Adicto a tu piel ©(+21)[OT7]✓

🥀𝕯𝖎𝖊𝖈i𝖘𝖊𝖎𝖘,🥀

¿ Han sentido la desesperación alguna vez? Es una sensación que te invade y te carcome, te deja sin argumentos y desesperadamente te hace replantearte tu existencia. No hay nada más cruel que sentirte al borde del colapso...y por si fuera poco...el ser se hunde.

-¿ Aún no despierta?- pregunta Jin.

- No- responde Jungkook quien se encontraba balanceándose sentado en una silla.

- Jungkook...creo que debes tomar un descanso- dijo Jin.

- No, no, no y no. Hasta que ella no despierte no planeo levantarme- dijo totalmente seguro.

- Ya lleva días así. Creo que debes de tranquilizarte. Cualquiera de nosotros puede cuidarla- dijo Hoseok.

- Dije que no- levanta la cabeza- largo de aquí. Necesito soledad.

Ya había conseguido regular su temperatura, esta era normal. Pero lo que realmente le preocupaba al pelinegro, era el hecho de que debería haber despertado ya. Cosa que definitivamente es bastante rara.

Jungkook sentía un desespero inmenso al ver que ningún tipo de cuidado funcionaba.

- Supongo que no tengo otra opción- muerde su muñeca, de ésta brota rápidamente sangre.

-¡ Ni siquiera lo pienses Jungkook Casttle!

Jungkook voltea a ver y se da cuenta de que era Taehyung quién le había hablado así.

-¿ Qué tiene de malo? Sólo intento salvarla- replica el chico.

- No es la correcta opción. Piénsalo. Existen hospitales, ahí estará bien custodiada- sugiere Taehyung- Me parece excesivo darle sangre de vampiro. ¿Estás consciente de que si ella muere o algo fallas se podría convertir en vampira?- regaña Taehyung, Jungkook baja su cabeza.

- ¿Qué mierdas hacemos entonces?- pregunta Jungkook enojado.

- Tenemos el dinero suficiente hasta para comprar todos los hospitales de la ciudad- habló cortante-Hermano, creo que debemos llevárnosla a un hospital.

- Puede que tengas razón. ¿ Pero y si no despierta?- lo mira, el mayor calla.

- Debemos de ir a un hospital- pone su mano sobre el hombre de su hermano menor- Vámonos.

A Jungkook no le quedó otra que aceptar. Recogieron algunas cosas y la llevaron al auto. Ambos se montaron, Jungkook se quedó en el asiento trasero junto a Meredith, la cual no despertaba aún. Tae solo pisó el acelerador y tomaron camino rumbo al hospital. Dentro del auto habitaba el silencio, una atmósfera pesada y un ambiente tenso era el que había en esos momentos. Ninguno de los dos dijo ni una sola palabra durante todo el camino.