Capítulo 10

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Harry termina llevándolo a un lugar al otro lado de la ciudad, un hotel elegante que tiene un nombre que no puede pronunciar, donde los botones, junto con la gente que entra y sale, visten trajes y faldas que llegan a sus rodillas con tacones sonoros. Harry y él destacan, sin duda, pero Harry ni los mira, simplemente guía a Zayn a través del edificio hasta que suben quince pisos y se sientan en el patio al aire libre del restaurante del hotel.

No es tan elegante como el hotel en sí, no hay molduras doradas ni techos artesonados con una fuente brillante a juego. Las sillas son redondas y curvas, no suaves y elegantes. Afuera es diferente, todo negro con líneas y bordes ásperos. Las mesas son cuadradas, y como las sillas son de hierro con perfectos cojines rojos encima. No parece que nadie se haya sentado en ellas nunca, y mucho menos hoy. Casi cada mesa está llena, gente riendo y charlando detrás de gruesas gafas de sol. Están amontonados alrededor de los bancos con las almohadas suaves, descansando y bebiendo bajo el sol de la tarde, rodeados de plantas artificiales en cerámica negra alta.


Zayn se pregunta si este es el tipo de lugar que frecuenta Harry, o si es un lugar especial. Espera lo último, pero no es lo suficientemente ingenuo como para creer que Harry lo llevaría a un lugar especial en su primera salida juntos.

Están sentados en una mesa al lado de la barandilla, dándoles una vista perfecta de la ciudad, y Zayn siente como la brisa roza sus mejillas, refrescando su cálida piel mientras observa a Harry frente a él. Lleva un par de gafas de sol, Zayn está bastante seguro de que son gafas de sol de mujer, pero enmarcan muy bien el rostro de Harry, el único inconveniente es que Zayn no puede ver sus hermosos ojos verdes.

"¿Has estado aquí antes?" Zayn pregunta, tocando el borde de la mesa donde un poco de pintura parece estar descascarándose, el único defecto que Zayn ha visto desde que llegó al edificio.

Harry frunce los labios por un segundo y toma un sorbo de su agua. "No he estado aquí desde que Louis y yo rompimos. Vinimos aquí un par de veces. Ha cambiado desde la primera vez que vine; solía tener más colores marrones".

Zayn se muerde el labio y asiente con la cabeza. Louis es el chico con el que Harry salió entre terminar la universidad y hasta que volvió a encontrarse con Zayn en el bar esa noche. Le había contado en una ocasión, hace tiempo, que en realidad no fue gran cosa, que nadie lo sabía y que en su mayoría había sido solo sobre sexo. Zayn asintió y trató de ignorar el azul oscuro y tormentoso que envolvía a Harry cuando hablaba de eso, diciéndole que había una tristeza muy arraigada sobre sus recuerdos con Louis. Aquella conversación había terminado con Harry dándole una de las mejores mamadas de su vida y lo único que pudo sacar de su boca fue una serie de obscenidades.

"Es realmente agradable", dice finalmente Zayn, asintiendo con la cabeza en dirección a la ciudad. "Tiene una vista increíble."

"Sabía que te gustaría esa parte", dice Harry, sonriendo. "No estaba seguro a dónde querrías ir. Solo dijiste que querías salir..."

"Después de la otra noche, no estaba seguro de que quisieras, así que pensé que una invitación abierta funcionaría mejor", responde Zayn encogiéndose de hombros. "Te gusta estar a cargo, así que solo te lo pedí, con la esperanza de que aceptaras ser visto conmigo en público".

Harry asiente, tomando otro sorbo de su agua. Se ve pensativo por un momento, sus cejas juntas. Desliza sus lentes de sol hasta que descansan sobre su cabeza y mira a Zayn con ojos verdes cristalinos. "¿Has comenzado alguna pintura recientemente?" Zayn niega con la cabeza. "Es una pena, me encanta cuando pintas. Me dirás cuando lo hagas, ¿verdad? Quiero venir y mirar, si te parece bien".

"No sabía que te gustaba verme pintar", dice Zayn con cuidado, porque realmente no sabe que a Harry le gusta eso. Sabe que Harry tolera la pintura corporal después del sexo y, a veces, en raras ocasiones, aparece de la nada, si Zayn menciona sobre pintar en algún mensaje, se acuesta en la cama de Zayn con un libro o toma una siesta mientras Zayn pinta hasta la madrugada, hasta que sus huesos se sientan pesados y su mano tenga calambres.

Harry le sonríe, una curva perezosa de sus labios. "Si, me gusta."

"¿A pesar de que normalmente estás durmiendo cuando sucede?"

Harry se ríe, fuerte y brillante, el sonido sale como un resoplido. "Sí, incluso cuando estoy durmiendo".

Zayn le sonríe y siente como si estuviera flotando, su estómago revoloteando al poder hacer reír a Harry, incluso si la noche anterior había sido la causa de su ira. Está listo para decir algo, con ganas de continuar la conversación para tratar de aprender más sobre las cosas que hace que le gustan a Harry, pero el rizado está mirando detrás de Zayn, con los ojos muy abiertos.

"Oh, mierda", gime Harry, levantando una mano hasta su frente, tratando de bloquear su rostro.

"¿Qué ocurre?" pregunta el moreno, su voz mezclada con preocupación.

Harry no tiene la oportunidad de responder porque un hombre grita su nombre y le da una palmada en la espalda, Zayn asume que esa es la razón del repentino cambio de comportamiento de Harry, por qué pasó de azul a gris en cuestión de segundos.

"Harry, ¿qué diablos estás haciendo aquí?" El hombre pregunta con una sonrisa enorme, se gira y envuelve sus brazos alrededor de una mujer. "Hey, ¿podemos poner tres sillas en esta mesa, por favor? No necesitaremos otra, esta está bien, gracias."

El miembro del personal detrás de él, a quien Zayn no había visto hasta ese momento, asiente con la cabeza y desaparece. Cuando regresa, está con otro hombre y están deslizando tres sillas para unirse a Harry y Zayn y llenando los dos espacios vacantes. Zayn está separado de Harry por dos sillas a la derecha y tres a la izquierda. Se siente abrumado, viendo como el hombre toma asiento junto a Harry y la mujer toma asiento junto a él. Y en un abrir y cerrar de ojos, dos hombres más y otra mujer se unen a la mesa, sonriendo ampliamente y besándose en la mejilla. Ninguno de ellos le presta atención a Zayn, simplemente se dejan caer en sus asientos y le pregunta a Harry qué está haciendo aquí.

"Vine a almorzar", dice Harry, señalando a través de la mesa a Zayn.

"Oh, Cristo", dice el primer hombre, el que originalmente interrumpió su conversación, no uno de los otros dos que le están dando miradas raras a Zayn. "Debes pensar que somos terriblemente groseros. Me llamo Chris, esta es mi novia, Alice". Ella le sonríe, filas perfectas de dientes blancos brillando hacia él por un momento antes de que sus ojos bajen al menú.

El hombre, Chris, señala a la mujer sentada entre su esposa y Zayn, la que tiene el cabello largo y rojo con raya en el centro con un delineado alado afilado en los párpados, que la hace parecer un gato. "Ava", dice con voz alta y ligera.

"Will", dice el hombre que ocupa el asiento junto a Zayn, con la boca escondida detrás de una horrible barba que Zayn intenta no mirar. "Y ese es Brady", agrega, señalando al rubio que está sentado junto a Harry y hablando con el mesero.

No se molestan en preguntar su nombre, simplemente se enfrascan entre ellos y comienzan a entablar una conversación sobre cosas que a Zayn no le importan una mierda. Él los observa hablar y los mira fijamente, tratando de controlar el rojo burbujeante de ira que está tratando de filtrarse por sus poros, emanando lentamente como lava luchando por salir de un volcán. Y Zayn está listo para estallar, como un tornado.

Zayn se mantiene en silencio, mirando el paisaje urbano debajo de ellos, observando cómo las nubes se desplazan lentamente por el cielo hasta que llega su comida, y luego come en silencio, ignorando las miradas que Harry le lanza cada pocos minutos. Hay algo bailando detrás de los ojos de Harry, pidiendo ser entendido, pero Zayn no puede ver nada más allá del aura gris de Harry y de la suya propia de color rojo vibrante.



Tu amor es un juego a esperar >>ZARRY<<Where stories live. Discover now