Capitulo quince: Hermanos.

81 5 0
                                    

¿Que mierda había sucedido?

El...

El había...

¿El rechazó mi beso?

¿Por qué?

¡El dijo que era bonito!

Dios mío, mi madre me lo advirtió, nunca confíes en los hombres guapos.

Te endulzan el oído para ilusionarte y cuando menos te lo esperas... Te hacen pagar tu parte de la comida.

Y eso que él invitó.

Tacaño infeliz.

— ¿Qué le pasa?— Una voz llamó mi atención, haciéndome tomar atención a las visitas.

— No lo sé, y no me importa.— Respondió la chica sentada a solo unos metros de mí.

— Está enamorado.— Respondió mi abuelo de pronto, haciéndome fruncir el ceño.

Sí, nos había visto. Desde hace rato había estado cerca mirando desde la ventana como una vieja metiche de la esquina. Luego de que Nicolás se fuera como si hubiera robado algo, él estuvo prácticamente igual de descolocado que yo, preguntándome qué había pasado, si es que sin querer lo pinche con la barba y se asustó.

Y no, ese mismo día me había afeitado.

Nada es excusa, Nicolás, no olvidaré está ofensa.

— ¡¿Qué?! ¡Hace solo unos meses que se fue y ahora ya está pololeando!— Exclamó Ethan.

Sí, Ethan el día de ayer vió como había prácticamente ignorado por completo sus mensajes, y no encontró mejor razón para venir que esa.

Más encima, trayendo con él al personaje con el que mejor me llevo en mi casa. Arianna.

— Si.— Contestó mi abuelo.

— No es así.— Agregué intentando calmar a mi hermano, que me miraba como perro asustado.

— Yo los ví.— Siguió.

— Debería cambiar de lentes.— Respondí, bufo con cansancio, sin embargo se dió por vencido.— ¿Por qué vinieron?

— Te extraño.— Respondió mi hermano, suspiré, me esperaba su respuesta.

— ¿Y por qué la trajiste a ella?— Pregunté con respecto a Arianna, podría entender la excusa de extrañarme de parte de Ethan, pero de Arianna no. Ella era una mujer sin corazón.

— ¿Acaso no puedo extrañarte?— Preguntó frunciendo el ceño.

— Mentira.

— Bueno si, no te extraño.— Ni intentó demostrar lo contrario.— Solo quería venir.

— ¿Y Javi?— Pregunté con respecto a mi otro hermano menor.

— Tiene clases, incluso tienen un amigo nuevo.— Abrí los ojos sorprendido, la verdad es que en el grupo de Javier siempre habían sido los mismos, era extraño que alguien más soportara su carácter de mierda.

— Debiste haber traído a Javier antes que a esta.— No la nombré porque sabía que eso le molestaba.

— ¿Esta?— Remarcó, aguanté una sonrisa.

No seguí hablando, a pesar de que seguí escuchando sus quejas, aunque no lo haya notado, si los había extrañado.

— ¿...Nico?— Un nombre llamó mi atención al instante, miré de dónde provenía, era mi abuelo hablando por teléfono.

Huaso. [BL]Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora