Un Jonio en Zaun - ¿Sarah querría comerciar con Jinx?

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Llegaron a un amplio recinto que no era mas que una gigante cueva de formación natural que daba a la parte exterior de una montaña. La entrada de la cueva estaba protegida por un grueso armazón con amplios y también gruesos vitrales incrustados, algunos bien conservados y otros ya rotos, cuyos vacíos habían sido reemplazados por pedazos de metal y de madera. Este espacio fue totalmente adaptado para ser habitable ya que también el piso tenía un mosaico de cuadros que alternaban entre el blanco y el negro... parecía que había sido construido hace siglos. El brillo de los últimos rayos de sol eran divididos por los colores variados de los vitrales que estaban en buen estado, hasta que Jinx accionó la luz artificial y un enorme candelabro con grandes cristales transparentes iluminó preciosamente la gigante habitación pues se mezclaba con los colores rosados, morados, naranjas, azules y verdes de los vitrales iluminados por el atardecer. La estructura parecía ser aun mas antigua que las partes mas descuidadas de Zaun, no le cupo duda que fue construido hace siglos y que efectivamente podría tener el tamaño de un palacio si se atreviera a recorrer los pasillos a donde la luz no llegaba al fondo de esa escondida montaña. Todo estaba en orden con un desorden particular y al parecer permanente, sobre todo con herramientas, planos, dibujos, muñecos y otras misceláneas, había tres sofás uno muy viejo y los otros dos parecían de lujo, mientras que cerca del vitral  había una mesa con una silla... del otro lado, a lo lejos, se veían otros tres pasillos en completa oscuridad.

No le desagradó ese lugar en lo absoluto, pero estaba exageradamente lejos y complicado de llegar. Se acercó a los vitrales y se dio cuenta que estaban en lo alto de una frondosa montaña cuyos altos arboles parecían esconder este lugar mientras que al mismo tiempo se podía contemplar el puerto del Este desde ahí; incluso enfocando la vista, el barco de Miss Fortune podía ser distinguido. Sería mucho más fácil si encontrara una salida en esa montaña que si tratara de regresar por donde vino.

Jinx sacaba de un frigorífico un par de platos con comida preparada congelada asaltada de una tienda de conveniencia en Piltóver pocos días atrás. Los metió a una especie de aparato con forma de caja con luminiscencia interior azul y estuvieron calientes y olorasamente exquisitos en minutos. Yasuo ya había visto un par de veces este tipo de sistema que solo los adinerados podían poseer, la única diferencia es que este parecía ser una imitación barata bastante funcional... olió la comida y fue inevitable no ir a sentarse donde Jinx lo esperaba con una vela prendida en un cupcake con una cereza arriba, dos copas llenas de vino y comida gourmette instantánea en la mesa junto al vitral, ya había acercado otra silla.

—Desde que llegué aquí no dejo de sorprenderme—admitió Yasuo.

—¿En serio? Que bueno porque odio lo aburrido, y hoy de verdad es mi cumpleaños.

—Dejé de dudarlo desde que me apuntaron en el bar—contestó y le dio un mordisco a su bocado, realmente estaba hambriento.

—Mis otros cumples son cuando hubo buenas explosiones—dijo con un tono de amargura devorando con ansia un gran pedazo de pescado frito y levantándose para marcar el día presente en el calendario pegado en uno de los frigoríficos. Luego puso a Carapescado en uno de los sofás cerca de ellos.

—Oh entonces feliz cumpleaños Jinx–la felicitó con un bocado en la boca al entender que era el verdadero— la vela prende raro ¿deberás pedir un deseo pronto no?— tragó la comida de una y preguntó al ver las chispas que sacaban la mecha de su supuesta velita.

—Si ya tenemos nuestro deseo—instantáneamente le sopló y quitó la vela, la volvió a prender y la lanzó hacia el piso donde no había nada a dos metros a la redonda y ahí explotó cinco segundos después en ese mismo rango dejando una mancha oscura sobre el piso. El azulejo parecía ser bastante resistente.

"Cuidado con lo que te rodea Yasuo" se dijo a sí mismo.

—¿Y que significa tu nombre? Ya- Su-O

—Hombre pacífico—dijo y por primera vez rió en una conversación aunque con cierta ironía.

Viaje al Festival de la Flor EspiritualWhere stories live. Discover now