PASIONES REBELDES h.s

Capitulo 25: Sigue la busqueda.

Salí apresurada de la casa de Harry, no quería dejarlo, pero no me arriesgaría a que me apartaran de él. El frio era casi insoportable, volví mis manos a mis bolsillos y mi cuello intentaba buscar un poco de calor en el tibio polar, mi mirada dio un par de vueltas y me pude percatar de que la luz de mi habitación estaba encendida, la luz fluía por la ventana creando sombras en las paredes que separaban mi casa de la de Harry. Corrí y entre rápido tire mi abrigo a un lado avise mi llegada con un corto y simple grito al aire de ''Ya llegue...'' subí a paso lento las escaleras, camine por el pasillo hasta llegar a mi puerta, me acerque lentamente y mire de reojo, un chico sujetado de mi ventana miraba a hacia afuera contemplando la vista, su vestimenta me hacía percatarme de quien era.

- Mmm...entonces es así como Harry entra a tu habitación – su raspada voz me sacaba de quicio, giro a verme y solo lo contemple con los brazos cruzados, manteniéndome firme - ¿Qué? – pregunto ingenuo.

- Eso no te incumbe – respondí molesta caminando hacia a él a paso lento.

- Deberías de saber que...el siempre intenta tomar el papel de Romeo – bromeo sujetándose en la baranda de mi ventana, sacando un caja de cigarrillos de su chaqueta.

- ¿Qué haces aquí Zayn? – dije molesta, mientras el solo intentaba encender un cigarrillo.

- También me alegra verte, querida amiga – sonrió burlón, bajando la mirada.

- Esto terminara por matarte – dije refiriéndome al cigarrillo el cual le quite de su boca y lo tire por la ventana.- No lo hagas en frente de mi – gruñí intentando volverme alejar, pero fue mas rápido y me tomo por la cintura.

- Necesito que me escuches – susurro acercándome a el contra mi voluntad.

- ¡Zayn déjame o voy a gritar! – respondí exaltada al no poder hacer que reaccionaran mis músculos.

- ¡______! – dijo fuerte llamando mi atención – No te are daño ni nada que no quieras...- susurro mas tranquilo, soltándome por completo, solo lo quede viendo confundida, al rato solo sentí soltar una leve carcajada.

- ¿De qué te ríes? – dije molesta con los nervios a flor de piel.

- De que por un simple beso, hayas perdido la confianza en mí – sonrió sujetándose de espalda en la pared. El silenció se hizo cómplice durante varios segundos entre nosotros.

- Dejemos los juegos ¿si? – dije rompiendo el hielo, me sentía mas segura y menos descolocada.- ¿Cómo entraste?

- Por la puerta, como una persona normal, no como tu noviecito que se confunde con las ventanas – rió sarcástico cruzándose de brazos.

- No te incumbe Zayn, el es mi novio que haga lo que se le antoje.- fruncí el ceño.

- ¿Y tus mamá y Liam saben? – alzo una ceja.

- ¿los chicos saben que estas aquí?- dije molesta cambiando el tema.