yo nos quedamos un poco más en la "cueva", mientras mi hermano y Jonathan salían.

Miramos todo, mientras hablábamos sobre cómo me interese sobre Hamunaptra.

Pero era difícil saber desde cuándo. Porque desde que tengo uso de razón, siempre me ha llamado la atención, sin saber por qué.

Y aunque decían que era solo un cuento de hadas, me gustaba leer al respecto, pero nunca fui tan capaz de ir y averiguar si era un mito o no.

Hasta ahora.

Cuando salimos de las ruinas, pasamos por una de las tiendas de los norteamericanos y vimos como el Dr. Allen, el egiptólogo estaba tratando de forzar un libro para abrirlo.

Y entonces, rápidamente me di cuenta del libro que traía en sus manos, su color era oscuro, muy peculiar, y era inevitable no mirarlo.

— El libro de los muertos — susurre.

Me sentí extraña desde que llegué a este lugar, pero mirar ese libro me causo escalofríos, no como los que sentí al ver al sujeto o cuando llegamos a la ciudad, fue un escalofrió de miedo, terror.

— Necesita una llave para abrir ese libro — le dijo Evelyn.

Luego de eso, caminamos hacia los chicos.

— Miren lo que encontramos — dice Evelyn.

— Estás en su lugar, fuera — aguante las ganas de reír por la reacción de mi hermano.

— Si — Beni se levanta y cuando está por sentarse al otro lado de mi hermano, este vuelve a hablar.

— Es el lugar de mi hermana, quítate — no aguante más y reí.

Beni hizo una especie de puchero y solo negué.

Me senté aún lado de mi hermano, una vez Beni se levantó.

Luego le hice un gesto de que se sentará a mi lado.

— Tranquilo, nadie te quitará ese puesto — este se sienta y me sonríe.

— Esqueleto de escarabajo, carnívoro — dijo Evelyn cuando uno d ellos norteamericanos le pregunto que traía— Lo encontramos en el sarcófago de nuestro amigo.

— Pueden permanecer vivos durante años, comiendo la carne de un cadáver — expliqué — Por desgracia para nuestro amigo, él estaba vivo cuando empezaron a comerlo.

— ¿Así que alguien los enterró con él y lo dejaron comérselo vivo? — asentí.

— Muy lentamente — dijo Evelyn.

— Seguramente no era un sujeto popular — dice Jonathan — ¿Quién era?

— Bueno, tal vez quiso tener un romance con la hija del faraón ¿No creen? — bromea mi hermano.

— Según los estudios, nuestro amigo sufrió el "HOM DAI" — dijo Evelyn.

— La peor de todas las antiguas maldiciones egipcias ¿eh? — está asiente ante mi respuesta.

— Y eran reservadas solo para los blasfemos — continúo Evelyn — En toda mi investigación, nunca supe que esta maldición fuera ejecutada.

— ¿Era terrible? — pregunta mi hermano.

— Si. Ellos jamás la usaban porque le tenían miedo — dice Evie.

— Está escrito que, si una víctima del "HOM DAI" alguna vez revivía, traería consigo las diez plagas de Egipto — dije haciendo memoria de lo último que había leído.

Nos miramos entre todos y luego de charlar otro rato, todos tomaron sus caminos para descansar.

Me acomode en mi manta mientras las palabras que aquel sujeto me dijo resonaban en mi cabeza.

"Convéncelos de volver. O todo empeorará y no habrá valido de nada, lo que hicimos"

"No deberías estar aquí"

"Amirti"

"Laqad antazartuk lifatrat tawilan"

— ¿Sabes que ha eso le llaman robar? — me voltee al escuchar a mi hermano.

— Según mi hermano y tú, se llama pedir prestado — reí bajito.

— Aria, no te rías — dije Evelyn — Y ven aquí.

Me levanté y me acerqué hacia ella.

El libro negro estaba frente a mí, pase una mano por este, sintiendo una extraña sensación.

— ¿Creí que el libro de Amón-Ra estaba hecho de oro? — asentí.

— Lo está — dijo Evelyn — Este no es el libro de Amón-Ra, esto es otra cosa.

— El libro de los muertos — susurré.

Evelyn coloco la lleve sobre la cerradura del libro.

— ¿El libro de la muerte? ¿Están seguras de que quieren jugar con eso? — mire a mi hermano y alce las manos.

Yo no me estaba metiendo con él. Siento curiosidad por sentir el sentimiento que siento hacia él, pero nada más.

— Es solo un libro — dice Evelyn — No puede hacernos ningún mal, por leer un libro.

— Evelyn, es mejor que no lo hagas — sin embargo, está ya había abierto el libro.

La llama de la fogata frente a nosotros volvió a disminuir hasta casi apagarse y luego volvió a incrementar y regularse.

— Eso pasa con frecuencia — dice mi hermano — ¿Y qué dice?.

— ¿En serio? — lo mire incrédula.

Primero no está seguro de que lo leamos y ahora quiere saber.

Dios, quien lo entiende.

— Habla de la noche y del día — dice Evelyn, luego continúa leyéndolo.

Extrañas imágenes empiezan a invadir mi mente, con sucesos, que jamás había vivido.

«Guardias, mi padre los necesita» Evelyn desde un balcón.

«Hatshepsut. Ve, ve pronto» me gritaba Evelyn, luego su grito resonó y entonces la vi caer del balcón.

Otra imagen invadió mi mente.

«Su majestad, ya está hecho lo que nos ordenó»

En las imágenes de mi mente aparecía personas extrañas, hasta que note una conocida.

«Mi reina, protegeré el libro y el sarcófago con mi vida. No permitiré que Imhotep resucité» beso mi mano con cariño.

«¿Vas a casarte con el?» empapado en sangre, se acercó a mí, aun estando herido se arrodilló.

«Lo entiendo, mi señora, no puedo reprochar su decisión, soy un simple soldado Medjai y protegerla a usted y al pueblo es mi deber» hace una reverencia y se marcha con dificultad.

Luego, una imagen pasa muy rápido. Alguien me apuñala y solo caigo al suelo. Minutos después llega el.

«¡Hatshepsut!» grito corriendo hacia mí, acarició mi rostro entre lágrimas, y grito con dolor, al mismo tiempo que me abrazaba contra él.

— ...ría. ¡Aria! — mire a Rick y luego a Evelyn — ¿Estás bien?

— Evelyn, no debiste leer ese libro — susurré, mientras las lágrimas desbordaban mis ojos.

Y seguía sin entender porque, simplemente sentía aquel sentimiento.

Está me miró confundida.

— ¡No! No debieron leer ese libro — escuchamos el grito del Dr. Allen.

Y entonces el viento se volvió más fuerte.

O eso se creía. Hasta que vimos a los insectos voladores venir hacia nosotros.

Todos empezamos a correr adentrándonos a las ruinas.

꧁•⊹٭𝙰𝙼𝙸𝚁𝚃𝙸٭⊹•꧂ (1#) (Corregida)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora