[Terminada] Lo que Amo de Ti [Historia Lésbica]

Parte 47

Hola! les dejo cap dominguero :D 

Capítulo 46

Nora oyó risas traviesas que venían al otro lado del pasillo, y sabía a quienes les pertenecían. Suspiró y, aunque no era de su incumbencia, no pudo contra la curiosidad y empujó la puerta de Emma. Puso las manos en la cintura y arqueó una ceja, igual que una madre mirando a su hija con las manos en la masa.

Harley y Emma estaban en la cama, cuchicheando como dos adolescentes. En vez de dejar de reírse, cuando vieron a Nora sus risas aumentaron y se hicieron a las inocentes.

—¿Qué es esto? —Preguntó Nora tras notar que ambas vestían ropa ligera como si fuera un viernes por la tarde. No pudo evitar poner la vista sobre los sensuales muslos de Harley y se preguntó cuánto tiempo faltaría para que los abriera para su hermana menor.

—¡Ay! No es nada —dijo Emma—. Solamente nos contábamos experiencias.

—¿Sobre qué?

—Te sonrojarías si supieras —respondió Harley—. Sólo diré que tienes una hermanita muy atrevida.

—¡Eh, cállate! —Se quejó la otra muchacha y le dio un pellizco de juego en el brazo.

Nora resopló.

—Escuchen, no sé lo que pretenden ustedes dos, pero no funcionará.

—Sólo somos amigas —Harley frunció ligeramente el ceño—. No tienes por qué ponerte en ese plan.

Emma se quedó callada tras notar que Harley había cambiado su humor, y no era para menos. Desde que ambas decidieron ser amigas, Nora había estado entrometiéndose como si estuvieran haciendo algo indebido. Emma se lo había tomado a juego, pero la otra sí que estaba marcando su límite.

—Bu-bueno... —Nora tartamudeó—, no me gustaría que salieran lastimadas. Como sea, tengo que apurarme.

—¿Vas a salir? —Preguntó Emma antes de que su hermana saliera del cuarto.

—Sí. Resulta que tengo una cena con los maestros del Remington. No quiero ir, pero mejor me quito la cara de amargada.

—Mucha falta te hace —aseguró Harley con irritación.

—Buena suerte —Emma se apresuró a despachar a su hermana antes de que los humos entre ella y Harley se hicieran más densos y estallara una guerra.

Nora entendió el mensaje y supo que no podía intervenir en lo que su hermanita hacia con su nueva amiga. Les lanzó a las dos una mirada de advertencia y se fue, cerrando la puerta al salir.

Cuando se marchó, Emma soltó el aire que estaba conteniendo y se recostó sobre la cama.

—Cielos. ¿Por qué le molesta que seamos amigas?

—Tal vez es porque sabe que tarde o temprano tú y yo acabaremos en la cama.

—¿En serio? —Sonrió Emma con una miradita desafiante—. Ya me viste en el Only, no sé qué otro interés puedes tener.

—No es lo mismo mirarlo en la pantalla, que tenerlo de cerca y probarlo.

Emma se quedó mirándola con una risita juguetona y sin saber cómo contestar a ese comentario. Harley se acostó junto a ella y le acarició la cara. Tenía la piel muy suave y blanca, como una princesa durmiente.

—Eh, no es del todo cierto. Estoy aquí porque eres buena chica. Me divierto a tu lado y si a tu hermana no le gusta, pues que se joda.

—Debe estar celosa —insinuó Emma—. No hay que prestarle atención. La pobre necesita amigos.