Capítulo 77: Ministerio

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—¡Pero puede intentar matarte! — sollozó.

—¡¿Qué demonios?! — dijo Tom con disgusto, pero se detuvo cuando lo miré suplicante, a lo que cruzó los brazos y bufó — yo jamás le haría daño a la persona que amo, no estoy demente — comentó malhumorado y Ginny alzó la mirada en Shock mientras sus sollozos cesaron mientras los gemelos solo rodaron los ojos.

—¿Qué? — dijo Ginny mirándolo raro, como entre desconfianza y sorpresa, con un toque de que fuera un monstruo baboso de tres cabezas.

—Digamos que este Tom… estuvo conmigo desde hace tiempo bajo mi cuidado, y esta muy lejos de ser la persona a la que nos estamos enfrentando ahora mismo — dije y parecía querer creerme, pero no podía. — fue mi novio — ante eso abrió los ojos como si fueran a salirse de su lugar.

—¿por qué todos reaccionan así? —dijo Tom tras de mi — fue suficiente de abrazos, ya suéltala, ya te calmaste. — pero Ginny, al contrario, se aferró a mi cuello haciendo que Tom entrecerrara los ojos con molestia y me mirara esperando que la alejara, aunque por la expresión de Tom, notaba que Ginny lo retaba con la mirada. Esta chica es realmente bipolar.

—Ginny… — dije y negó.

—No sé porque tu tienes que cuidarlo, pueden hacerlo los demás en la orden — dijo y eso pareció indignar más a Tom.

—Porque fue mi idea traerlo — dije y abrió me miró sin creerlo — fue un favor que le pedí a Dumbledore, a cambio de otro favor… no te voy a pedir que confíes en él, pero si te pediré que confíes en mi… ¿puedes? — dije y ella asintió sin dudar.

—Entonces ¿Harry ya lo sabe? — dijo con duda y suspiré.

—No creo que una carta sea la mejor manera de darle la noticia — dije y asintió entendiendo.

(…)

Hoy venía Dumbledore, seguramente nos pediría que no dijéramos a Harry nada de lo sucedido, cuando la comida se sirvió, los chicos parecían haberse relajado, había conocido a varios miembros de la orden, a nadie se le reveló como tal la identidad de Tom, por petición mía, esto solo quedaba entre mis personas de confianza.

Winky parecía feliz, Rita para mi sorpresa hablaba de forma más cordial con todos los presentes, sentándose junto a Karkarov, esa era una imagen impresionante para ver, Barty por su parte se sentó a un extremo de la mesa, donde me encontraba yo con Tom y los gemelos, para disgusto de Sirius.

Pronto apareció Dumbledore, quien pareció perplejo al ver a Barty y los demás.

—Hola, profesor — dije con tranquilidad.

—Supongo que la presencia de estos invitados es obra de usted — dijo mirándome sobre sus lentes de medialuna.

—Claro, son mis aliados — dije y Snape, que estaba tras Dumbledore parecía auténticamente sorprendido.

—Eso quiere decir que confía en ellos — dijo suspirando mientras asentía. — necesito un favor de su parte…

—Que Harry no se entere — dije y pareció desconcertado al igual que todos, pero su mirada se relajó mientras se sorprendía.

—Al parecer entiende perfectamente — sonrió complacido mientras asentía. — con respecto a su juicio.

—Yo lo resolveré, usted ya tiene suficientes problemas — expliqué sorprendiendo a todos.

—Hermione, piénsalo bien, el ministro es… — intentó decir Remus.

—Terco, hombre con prejuicios, claro, pero al final yo saldré librada, sino puedo con este juicio ¿Cómo podría ser parte de la orden? — dije e intercambiaron miradas entre todos. — confíen en mí, Sirius, tú lo hiciste en su momento… — dije en su dirección.

¡¿Soy Hermione Granger?!Kde žijí příběhy. Začni objevovat