Capítulo 15

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Desde la última vez que Zee y Nunew habían tenido un contacto más íntimo, los encuentros sexuales entre ambos fueron más frecuentes, el sexo rudo y las malas palabras era habitual ente ellos, era como una especie de "rough sex", ya que Zee soltaba cachetadas en Nunew y el menor mordía el cuello del pálido sin piedad, quedaban heridos y satisfechos. Para Nunew es como un alivio el sexo agresivo con Zee, así el estrés que le causaba guardar el secreto de Leah a los Siraphop era menos. 

- ¿Por qué tu amigo se hace pasar por Leah? —Después de las sesiones para nada gentiles de intimidad, compartían una charla ligera sin necesidad de insultos. 

- ¿Por qué los Siraphop  armaron todo un complot contra ella? -Nunew arrebató el cigarrillo de los labios de Zee para darle una calada. 

- ¿En serio quieres saberlo? 

-Sí, quiero saber la razón estúpida por la que sabotean a las demás. —Tomó el cigarrillo entre sus labios nuevamente. 

Al terminar de hablar, Zee se dirigió a la suite de Leah, encontrándose a James sin la ropa de Leah, estaba vestido casual, aunque lo sorprendió fue verlo con su ropa normal y no como su hermana. 

- ¿A dónde tan arreglado? -Le echo una mirada rápida de arriba a abajo. 

-Quiero salir a caminar, no aguanto un segundo más aquí encerrado, regreso en la noche. -Sentía que estaba en las nubes cuando toco su ropa, ya que era bastante cómoda y ni hablar de los tenis, sus pies estaban descansando.

 —¡Usa protección! —Le grito su amigo cuando lo vio salir de la suite.

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Salió por las escaleras de emergencia para que nadie lo viera, al bajar vio el dichoso auto del señor Siraphop, subió ahí encontrándose con Net que tenía su tonta sonrisa arrogante, el mayor se deslizó por el asiento para acercarse a James, este se hizo a un lado para alejarse, pero nuevamente el azabache se acercó, haciendo que estuviera contra la puerta del coche. 

- ¿Puede hacerse para allá? Quiero espacio personal. 

- ¿Te recuerdo tu precaria situación? -James Rodó los ojos ante lo dicho por el otro.

 -Haga lo que quiera. 

Mala elección de palabras James, pues Net pasó su brazo por los hombros del otro, apegándolo a su cuerpo, James se sonrojó inmediatamente frunciendo su ceño, su corazón latió agitado ante tal cercanía y ¿cómo no? Aquel hombre apuesto lo tenía contra él, su olor, sus ojos, sus grandes manos decoradas con anillos que marcaban sus venas, la sonrisa cuadrada, su risa ronca, su voz bastante masculina, su cabello color azabache peinado de forma cuidada, la vestimenta elegante, la veta verdosa que se le formaba en la zona del bigote dando un indicio de que apenas se había afeitado y ni hablar de su rostro que daba a veces la pinta de un adulto joven a pesar de que ya estaba en sus 30's. 

- ¿Por qué me miras tanto, me quieres besar acaso? -No se dio cuenta de que lo estaba mirando de más. 

-No.

 -Qué negativo, en fin, un día de estos vas a terminar cediendo. -Le sonreía altanero. 

-¿A dónde vamos? 

-A cenar, algo tranquilo por ahora. 

-Nada de por ahora, todo quedará en salidas. 

-Claro. 

En el restaurante, James pidió las cosas más caras que había ahí, si  Net lo estaba chantajeando al menos que le costará, ¿no? Al mayor no le importo lo que pidió el menor, pues ordenó casi lo mismo, al final podía costearlo y ni siquiera le parecía tanto dinero. 

La cena transcurría en un ambiente normal, James no insultaba o se quejaba de Net y el azabache cesó con las burlas, hacía el pálido, por fin platicaban como dos personas normales lo harían, aunque más que una plática amistosa se asimilaba a una pareja yendo a disfrutar de su compañía en aquel restaurante que era conocido por ser uno solamente para parejas. 

-La verdad es muy horrible usar tacones, es una tortura para los pies. -Reía James junto a Net. 

-Caminas muy bien con ellos, aunque a veces veía que te temblaba el pie, me quería reír, pero me tenía que aguantar. -James le tiro una servilleta en forma de juego. 

-No estoy acostumbrado a esos zapatos, soy más de botas y tenis. 

-James, no te enojes por lo que voy a decir. 

-Solo dilo. -Sonreía el menor. 

-Los vestidos y las faldas te quedan hermosos y ni hablar del cabello largo, aunque prefiero verte como estás ahora. -El pelinegro se sonrojó un poco, el de cabello azabache, lo noto y no pudo evitar sonreír enternecido por lo lindo que se veía así. 

Las palabras no pudieron salir de su boca, el nerviosismo le ganó y el hombre mayor lo pudo notar, por lo cual posó su mano encima de la del menor, tomándola del dorso, acariciando sus nudillos con sus dedos mientras se veían a los ojos, no duro, ya que James recordó que aquel hombre le causó un grave "accidente" a su hermana y a Net se le cruzó que solo era su bufón del trabajo, no tenía por qué comportarse así con él. 

Aquella noche fue bastante rara para ambos, salieron casi huyendo a sus respectivas habitaciones al llegar al hotel, Net pensaba sentado en la orilla de su cama aquella sensación de acariciar la piel de James, tenía que enfocarse a lo que había asisto ahí, solo ayudar a Samantha y ya, en una semana sería el certamen así que debía solo tener su atención en el plan no obstante ya se había desviado del objetivo, chantajear a James no estaba en los planes, pero hacer confesar a Leah ya no estaba en sus posibilidades aunque podría exponer el secreto cuando quisiera el problema es que él lo quisiera hacer y no quería. 

James daba vueltas en su cama para quitarse cualquier pensamiento que tuviera de su jefe, no quería seguir recordando cada detalle de su apariencia o su forma de ser, no quería que aquellas imágenes que su mente reproducía de aquel hombre atractivo de cabello marrón dorado lo cegara, pero ahí estaba pensando en el tacto áspero de las manos del moreno en su piel, el olor de su espalda que pudo sentir aquellas veces que bailaron salsa en el club en los atardeceres de cada fin de semana, el cómo sus ojos oscuros destellantes le observaban detalladamente y como parecía no querer soltarlo de sus brazos, no podía olvidar o más bien no quería olvidarlo.

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Historia original por @geu_linlin


Todo por la corona -NetJames-Where stories live. Discover now