Capitulo cuarenta y dos: Disco.

47 3 0
                                    

-¿Joaco? -Me sobresalté abrochando gran parte de los botones de mi camisa que luego de unos segundos había intentado abrir. -¿Estás presentable?

Reconocí la voz de Luis, me apresuré en contestar. -¡No! Espérame unos segundos.

Sentí como mi corazón retumbaba en mi pecho, como si hubiera sido atrapado haciendo algo indebido. Lo cual en cierta parte lo era, sin embargo, no alcanzó a ser mucho más.

Pude escuchar la risa de mi pololo por la línea del teléfono, mientras me cambiaba a mi propia ropa, con la que había llegado originalmente.

-No te rías. -Susurré, aunque supe al instante que me había oído, ya que siguió riendo.

Terminé de abrochar mis jeans está vez, notando lo incómodos que se sentían en mi situación, mi... cosa, no estaba lo suficiente erguida como para molestarme, pero estaba algo... Emocionada.

-¿Terminaste? -Escuché la voz de mi novio.

-Aun no. -Respondí avergonzado. Volviendo a escuchar su risa.

-¿Puedo entrar ya? -Volvi a escuchar la voz de Luis a través de la puerta.

-Entra. -Contesté bajando el volumen de mi celular, aún no quería cortar mi llamada con Nicolás.

No tardó en entrar Luis, dirigiéndose directamente a su propio casillero, no sin antes mirarme de reojo con una pequeña sonrisa que no supe leer.

-¿Sigue la idea de ir a beber en pie? -Carcajee, cierto.

-Si ustedes pagan, por supuesto. -Me di la vuelta apenas noté a Luis sacarse la camisa.

-Fresco. -Me regañó. -Solo por ser tu primer día te invitaré yo, la próxima vez serás tú.

-Claro. -Acepté.

Pasaron solo unos segundos, cuando sentí mi celular vibrar, afortunadamente Nicolás aún no cortaba la llamada, convenientemente era un mensaje del mismo.

"¿Beber?"

Mordí mi labio leyendo el mensaje. Miré de reojo los movimientos de Luis, quien no parecía ni un poco interesado en mis acciones.

-¿No estabas cambiándote, Joaquín? -Preguntó de pronto, haciéndome sobresaltar.

-Eso hacía. -Contesté.

-¿En serio? -Su tono llamó mi atención. Me di la vuelta notando cómo había cambiado su ropa a tiempo récord, sonreí.

-¿Qué? ¿Quieres ver? -Bromeé. Poco pasó cuando sentí mi celular vibrar seguidamente.

-Pff... -Ahogo una risa. -Pregunto porque entraste hace un rato, aún tienes la ropa puesta.

-Me entretuve en el teléfono. -Miré de reojo la pantalla de mi celular, demostrando cada uno de los mensajes de Nicolás.

"Dile que se vaya, necesitas privacidad."

"¡¿Ver?!"

"Joaquín, no me gustan esas bromas."

-Apurate, te estamos esperando. -El tono de voz de Luis volvió a llamar mi atención.

Lo miré notando cómo ya estaba completamente abrigado y preparado para salir, me dedicó una sonrisa antes de salir de los vestidores.

-Es uno de mis colegas. -Me acerqué el celular al oído.

-Tienes bastante confianza, tomando en cuenta que se conocieron hoy. -Reí.

-Me agradan. -Me dediqué a cambiar mi ropa.

-Se nota. -Noté su sarcasmo.

Sonreí. -¿Celoso?

Huaso. [BL]Where stories live. Discover now